El Papirri responde a la denuncia de estupro en su contra
Manuel Monroy anuncia acciones legales contra Cristina Wayar “por haber sido perjudicado en mi trabajo artístico” y “persecución ilegal” en las redes sociales
Manuel Monroy Chazarreta, popularmente conocido como El Papirri, rompió el silencio y relató su versión tras la denuncia de estupro en su contra. El músico afirmó que tuvo una “relación” con la artista Cristina Wayar Soux, cuando ella era menor de edad, pero que él no lo sabía.
“He decidido contar la verdad respecto a este caso que está causando daño a mi persona y a mi familia”, comienza el músico paceño en una larga publicación en Facebook, en la que cuenta su versión de los hechos tras la denuncia pública de la artista, quien reveló que él la abusó cuando ella era estudiante del Conversatorio de Música de La Paz y tenía apenas 15 años de edad.
El Papirri tiene otro relato. Él sostiene que el hecho ocurrió hace 28 años, cuando él se había separado y que la muchacha ya tenía tres parejas. De acuerdo con sus palabras, esto “es muy conocido por los profesores y alumnos de la época” y llega incluso a describir las supuestas relaciones que adjudica a la víctima con hombres, según dice, mayores que él.
En medio de su “relación”, dice recordar que la menor de edad le pidió que hablara con su padre, que le contara lo que tenían para que él pudiera visitarla en su casa. Así lo hizo el músico, según su versión. Sostiene que citó al progenitor de la muchacha a un restaurante de Sopocachi, donde “le comuniqué que estábamos iniciando una relación sentimental con Cristina, y que ella quería que su papá lo supiera”.
“El señor me dijo que no era posible esa relación pues Cristina tenía 16 años, que teníamos que esperar dos años más para oficializar algo. Me quedé petrificado; no sabía de su minoría de edad, por eso fui a pedir el consentimiento para la relación. Me instruyó muy serio, terminar la relación, y que si no lo hacía haría una denuncia legal. Y se fue”, asegura Monroy.
Ocho años después, en marzo de 2005, siempre de acuerdo a la versión del denunciado, se reencontraron debido a que la joven le hizo una entrevista para una tesis. En medio de este trabajo, según el compositor, ella le contó que se había casado y que tenía un hijo.
Sin embargo, Monroy añade que ella “confundió” el trato cordial y presentó “una denuncia falsa en el Conservatorio sobre insinuaciones mías”.
“Ahí pude entender que su acercamiento se trataba de una represalia ante lo acontecido 8 años antes. La calumnia llegó a las autoridades del centro académico. Lesionado por la indignación, la impotencia y para evitar mayores problemas, presenté mi renuncia”, afirma El Papirri.
Finalmente, anuncia acciones legales “por haber sido perjudicado en mi trabajo artístico, en mi trabajo de gestión cultural y en mi condición de persona que sufre una persecución ilegal en redes por tanta calumnia”.