Cuando aprender artes marciales es un estilo de vida: 'Guerrero Dragón'
Esta academia ofrece clases en distintas disciplinas y una formación prácticamente personalizada. En sus siete años de trabajo, lograron crecer e incluir el apoyo psicológico para niños.
La formación en artes marciales y liderazgo es uno de los principales objetivos de la Academia de Artes Marciales “Guerrero Dragón”, que desde hace cerca de siete años ofrece sus servicios destinados a fomentar, a través del deporte, la vida saludable y la capacitación de los atletas.
Esta academia se encuentra en los ambientes de la Casa de Turismo, ubicada en la calle Bustillos 131, donde se entrenan personas de distintas edades en variadas artes marciales, ya sea con el objetivo de perder peso, de aprender sobre defensa personal o de convertirse en hábiles competidores.
El emprendimiento está a cargo de Jans Pacheco Urey, un cochabambino que vio la necesidad de que Sucre —donde reside hace varios años— cuente con un espacio diferente para este tipo de prácticas, en las que año tras año destacan atletas a nivel nacional e internacional.
“Nos caracterizamos por dar un entrenamiento más completo; me refiero a que los horarios no son habituales en otros dojos, academias o clubes, pues trabajamos dos horas de entrenamiento por clase”, comenta Pacheco, aunque precisa que para los niños se mantiene una sola hora, de modo que ellos no pierdan la atención.
Durante este tiempo, Guerrero Dragón llevó a cabo varios cambios con el fin de consolidarse de manera profesional. Para ello trabajaron por ejemplo con la Welcam, una organización de artes marciales internacional, y con la Unión Sudamericana de Kick Boxing Asociado. Ambas certificaron su enseñanza en artes marciales.
Pacheco, director general de la Academia, dice que en el tiempo que tienen de vigencia pudieron dar mayor comodidad a sus alumnos, tanto con un cambio de ambiente como con el material necesario para su formación.
Desde sus inicios hasta la fecha, invirtieron unos 6.000 dólares en equipamiento como bolsas y focos de boxeo, mancuernas, ligas, tobilleras y otros, aunque esperan comprar a futuro equipos de pesas más específicos.
“Nos falta el área de musculación, un determinado y específico número de equipos de musculación para tener entrenamiento más completo, porque nos ayuda mucho y va de la mano con el tema de competición y fitness”, comenta al respecto.
Además del espacio y el hecho de combinar las artes marciales incluso para perder peso con el fitness de combate, esta academia cuenta con horarios amplios y grupos diferenciados. Por ejemplo, hay clases de fitness de 6:00 a 7:00 y de 9:00 a 10:00, en las que participan personas mayores o con sobrepeso, que requieren de un ritmo y ejercicios diferenciados.
En cuanto a los niños, las clases se imparten de 17:00 a 18:00. En este caso, los alumnos aprenden distintos tipos de artes marciales, que varían cada día.
En los horarios en que los instructores están más libres, también ofrecen entrenamiento personalizado, orientado especialmente a atletas de competición.
Apoyo pedagógico y de salud
La academia implementó un gabinete psicológico destinado a apoyar a los menores en su formación. “Ellos suelen sufrir bullying y tienen problemas personales, entonces nos vimos en la necesidad de abrir un gabinete enfocado en la ayuda personal y, a través de ese estudio, ahora hemos creado la Escuela de Padres, para que los padres e hijos tengan una mejor relación entre sí y una mejor calidad de vida”, detalla Pacheco.
Además, por un contrato de intercambio de servicios, los atletas que son parte de Guerrero Dragón se benefician con descuentos en un servicio de fisioterapia para cuando se presenta alguna lesión o requieren de una determinada atención especial.
Un camino de lucha
“La repuesta del público al inicio fue floja, como en todo negocio, pero nuestra profesionalidad nos ha ayudado mucho a la asistencia de más gente”, explica el instructor.
Un total de seis entrenadores forman parte de esta academia que ahora, además, promociona sus servicios u ofertas mediante las redes sociales, donde se las encuentra por su nombre.
A través de su estilo de trabajo, que Pacheco califica como “diseñado”, porque cuentan con certificación sobre pedagogías para impartir clases de artes marciales, es que lograron crecer poco a poco y ahora sueñan con llegar a muchos más estudiantes.
La Academia de Artes Marciales en cifras
- 2 horas de trabajo ofrecen en el entrenamiento de taekwondo, jiu-jitsu, kick boxing-K1, artes marciales mixtas y defensa personal.
- 250 bolivianos es el costo de la mensualidad en la academia Guerrero Dragón. Se pasan clases de lunes a viernes, además de los “sábados maratónicos”.
- 6 instructores son parte del equipo, que forma a personas interesadas en las artes marciales, que buscan perder peso o que desean enfocarse en alguna competición.
- 6.000 dólares fueron invertidos en la academia para la compra de equipos como un tatami (piso especial para artes marciales), bolsas de boxeo, tobilleras con peso y otros.
- 7 años de trabajo tiene esta gran opción para practicar artes marciales. En Facebook aparece con el nombre de: Academia Guerrero Dragón- Kickjitsu Sucre.
- 131 es el número de sus oficinas, en la Casa de Turismo o ex SAS, en la calle Bustillos. Los interesados pueden contactarse al siguiente celular: 71781131.