“Creo que si volviera al pasado, no aceptaría este cargo”
Dice que su deseo es cumplir el “contrato” que pactó con la población y terminar lo que empezó en 2015. Adelanta que no buscará la reelección: fue “la primera y la última vez”, avisa.
Dice que su deseo es cumplir el “contrato” que pactó con la población y terminar lo que empezó en 2015. Adelanta que no buscará la reelección: fue “la primera y la última vez”, avisa. Además, critica a “los gestores políticos”, tanto de la oposición como del oficialismo, a los que acusa de poner barreras al desarrollo de su región. El alcalde potosino, Williams Cervantes, no esquiva ninguna pregunta en la entrevista que le concede a ECOS en su despacho, mientras un grupo de ciudadanos recolecta firmas en la plaza 10 de Noviembre para someterlo a un revocatorio de mandato.
ECOS. ¿Cómo evalúa el trabajo realizado hasta ahora en su gestión?
WC. Hemos hecho un trabajo intenso. Cuando entramos al municipio, teníamos una planificación establecida; lamentablemente, dos factores hicieron que esa planificación cambie en su prioridad. La primera es la manifestación que se hizo en la ‘movilización de los 27 días’, cuando la población exigió fuentes laborales que no sean en la minería (…)
Afortunadamente, encontramos en un comentario de Turicaya la posibilidad de generar una fábrica de cemento. Hicimos el estudio, logramos concretar más de 1 millón de bolivianos para el estudio y hoy la fábrica de cemento se está construyendo. El Presidente (Evo Morales) está invirtiendo 306 millones de dólares, más 40 millones, para el fondo de arranque… En ese aspecto, hemos resuelto un problema (…)
La sequía fue otro elemento que no estaba prevista en la campaña; fueron dos años consecutivos. No tuvimos lluvia, por lo que tuvimos que hacer proyectos concurrentes. Por ejemplo, San Juan-Chapini, que bombeó hasta 70 litros segundo para la parte alta, que era la parte afectada… No se generó mucho conflicto, como en La Paz.
Resuelto ese tema, empezamos a trabajar en una parte de nuestra propuesta, que tiene que ver con la educación. Estamos invirtiendo más de Bs 260 millones en la construcción de unidades educativas nuevas. Tenemos, por ejemplo, el “3 de Mayo”, que es una ciudadela educativa, la construcción está sobre 5.000 metros cuadrados. Tiene laboratorios destinados al tema de la tecnología del litio. Como esta unidad educativa, está el “Huayna Capac”, el “Warisata”, el “Litoral”, el “Siglo XXI”, el “Hugo Chávez”, que ya se han entregado… También tenemos los centros de salud, que son la segunda parte más importante (…)
Una ciudad que tenía 200 mil habitantes, cuando llegamos, no tenía hospitales de segundo nivel. Ahora tenemos el San Roque, que está funcionando, y el Teresa de Calcuta. Estos hospitales han demandado una inversión de casi Bs 22 millones en equipamiento; nos parece un logro importante. Y en lo referente al trabajo con los vecinos, se han hecho embovedados, alcantarillados, cordones de aceras… Si nos tocara irnos hoy, estaríamos contentos porque lo que se ha hecho es significativo. El monto de inversión que se ha manejado en dos años es más de Bs 300 millones adicionales al presupuesto que teníamos como municipio.
ECOS. ¿Consiguió cumplir sus promesas de campaña?
WC. Se está construyendo el centro educativo virtual, que es el primer centro en Sudamérica que va a tener la tecnología aplicada a la realidad virtual en la ciencia y la educación; fue una oferta de campaña. Las unidades educativas, también, y las estamos construyendo. También fueron los hospitales de segundo nivel; hoy están funcionando. Y hay un programa que impulsamos en la campaña, que es “Mi wawita”, un paquete social del municipio que permite la intervención en el tema de salud integral para niños en unidades educativas… Y, por último, los centros productivos de la mujer, que son una especie de centros técnicos de formación profesional.
