Bolivia: El hacinamiento en las cárceles supera el 200%
Hay precariedad, vulneración de derechos y casos críticos, según datos oficiales
El hacinamiento en los recintos penitenciarios del país supera el 200%. Los que hay —98 en total—, no alcanzan. Además, en la mayoría hay precariedad. La vulneración de los derechos de los privados de libertad, por otro lado, está muy presente. Esa es la realidad de las cárceles del país, según documentos oficiales a los que accedió ANF.
Los recintos penitenciarios considerados como “grandes” son 19, de acuerdo con esos papeles. Pero no reúnen las condiciones. La mayoría de los reclusos se encuentra en esos lugares. Peor: cerca del 70% cumple detención preventiva; el resto, sentencia condenatoria.
El resto de los recintos penitenciarios son pequeños, situados, por lo general, en las capitales de provincia y ciudades intermedias. Son conocidos como “carceletas”.
En lo que se refiere a derechos de los privados de libertad, se identificaron al menos 60 vulneraciones, según el censo que se realizó este mes en 53 recintos penitenciarios, encargado por las autoridades del sector.
¿cuánto albergan?
En la infografía que acompaña a este reportaje, se puede apreciar la ubicación de los recintos penitenciarios más grandes del país y el número aproximado de privados de libertad que albergan.
Los datos, que fueron liberados para la elaboración del censo carcelario 2019 antes señalado, pertenecen al Tribunal Supremo de Justicia, a la Policía, al Servicio para la Prevención de la Tortura (SEPRET) y a Régimen Penitenciario.
Según esos datos, en el país hay 19.120 privados de libertad. Sin embargo, las cifras cambian constantemente.
De acuerdo con el Censo Carcelario, esa cifra ya se sitúa en 19.161 reos. De ese total, 1.612 son mujeres.
El hacinamiento
Según Régimen Penitenciario y la Defensoría del Pueblo, el hacinamiento en las 19 cárceles más pobladas del país (ver cuadro aparte con el título de "Hacinamiento por departamento") alcanza al 225 por ciento, en promedio.
Las autoridades esperan reducir esos porcentajes con las nuevas cárceles que se abrirán en Uyuni, Villazón y Oruro, y con la ampliación de las infraestructuras de los centros penitenciarios Palmasola (Santa Cruz) y El Abra (Cochabamba). También con la implementación de nuevas normas.
La infraestructura de la mayoría de las cárceles es precaria. Y en ellas conviven más personas de las que deberían.
El recinto penitenciario de Sucre, por ejemplo, cuya capacidad es para 102 internos, tiene una población de 738 privados de libertad. Como este centro carcelario, varios tropiezan con ese problema en el país.
Según testimonios recogidos por la Defensoría, las celdas son inhabitables, extremadamente caras y muy pequeñas.
Hay privados de libertad que duermen en los pasillos, de acuerdo con el testimonio de los internos, porque no cuentan con recursos para pagarse una celda.
“Duermo en el pasillo; no, (una) en celda. Tengo un colchón; tengo (una) cama. Nunca tuve una celda”, cuenta uno de los tantos internos de la cárcel de Villa Busch, por ejemplo.
“Las condiciones de habitabilidad son deplorables. Vivimos alrededor de 16 privados de libertad en este sector, el cual es muy pequeño para esta cantidad”, se queja otro interno, esta vez de Chonchocoro.
Los costos
Una investigación reciente de la ANF sacó a la luz lo que cuesta tener un espacio para dormir en el penal de San Pedro. Para pertenecer a una sección del penal, un interno debe pagar entre Bs 1.000 y $us 3.000, dependiendo de la sección a la que logre acceder.
El alquiler de una celda pequeña en ese centro penitenciario, con unos 15 privados de libertad ya hacinados, cuesta Bs 100 por mes; una celda más amplia, Bs 1.000 por mes.
También se pueden contratar anticréticos. El precio oscila entre los 10.000 y 17.000 dólares.
En las provincias
La situación en la mayoría de las carceletas provinciales es peor. En esos lugares hay poco control y los espacios son más precarios.
“Estas cárceles son, pues, el lamento boliviano. Dan pena, esos ambientes. Cuartitos pequeños, camas sobre adobes, en el caso del altiplano… En el caso de los valles, casitas a punto de caerse… Y cualquier interno que esté en provincia, en estas carceletas, se puede ir. No se van, porque no quieren, porque quieren cumplir su detención. Es gente que, a veces, tiene la llave y, a veces, cierra con candado, en el caso de la carceleta de Uyuni (la antigua)”, revela el ex director de Régimen Penitenciario, Ramiro Llanos.
