Azote al Barça
Los signos que indicaban que el Barcelona no andaba fino irrumpieron ayer, en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, contra el París Saint Germain, que desarboló a los azulgranas (4-0) y les condenó...
Los signos que indicaban que el Barcelona no andaba fino irrumpieron ayer, en la ida de los octavos de final de la Liga de Campeones, contra el París Saint Germain, que desarboló a los azulgranas (4-0) y les condenó a una remontada épica en el Camp Nou.
Sin ritmo, sin personalidad, sin recursos, sin la aparición de sus estrellas, el equipo español fue intrascendente ante un pletórico PSG, muy superior en cada línea, sustentado en un enorme Matuidi en el centro del campo y con un Ángel Di María que se marchó con un doblete, completado por un tanto del alemán Julien Draxler y otro del uruguayo Edinson Cavani.
Fue un triunfo sin contemplaciones, con una enorme superioridad de los locales, que anestesiaron al tridente, durmieron a Lionel Messi y convirtieron al Barcelona en un equipo menor.
Agazapados en las cuerdas, los de Luis Enrique estaban a merced de los golpes del rival. El primero llegó de falta, a los 18 minutos, cuando Di María aprovechó que Luis Suárez se agachó en la barrera cuando no debía (1-0).
El dominio del equipo local tuvo su premio y el Barça tambaleaba. Tiró de orgullo el cuadro catalán, más de garra que de calidad para equilibrar el juego y sacar sus primeros golpes. Suaves, mansos, casi amistosos en el día de los enamorados.
Cuando faltaban cinco minutos para el descanso, Messi perdió un balón frente a Rabiot y el parisiense acertó a servir a un Verratti, que vio solo a Draxler en la banda derecha. El alemán no tuvo piedad de su compatriota Ter Stegen (2-0).
No cambió el guion en la reanudación. O, si lo hizo, fue para empeorar aún más la versión del Barça. En el 55’, volvió a golpear Di María. Recibió el balón a 20 metros de la portería, amagó el pase y se inventó una rosca que encontró un ángulo (3-0).
Ya nada parecía que podía ser peor para el Barça, pero faltaba el gol de Cavani (4-0), que no se pierde una cita y no iba a hacerlo en una noche mágica en la que, además, festejaba sus 30 años.
OTROS PARTIDOS
En el otro duelo de ida de los octavos de final, jugado ayer en Lisboa, Benfica ganó con lo justo al Borussia Dortmund (1-0). Mientras tanto, hoy, el Real Madrid recibirá al Nápoles y el Bayern Múnich al Arsenal. Ambos partidos arrancan a las 15:45 (HB).