ECOS. ¿Cuáles son los principales problemas de la ciudad ahora mismo y cómo los está enfrentando?
WC. Uno de los problemas más grandes que tenemos es el tema del agua. Se está trabajando en Paranturí (…) Es una presa que va a estar ubicada en el sector del río Pilcomayo, tendrá una capacidad de embalse de 50 millones de metros cúbicos de agua y la posibilidad de generar energía eléctrica y bombear alrededor de 500 a 1.000 litros por segundo a la ciudad de Potosí. Con este proyecto, se resolvería el tema del agua por 100 años.
ECOS. En este momento, ¿a cuánto alcanza el déficit?
WC. En la época de sequía, el déficit alcanzó más o menos a un 25% del volumen total de agua. Afectó a unas 15 a 20 familias, que han estado viviendo con racionamiento. Actualmente no hay déficit por las lluvias (…), pero la solución es Paranturí.
ECOS. Uno de los indicadores para evaluar el trabajo de las administraciones municipales es la ejecución del presupuesto. ¿Cómo le fue en ese aspecto?
WC. Hemos estado (situados) entre el 68 y 72 por ciento en (la ejecución de la) inversión pública. Sin embargo, hay un elemento: cuando partes con un presupuesto de Bs 115 millones y en noviembre recibes 200 millones, es muy difícil gastar la plata. Este elemento ha hecho que la inversión, que podía haber sido más alta, disminuya (…) Nuestras obras, sin embargo, han superado un 80% en la ejecución física y estimamos que este año va a ser un año de bastantes entregas de obras.
ECOS. ¿A cuánto alcanzó su presupuesto?
WC. El propuesto institucional fue de casi Bs 200 millones, pero con los programas Bolivia Cambia, Mi Riego, Mi Agua y Vivienda Solidaria, hemos llegado a Bs 600 millones. Esta gestión estamos manejando más de 600 millones (…) Como nunca, el municipio tiene más plata, y eso es fruto de la gestión y el apoyo del Presidente (Morales).
ECOS. ¿Con cuánto de ejecución cerró el año pasado?
WC. Superamos el 60 por ciento en inversión (pública). Más o menos hemos llegado casi a 400 millones de bolivianos.
ECOS. ¿Habrá alguna obra estrella este año?
WC. Aquí queremos hacer un énfasis… Para nosotros, nuestro proyecto estrella es la infraestructura educativa. ¿Por qué es estrella? (La unidad educativa) Litoral, por ejemplo, va a tener cuatro laboratorios exclusivos para robótica; es decir, vamos a emplear la tecnología en esas unidades educativas… Cuando salgan los bachilleres, van a tener conocimientos amplios en esta tecnología; eso nos hace soñar en que la educación va a mejorar. Entonces, nuestra obra estrella es la educación… Al margen de ello, tenemos institutos técnicos (…) Solo en unidades educativas (hemos invertido) 260 millones (de bolivianos). En institutos, que son cuatro o cinco, 100 millones. Si sumamos, son 360 millones.
ECOS. Usted dijo que en el comienzo de su mandato tuvo serios problemas. ¿COMCIPO le puso las cosas difíciles?
WC. Fue muy difícil, no estamos acostumbrados como familia… tengo esposa, hijos… En el momento del conflicto cívico, mucha de la información que se tenía en el medio no era la más real, correcta y precisa (…) Se quería construir una fábrica de cemento en Coroma: Coroma está a más de 260 kilómetros de Potosí… El error se cometió en la parte técnica del Ministerio de Obras Públicas de ese entonces, en la misma Gobernación de ese entonces, como en el actual Comité Cívico. Los tres tenían información sobre el estudio a diseño final y sabían que no era viable. Pese a eso, se fue a un paro cívico.
ECOS. ¿Cuánto afectó a su gestión el hecho de que usted responda al MAS y que la ciudad, según los últimos acontecimientos, sea opositora al Gobierno nacional?
