Evo se siente rehabilitado y teme ataques de EE.UU.
Morales señala que intentarán dividir al MAS y a los sectores sociales del país
El presidente Evo Morales ya se siente rehabilitado para los comicios de 2019, pese a que la Constitución Política del Estado lo prohíbe y cuando aún no hay sentencia del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) sobre el tema; ayer –con miras al año 2018 que será preelectoral– advirtió que EEUU prepara una serie de “mentiras” contra su reelección.
Desde Coripata (La Paz), manifestó que Estados Unidos arremeterá contra su Gobierno con mentiras, para mellar la imagen del proceso de cambio que lidera desde 2006 y evitar su repostulación en los comicios de 2019, según la agencia estatal ABI.
Dijo que con esas mentiras, nuevamente se pretenderá "dividir y confundir" a las organizaciones sociales.
"Seguramente van a intentar con mentiras dividirnos, con mentiras fraccionarnos y esas mentiras preparadas no son de la derecha, la derecha no tiene iniciativa, la Embajada de Estados Unidos permanentemente se los prepara", agregó.
Reconoció, según La Razón, que algunas personas de sus bases se prestan a ese juego.
“Esas mentiras preparadas no son de la derecha, la derecha no tiene iniciativa. La Embajada de Estados Unidos permanentemente se los prepara, ¿con qué nos van a atacar, con qué mentira? ¿Qué mentiras estarán preparando ahora?, de acá a meses, el próximo año, se van a recordar, el año electoral qué mentiras no habrán”, sostuvo.
En 2019, habrá Elecciones Generales, pero este año ya empezó el debate por la decisión del oficialista Movimiento Al Socialismo (MAS) de recurrir al TCP para rehabilitar una nueva postulación de Morales tras el triunfo del No en el referéndum de febrero de 2016, que fue planteado para permitir al Mandatario volver a postular.
Antes de la consulta de 2016, fue destapado el caso de Gabriela Zapata, la ex pareja del Presidente, vinculada con uso de influencias por trabajar con una firma china con contratos millonarios con el Estado.
La Paz y Washington mantienen una relación compleja luego que en 2008 fuera expulsado el embajador estadounidense Philip Goldberg, por denuncias de injerencia en asuntos internos del país.