La plaza 25 de Mayo, el lugar de encuentro
Un proyecto de refacción de sus aceras y bordillos se perfila para la próxima gestión

Aferrado con sus garras metálicas permanece inmóvil y sereno, su mirada fija en un mismo sitio parece imponente, pero pese a su quietud forzada por su naturaleza metálica posa como ningún otro de su especie para la ansiada foto que marcará la visita a Sucre. El león de la inconfundible plaza 25 de Mayo sale tan bien como siempre en la inmortalizada imagen de niños, jóvenes y adultos.
Comienza el verano y este espacio se hace cada vez más frecuentado por niños y jóvenes de esta ciudad y de otras, varios llegados en viajes de promoción o de paseos organizados entre amigos. La plaza 25 de Mayo es, sin duda, el lugar más visitado por propios y extraños, pues pese a los años continúa siendo “el lugar” de encuentro.
Su limpieza continua la hace un lugar no sólo agradable sino único, aunque hay días, como los lunes, en los que no está en su mayor esplendor, quizás por los agitados fines de semana en los que muchos pasean y pocos asean los espacios públicos de la ciudad.
Su forma de cuadrilátero no enfrenta sino más bien llama a la congregación de amigos, familias y novios, a veces llamados por el arte, otras por la música, la danza o sólo por su fantástico panorama verduzco que contrasta con los blancos edificios y las naranjas tejas del centro colonial.
Y es que nadie que conozca y quiera conocer Sucre puede obviar visitar la histórica plaza 25 de Mayo, esa donde tres personajes importantes del proceso independentista se erigen en figuras de metal que retan al paso del tiempo y a la fragilidad de la memoria: el mariscal Antonio José de Sucre, Jaime de Zudáñez y Bernardo Monteagudo. Esa plaza que parece un escape a la naturaleza y que llegado el fin de año se colorea con adornos navideños y pequeñas lucecitas que parecen competir con las del cielo.
De hecho, a partir de esta semana, más antes que ningún otro año, comenzaron a colocarse los adornos tradicionales de la fiesta de Navidad y aunque los leones contrastan con los animales del tradicional pesebre, se suman al ambiente festivo.
Es tal su atractivo que no hace mucho se erigió un nuevo león, uno hecho de arbustos y plantas pero quizás su delicadeza lo hizo un poco menos atractivo para los niños que no pueden subirse en él, no pueden dominarlo.
Pero no sólo las efigies de arbustos son lo que provocan el contacto con la naturaleza, cuando uno llega a la plaza 25 de Mayo, inmediatamente siente el respiro que todos los árboles le dan a esa parte de la ciudad, su sombra es acogedora y su verdor atrae no sólo a humanos sino a aves, algunas que viven como las palomas y otras que migran como los loros.
“Si en una ciudad despiertas con el melódico trinar de pájaros, la naturaleza todavía no ha sido derrotada”, comentó hace unos meses un periodista durante su visita a Sucre, y es cierto, pues pocas deben ser las capitales que gozan de escuchar las aves en pleno centro de la ciudad.
Sus ramas se estiran como queriendo cubrir el mayor territorio posible, conscientes de la oxigenación que le hace falta al mundo.
FOTOS Y MÁS FOTOS
Cerca de culminar el año, la afluencia se hace más alta, uno de los fotógrafos que usualmente se encuentra en la plaza 25 de Mayo para plasmar en una imagen el recuerdo de una visita siempre agradable a la ciudad, dice que durante las vacaciones de verano se incrementa el flujo de personas aunque sólo por una corta temporada.
La prohibición de viajes de promociones también influyó en la visita de jóvenes en últimos años, cuenta el fotógrafo; empero, con una rutinaria visita a la plaza se puede ver que pese a esas medidas, varios colegiales que visitan Sucre frecuentan este espacio junto a sus maestros y familiares.
Pero la temporada alta recién comienza así que dentro de unas semanas se notará la presencia de los turistas, especialmente nacionales, que por las vacaciones se animan a venir a la Capital.
NO SÓLO PARA EXTRAÑOS
Pero a diario no sólo se ve turistas, sino a ancianos, niños y jóvenes. De hecho la plaza parece dividirse por grupo etario, frente a la Alcaldía suelen encontrarse varios adultos mayores que se reúnen para compartir charlas. Muchos de ellos se acercan para hacer notar el descuido de las autoridades respecto a distintos temas o para leer las noticias del día.
Al otro lado del reloj, la famosa “recta” aglutina a jóvenes y adolescentes que después de clases saben que siempre habrá alguien conocido ahí con quien charlar o quizás sólo cruzar algunas miradas coquetas.
Ahí las charlas son bulliciosas y en algunas ocasiones acompañadas hasta de bebidas alcohólicas, dependiendo de las horas, de los días y de si logran esquivar los controles de los efectivos policiales.
UNA PLAZA CON VALOR HISTÓRICO
No por nada el pleno de la Cámara de Senadores, en mayo de 2014, declaró a la plaza 25 de Mayo como Patrimonio Cultural e Histórico del pueblo boliviano, y es que ese lugar fue testigo de los momentos en los que emergió el Primer Grito de Libertad de América Latina.
Por sus espacios pasaron los precursores del proceso independentista llamando al pueblo a sumarse a la lucha por la libertad.
Aunque esa declaratoria contempla que tanto desde el Ministerio de Culturas y Turismo, la Gobernación y la Alcaldía se desarrollen políticas públicas para su cuidado, restauración y promoción; más allá del cambio de losetas y azulejos no se registra otro tipo de acciones concretas por su preservación, salvo las que a diario realiza el personal de la Empresa Municipal de Áreas Verdes (EMAVs) y la Empresa Municipal de Aseo Urbano (EMAS), y las que ocasionalmente se hacen para fechas importantes como la limpieza de los monumentos a cargo de la Escuela Taller Sucre.
Esta gestión, desde la Subalcaldía del Distrito 1 no se realizará ninguna obra en la plaza 25 de Mayo, salvo la limpieza de monumentos que se espera comenzar casi a fin de año una vez se tenga refaccionada la hidrolavadora adquirida por esa instancia, informa el subalcalde del Distrito 1, Mario Limahi.
Para el próximo año, la Subalcaldía tiene previsto realizar la refacción y reposición de aceras y bordillos externos de tres de los cuatro lados de la plaza central, con un presupuesto cercano a los Bs 300 mil. Los lados a refaccionar son los que dan hacia la Gobernación, el local plaza Center y la Federación de Chóferes, detalla Limachi.
Por ahora, a la espera de los proyectos que sin duda cambiarán su imagen, la plaza 25 de Mayo recibe a todos aquellos que deseen disfrutar de sus espacios, la calma que proporciona y se percibe otra vez por la prohibición de estacionar en sus cuadras, y su indiscutible belleza.