WC. Mucho. Cuando queremos hacer una obra, siempre encontramos una pared… Entiendo que la mejor expresión de la política es resolver las necesidades del pueblo… En el momento de resolver un problema podemos tener disputas ideológicas, pero en algún momento tenemos que encontrar grados de coincidencia; eso es lo que no hay ahora, ese es el principal obstáculo. No es la gente, nosotros caminamos en las calles, la gente nos abre las puertas, estamos trabajando con ellos, pero los gestores políticos son los que ponen las barreras al desarrollo, y no solo lo digo por la oposición sino que ahí también están incluidos gestores políticos del mismo MAS.
ECOS. ¿No lo ha ayudado tampoco la gente de su partido, entonces? ¿Los concejales?
WC. Los concejales, sí, apoyan. Lo que sucede es que, a veces, no entendemos la visión de desarrollo municipal. El municipio que más conflictos tiene al interior de su Concejo es Potosí. Hay una disputa muy acalorada no por temas de desarrollo, sino por posiciones ideológicas y algunas concepciones de mercado. Cuando la gente empieza a caer en esas concepciones de mercado y mezcla el tema político, no va a hablar de cuántas obras podemos construir sino cómo está vestido (el otro), por qué me ha mirado mal, por qué este o esta concejal me está acusando, por qué esta concejal me ha dicho esto. Nunca se ha hablado, en el Concejo Municipal, de desarrollo en estos dos años. Lo que sí hemos escuchado más de ellos son conflictos personales, incluidos los nuestros.
ECOS. La oposición y los cívicos, sin embargo, lo acusan de defender los intereses de su partido antes que los de su región…
WC. Siempre he pensado que los intereses de la región están (enmarcados) en función de una propuesta técnica. Y yo, personalmente, no he ido a la huelga de hambre no por la ideología política, sino por la concepción de esa huelga, la huelga de los 27 días. Siempre hemos sido críticos a la posición del Comité Cívico, porque las demandas de su pliego petitorio no solucionaban los temas estructurales y, sobre todo, no iban a beneficiar directamente al municipio de Potosí.
ECOS. ¿Fueron movilizaciones con alta carga política?
WC. Han sido bien aprovechadas, y ese es un error grande… Nosotros (los potosinos) somos muy unidos y defendemos lo que es nuestro. Queremos desarrollo pero a veces nos utilizan para alcanzar sus propios fines. Hemos visto muchos dirigentes, ahora y antes también, que han sido líderes políticos, concejales, alcaldes, ministros y demás que han utilizado al pueblo en función de sus necesidades. Hoy está mucho más remarcada esta situación.
ECOS. De acuerdo a los últimos acontecimientos, todo indica que el escenario político no va a cambiar. ¿Cuál es su postura sobre la reelección de Evo Morales?
WC. Tenemos que poner (ese asunto) en una balanza… Cuando estaba haciendo mi tesis, allá por el año 2000, tuve la oportunidad de ir a Tacobamba; entramos al lugar, no había camino (…) El municipio tenía un motor a diesel, que generaba energía eléctrica desde las seis de la tarde hasta las 20:00, no había telefonía. Cuando se quería sacar a un enfermo, se lo hacía a hombro y en una carretilla. Después de que Evo Morales entró a la presidencia, hemos tenido la oportunidad de volver. Hoy tiene un camino de acceso, energía eléctrica, telefonía celular, tv por cable, un centro de salud de primer nivel, agua potable, agua para riego… Entonces, la realidad de ese municipio ha cambiado (…) En Potosí también se ha vivido (ese cambio). Y otro elemento en la economía: hace mucho tiempo comer pollo era (posible solo en) los cumpleaños; hoy, el pollo es un plato muy común en las familias. Eso es fruto de la estabilidad económica… Eso debe ser valorado, por eso apoyamos este proceso… La oposición habla de que Morales no vaya a la presidencia, pero no tiene un modelo económico para sustituir el que existe actualmente, que sea más eficiente.
ECOS. ¿Y el 21F?
