El Vice y Mesa cruzan acusaciones
El ex Presidente alienta a buscar la unidad para hacer valer el 21F y evitar la reelección
La Asamblea Legislativa no tratará este año el pedido de juicio contra el ex presidente Carlos Mesa por el caso Quiborax, anunció el vicepresidente Álvaro García Linera, en medio de un fuerte cruce de criterios con el actual vocero marítimo, a quien alentó a postularse a presidente.
“Queremos decir de manera oficial que la Asamblea Legislativa Plurinacional no va a tratar el tema de Carlos Mesa y el juicio a Quiborax en esta legislatura, por una sencilla razón, porque tenemos acumulados un conjunto de pedidos de juicios de responsabilidades, más de 13, y el pedido de autorización de juicio (…) para Mesa tendría que ir, como corresponde, al final”, explicó la segunda autoridad de Estado.
Con ese anuncio, según García Linera, no se afectará una eventual candidatura del ex Jefe de Estado con miras a los comicios del próximo año.
“Ahora que está establecido que no hay posibilidad de anular la candidatura de Carlos Mesa, (pedir) a sus seguidores (que) ahora por lo menos den a la población una propuesta de país”, demandó el Vice.
También disparó contra "toda la pandilla de futuros candidatos a diputados y senadores que se rasgan (las vestiduras) diciendo que se está impidiendo su candidatura (de Mesa). Dejen de ser farsantes y dejen de hacer tonterías". Sostuvo que hasta ahora el Gobierno sólo escuchó de los futuros candidatos de la oposición, insultos y ofensas, pero ni una sola propuesta a favor del país.
Luego tuvo críticas directas contra Mesa. Le dijo que “no puede seguir utilizando como pretexto el juicio de responsabilidades para hacer campaña política” y aseguró que el ex Presidente no es un perseguido político, sino un “político con delirio de persecución y de figuración”.
"Espero que a partir de esta información salgamos de esta farsa y se acabe este teatro de mala calidad de victimización del señor Carlos Mesa (...) Que haga política pero que no use como pretexto el juicio para su candidatura política", agregó.
Sobre el juicio –para el que el miércoles el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) pidió autorización a la Asamblea, por solicitud de la Fiscalía General–, García Linera sostuvo que Mesa delinquió al expulsar durante su mandato a la empresa chilena Quiborax.
"(Mesa) enfrentó a una empresa pirata y mafiosa (Quiborax) con un medio ilícito, con un delito y eso ha dicho el CIADI”.
LAS RESPUESTAS DE MESA
Por la mañana, el acusado dio a conocer que solicitará una audiencia a la Comisión Mixta en la Asamblea Legislativa para explicar su inocencia y la responsabilidad del Procurador Pablo Menacho y del actual ministro de Justicia, Héctor Arce, en la fracasada defensa del Estado.
Más tarde, hablando de las acusaciones de García Linera, apeló a Twitter para responder con críticas.
“Señor Vicepresidente, defenderme de acusaciones sin fundamento de quienes son responsables de daño al Estado no es hacer política, es enfrentar la maquinaria del Ejecutivo que tiene al Poder Judicial a su servicio”, señaló.
Agregó: “Y por cierto, Vicepresidente, el monopolio de la política no lo tiene su Gobierno. Como ciudadano tengo el derecho de hacer política como y cuando quiera, en el marco de la ley, sobre todo para combatir el autoritarismo de su régimen defendiendo el 21F”.
Sobre el juicio impulsado por el Gobierno en su contra, insistió en que el proceso de reversión de concesiones de Quiborax se hizo siguiendo la norma legal.
Por la noche, en un conversatorio en la UCB de Cochabamba, aseguró que la unidad de los bolivianos evitará que el presidente Evo Morales repostule en las elecciones de 2019.
Ante un gran cantidad de público que interrumpía constantemente su exposición con aplausos, dijo que la "unidad es todo" y planteó a las plataformas ciudadanas y partidos políticos trabajar en una estrategia que fije un "Día D" para arrancar con una agenda concreta, “una batalla” que frene la candidatura de Morales, para “recuperar la democracia”.
Pidió no temer ni rechazar a los partidos políticos, por su reputación, e incluirlos en la estrategia para lograr el respeto del 21F.
"La palabra unidad implica que los partidos, las plataformas ciudadanas, las organizaciones, los movimientos indígenas, tienen que compartir el espacio en igualdad de condiciones" para evitar la repostulación y diseñar un proyecto político conjunto.
Propuso fijar el 21 de febrero de 2019 para que confluyan todas las fuerzas y se ejecute la estrategia que obligue al cumplimiento de los resultados del 21F con una capacidad de movilización democrática y pacífica.
Dijo que tras lograr que Morales no sea candidato, se debe trabajar en una segunda fase para elegir candidatos sobre la base de un proyecto serio.
Para concluir, Mesa destacó la fuerza de los jóvenes como articuladores de un movimiento democrático y transparente.
Tras concluir su exposición, el auditorio coreó: "Bolivia dijo no", entre aplausos al ex Presidente.