
En medio de la tensión desatada por el plan de los partidos independentistas de Cataluña de proclamar la secesión de la región si gana el "sí" en el referéndum previsto para octubre, el Tribunal Constitucional español les propinó ayer un golpe: anuló las partidas presupuestarias destinadas a financiar la consulta.
El alto tribunal estimó parcialmente un recurso interpuesto por el Gobierno español contra la ley de presupuestos de Cataluña para este año y consideró inconstitucionales las partidas incluidas en las cuentas "en el caso de que se destinen a la financiación" de la votación anunciada por el Gobierno catalán para el 1 de octubre.
"Ninguna partida del presupuesto de la Generalitat para 2017 puede ser destinada a cualquier actuación que tuviera por objeto la realización, gestión o convocatoria de aquel proceso referendario", resolvió el pleno del Tribunal por unanimidad.
El Parlamento catalán aprobó en marzo los presupuestos de la región para 2017. El Gobierno de Mariano Rajoy impugnó la ley ante el Constitucional y el alto tribunal suspendió cautelarmente las partidas relacionadas con la posible financiación del referéndum.
Los partidos independentistas catalanes que tienen mayoría en el Parlamento regional, pretenden convocar la votación de cara al 1 de octubre pese a la oposición frontal del Gobierno de Mariano Rajoy.