WC. Siempre hemos respetado el pensamiento de todas las personas. Mucha gente pide respeto al 21F. Lo que se ha pedido es que no se modifique la Constitución, lo que se ha hecho es apelar a un artículo (de la Constitución), a través del Tribunal Constitucional, el mismo que ha señalado que Evo Morales puede participar en las elecciones (de 2019), sin modificar la Constitución. O sea, Evo Morales puede… En el momento en que haya candidatos, habrá otras propuestas y la democracia del pueblo elegirá o no a Evo Morales.
ECOS. A propósito de elecciones, le han iniciado un proceso revocatorio. ¿Se va a defender?
WC. Siempre lo hemos señalado: en el tema político nosotros nos aplazamos. El revocatorio es un proceso político (…) Nosotros lo que vamos a hacer es trabajar. Si nos toca, en noviembre, como dicen, el revocatorio, hasta ese día vamos a seguir trabajando. Si el pueblo dice que nos vayamos, nos vamos a ir, pero habremos hecho lo que teníamos que hacer.
ECOS. ¿Quiénes quieren echarlo?
WC. En realidad, la dirigencia cívica es la que está encabezando esto, pero también el partido de oposición UN… Tienen la libertad de hacerlo. La Constitución lo prevé (…)
ECOS. ¿Quién tiene más respaldo en Potosí, el Alcalde o COMCIPO?
WC. No he hecho una valoración de respaldo. Lo que hemos hecho es hacer obras, y la gente nos acompaña por las obras. Lo que no sabemos es si esa gente votará o no por nosotros en su momento… Lo que sí podemos decir es que estamos esforzándonos en trabajar.
ECOS. ¿Está tranquilo?
WC. El cargo de alcalde es un trabajo más. Soy administrador de empresas, me ha tocado ser Alcalde. Lo veo como un trabajo que se me ha dado por (medio de) un concurso de méritos. Llegado el momento, el contrato que tengo con la población puede ser cortado (…) Ahí se hará la valoración para saber si mi salida fue por ineficiencia o por un tema más político. Me siento tranquilo.
ECOS. ¿Qué tipo de ciudad va a dejar y qué le falta hacer?
WC. Educación y salud vamos a tener resuelto en lo que es necesario. Tenemos que trabajar en las áreas de recreación, como parques, centros de distracción... Tenemos que trabajar en mejorar la infraestructura urbana. También estamos trabajando en la sostenibilidad (financiera) del municipio. Para eso (necesitamos) una actualización del catastro, y el tema de del desarrollo productivo. Con esos cinco elementos, terminaríamos toda la gestión.
ECOS. ¿Cuál será su principal legado?
WC. Nos identificamos con la fábrica de cemento, hemos creado esto. Va a ser una fábrica gigante, va a generar 500 empleos directos, más de 3.000 indirectos; además, recursos para la región… Pero me siento más cómodo diciendo que hemos construido las mejores unidades educativas que van a formar mejores ciudadanos (…)
ECOS. Hace un momento dijo que se aplazó en política. ¿Fue su primera experiencia?
WC. Sí, la primera y la última. Es grato desde el momento que empiezas a resolver los problemas de la gente, pero no cuando hay elementos que dañan a la familia. Creo que si volviera al pasado, no aceptaría este cargo, porque el tema político ha hecho que mis hijos lloren. Entonces, eso es lo que más me duele (…)
ECOS. ¿Está descartado que vaya a ir a la reelección?
WC. Eso está totalmente descartado… Queremos terminar lo que hemos empezado, pero esta experiencia no se vuelve a repetir porque amo a mi familia y a mis hijos.
ECOS. La última: ¿Hubo corrupción durante su gestión?
WC. Lo que encontramos de actos corruptos, los denunciamos… Estamos luchando contra la corrupción… Tenemos como ocho o nueve casos que hemos denunciado a la Fiscalía. Algunos de ellos, incluso, están en (la cárcel) Cantumarca… Eso va a continuar. Lo que no hacemos es salir a la prensa (…) La gente dice: ‘este Alcalde está luchando contra la corrupción’, pero también vemos que esa persona (la persona denunciada) tiene familia. Hoy estamos remitiendo otro (caso) a la Fiscalía. •