Un Oscar para Bolivia: Conoce al sucrense que ganó un "Student Academy Awards"
Produjo un audiovisual sobre la vida de Luis Ernesto Miramontes, el mexicano que sintetizó el compuesto activo de la píldora anticonceptiva
El sucrense Rommel Villa Barriga es uno de los recientes ganadores de los premios Oscar, en Estados Unidos, gracias a la producción de un audiovisual que habla de la vida de Luis Ernesto Miramontes, el mexicano que sintetizó el compuesto activo de la píldora anticonceptiva.
Rommel nació y vivió en Sucre hasta sus 25 años, edad en la que decidió ir a perseguir sus sueños en Estados Unidos, actualmente tiene 29 años y se ha convertido en el ganador de un premio Oscar que se entrega a producciones audiovisuales de escuelas de cine, por el trabajo que realizó con su universidad en California.
“El proyecto fue apoyado por una fundación que presenta proyectos de científicos en todo el mundo y yo presenté historia de Luis Ernesto Miramontes, científico mexicano que sintetizó la píldora anticonceptiva”, relata Villa a la revista dominical ECOS de CORREO DEL SUR.
La producción tiene un libreto elaborado por él de 30 minutos y fue filmada en México el año pasado y terminada a comienzos de este 2020.
El audiovisual se enfoca en Viramontes, un químico mexicano que logró sintetizar la sustancia base de la píldora anticonceptiva. Pese a su importante aporte, el profesional no es reconocido a nivel internacional, por lo que Rommel quiso contar su historia.
¿CÓMO SURGIÓ ESTA IDEA?
Rommel quería mostrar la historia de un latinoamericano que aportó a la humanidad y había sido olvidado, así que buscó en internet algunas figuras. Se encontró con la historia de Viramontes y decidió trabajar sobre ella.
Sin embargo, su motivación surgió desde su llegada a EEUU, donde en su primer viaje en taxi, rumbo a su departamento, se enfrentó a los estereotipos sobre los latinos y los bolivianos.
El conductor le preguntó de dónde era, Rommel respondió que era de Bolivia, a lo que el sujeto le preguntó si no traía droga en su maleta.
“Al principio pensé que se hacía la burla, pero no, lo dijo entre broma y realidad, y me di cuenta que hay muchos estereotipos en cuanto a lo que la gente piensa de nosotros como latinos, sudamericanos. Sentí que al llegar me colgaron en una categoría específica en la que tenía que acordarme que soy latino, boliviano, mi forma de hablar, el color de mi piel, y todo eso no se siente bien”, recuerda.
Cuando se encontró con la historia de Viramontes también evocó los recuerdos de haber tenido padres con familias numerosas y las restricciones que se deben asumir no solo en cuanto a economía, sino también sobre educación y salud.
“Mis papás tienen familias grandes, sé muy bien lo que es crecer en una familia humilde, teniendo problemas no solo de dinero (…) No tener método de anticoncepción es muy complicado y viene de hace muchos años”, reflexiona.
Su producción se llama Sweet potatos (camotes, en inglés) y no solo fue filmada en México, sino que también tiene actores hispanohablantes, los que no tenían acentos exagerados intencionales que buscan estereotipar a los latinos, algo que cree que la Academia también valoró al momento de elegirlo como ganador de una estatuilla dorada.
“Ahora (la Academia) tiene mucho más respeto por la diversidad, de culturas, orientación sexual, de todo tipo. Vieron que nuestro equipo era diverso, pero también que apoyaba una historia latina”, explica el joven galardonado que actualmente trabaja en el área de producción de la universidad de California, en la que estudió su maestría y donde en 2021 comenzará a dar clases de televisión.
“Significa el mayor reconocimiento que puede haber en las universidades. La noticia me la dio Spike Lee, un director destacado, fue por Zoom y no estaba preparado para hablar con él, no tenía ni palabras en ese momento. Es realmente un honor, el más grande que uno puede recibir cuando comienza surgir como cineasta”, agradece.
EL CAMINO CORRECTO
Para Rommel no fue fácil dejarlo todo e irse a Estados Unidos, pero sabía que era lo correcto. Luego de estudiar ingeniería de sistemas en Sucre, decidió postular por una beca.
Se fue a Chicago, donde buscó materias relacionadas al cine y fue ahí que se dio cuenta de cuál era su verdadera vocación.
Volvió de su beca y decidió buscar opciones en esa área. “Tenía decido estudiar, cine, no necesariamente en EEUU, pero estaba seguro de que era el camino correcto, sabía que quería estudiar eso. Me costó más tiempo darme cuenta, pero me di cuenta”.
En Sucre, como catequista de San Francisco, Rommel disfrutaba de las obras de teatro en la iglesia, por lo que fue ahí donde emergió su vocación, de la que ahora es un especialista. Por ahora continúa en EEUU, pero tiene previsto que su primer largometraje sea de una historia boliviana y sea filmado en el país, por lo que tiene en agenda volver su tierra.
Esta entrevista fue publicada en la revista Ecos que circuló con la edición impresa de CORREO DEL SUR el 27 de septiembre.