La Paz y El Alto intensifican sus protestas

Vecinos de La Paz y El Alto intensificaron ayer sus protestas por el racionamiento de agua y anunciaron que activarán procesos penales en contra de funcionarios de EPSAS por delitos contra la salud pública, mientras el Gobierno, que arremetió contra los opositores por considerar que el tema se usa de manera política, ve como única vía inmediata el abastecimiento por cisternas.

Miles de vecinos de La Paz y El Alto protestaron en las calles por la escasez y restricción del agua, después de que la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (EPSAS) determinara racionar el líquido potable por la drástica reducción de las reservas en las represas. La multitudinaria marcha exigió además la renuncia inmediata de la ministra de Medio Ambiente, Alexandra Moreira.

La Federación de Juntas Vecinales (FEJUVE) de El Alto se unió a la manifestación de los vecinos paceños y advirtieron que en caso de que no se den soluciones inmediatas a la emergencia, continuarán con las movilizaciones.

El presidente de la Confederación de Juntas Vecinales de Bolivia (Conaljuve), Benjamín Cáceres, aseveró que la primera exigencia es que el Gobierno garantice que el líquido que distribuyen las cisternas de EPSAS sea apto para el consumo humano y no de calidad dudosa. Ayer, el Ministerio de Salud aseguró que el agua que se distribuye no tiene presencia de virus ni microorganismos patógenos.

CISTERNAS, LA ÚNICA SALIDA

Luego de una evaluación realizada junto al comité de emergencia, el presidente Evo Morales sostuvo que por ahora la única manera inmediata de hacer frente a la crisis del agua es mediante la distribución por cisternas.

"Lamento mucho decir, pero soy sincero y tengo que decir la verdad, pero la mejor forma de atender (la falta de agua) es con cisternas, (me pregunté) cómo con cisternas, captemos (agua) por aquí, bombeemos agua, pero si nos damos la vuelta las lagunas están secas", señaló.

Además indicó que entre las alternativas para aliviar la crisis está considerada la de "disparar a las nubes" para que llueva.

Remarcó además que hay intenciones de desestabilizar EPSAS en las protestas contra la empresa; mientras que el ministro de Gobierno, Carlos Romero, acusó a analistas de desinformar en redes sociales. Los acusados respondieron afirmando que tienen derecho a la protesta.

"No es correcto acudir a la mentira, a la desinformación para intentar generar una suerte de pánico colectivo como se está intentado generar especialmente en algunas zonas de La Paz", dijo Romero.