En el oriente del país, según Llanos, la situación de las carceletas provinciales es peor. Por ejemplo, en Guayaramerín el acceso a la alimentación es muy precario, debido a que no hay insumos suficientes para la alimentación.
cada vez más Población
Las cifras de hacinamiento son cada vez más preocupantes debido al excesivo crecimiento de la población de privados de libertad. En 2006, había 7.782 internos en 54 recintos carcelarios; hoy se cuenta con más de 18.000, y en 53 cárceles, para graficar el problema.
A la cárcel San Pedro de La Paz, en 2018, ingresaron en promedio 12 internos por mes y salieron —con alguna medida judicial— sólo entre cuatro y cinco personas. A la cárcel de Sacaba ingresaron entre 16 y 20 internos y salieron entre 8 y 10, mensualmente, ese mismo año.
A todo eso, se suma la carencia de personal para la vigilancia y la atención médica.
Según un informe de la Defensoría, un policía vigila a 23 internos en promedio. Un médico, entretanto, atiende a 410 reos.
Los primeros datos del censo carcelario que encargó el gobierno muestran que la situación es crítica
Una reciente consulta realizada este mes y encargada por las autoridades del sector a reclusos de 53 cárceles del país reveló una serie de deficiencias consideradas como "violaciones" a sus derechos.
Esos casos son "graves", según el ministro de Justicia, Héctor Arce, que adelantó algunos datos preliminares del llamado Censo Carcelario.
Reclusos sin sentencia o que permanecen en la cárcel a pesar de haber cumplido con su condena; internos con discapacidad; otros que padecen alguna enfermedad mental, además de indígenas a los que se les privó de asistencia legal en su lengua de origen, forman parte del universo de casos que más preocupan a las autoridades.
El Ministro también señaló el caso de un preso que continúa en la cárcel pese a que hace cuatro años se emitió un mandamiento de libertad a su favor, pero que "ha sido privado de su libertad indebidamente".
Los datos detallados de la encuesta en cuestión se publicarán en unos dos meses con el objetivo de encauzar una reforma penal que busca implementar el Gobierno.
Esa transformación pretende ajustar considerablemente el régimen de medidas cautelares y la práctica de la detención preventiva de los acusados, que alargan su encarcelamiento en espera de una sentencia que puede ser absolutoria tras mucho tiempo recluidos.
Arce manifestó que los casos "más graves" se identificaron en la cárcel Palmasola en Santa Cruz, que es considerada la más grande y peligrosa del país. Se vio necesario enviar una comisión del Ministerio.
Una de las medidas inmediatas propuestas por esa repartición del Estado busca que algunos tribunales celebren audiencias "en los propios recintos penitenciarios", con la finalidad de identificar los casos delicados de manera más efectiva y que "restituyan" el derecho de los privados de libertad, aseguró Arce.
La consulta carcelaria se trazó el objetivo de llegar a unos 19.000 reclusos del país con la finalidad de mejorar las condiciones de vida en las prisiones del país.
Durante tres jornadas, 1.507 estudiantes de Derecho de universidades públicas fueron los encargados de encuestar a la población detenida en base boletas censales que constaban de 84 preguntas.
En el diseño de la encuesta participaron varias instituciones públicas como el Tribunal Supremo Electoral, el Instituto Nacional de Estadística y el Servicio General de Identificación Personal, además de aquellas directamente relacionadas con la Justicia y la seguridad, entre otras.
Chuquisaca
El hacinamiento es uno de los más altos del país. La capacidad de los centros carcelarios del departamento es de 102 internos. En ellos conviven 738 reclusos, lo que siginfica que hay 624% de hacinamiento.
El hacinamiento por departamento (Mayo-2018)
DEPARTAMENTO |
CAPACIDAD |
POBLACIÓN |
HACINAMIENTO |
Santa Cruz |
1.731 |
6.813 |
- 294 % |
La Paz |
1.228 |
4.163 |
- 239 % |
Cochabamba |
1.218 |
2.983 |
- 145 % |
Tarija |
500 |
1.129 |
- 126 % |
Beni |
308 |
918 |
- 198 % |
Oruro |
250 |
881 |
- 252 % |
Potosí |
340 |
852 |
- 151 % |
Chuquisaca |
102 |
738 |
- 624 % |
Pando |
128 |
418 |
- 227 % |
TOTAL |
5.805 |
18.895 |
- 225% |