Pedales internacionales
Caravanas de pedalistas, banderas de distintas nacionalidades y la euforia de la gente marcaron la Vuelta al Sur de Bolivia, la prueba ciclística internacional que en 2013 recorrió las carreteras de Sucre y Potosí.
Caravanas de pedalistas, banderas de distintas nacionalidades y la euforia de la gente marcaron la Vuelta al Sur de Bolivia, la prueba ciclística internacional que en 2013 recorrió las carreteras de Sucre y Potosí.
La Capital, que con nostalgia se había despedido años antes de las competencias internacionales de ciclismo con la desaparición de la Doble Sucre-Potosí, volvió a vivir con una carrera que parecía llegar para quedarse.
Sin el apoyo del Grupo FIDES, la cadena radial que organizaba la Doble Sucre-Potosí, la incertidumbre reinó en propios y extraños por ver si la Federación Boliviana de Ciclismo estaba en condiciones de garantizar la participación de equipos internacionales y el nivel de los mismos.
La presentación de los equipos, un día antes de la competencia, apagó todas las alarmas al garantizar la presencia de 14 equipos nacionales y cuatro extranjeros, aunque uno de ellos que tenía previsto llegar horas después, al final no lo hizo; sí intervinieron de la prueba Colombia 472, Romero de Perú y un representante de Argentina.
La presencia del pedalista potosino Oscar Soliz, que corría en el Movistar de Colombia y llegaba para reforzar las filas del Pío Rico cochabambino, fue la principal atracción para los aficionados chuquisaqueños, quienes soñaban con ver a un ciclista nacional en lo más alto del podio.
Luego de cinco jornadas de competencia el sueño se volvió realidad. Soliz se coronó campeón de la Vuelta al Sur de Bolivia por delante de los pedalistas colombianos, que llegaron como favoritos a la carrera.
Pero antes, los municipios de Yamparáez, Zudáñez y Tarabuco tuvieron la oportunidad de ver de cerca a los denominados “hombres de acero”, quienes hicieron honor a su denominativo, al superar los cambios de temperatura a lo largo de las carreteras.
Nuevamente la gente salió a las calles, avenidas y plazuelas para aclamar a los pedalistas, valorando su esfuerzo sin importar el equipo al que representaban o la nacionalidad que tenían. Una vez más, el deporte sirvió para unir a la gente.
Era un inicio prometedor para la organización, que anunció para su segunda versión la presencia de más equipos internacionales.
Sin embargo, la del año siguiente fue la última ocasión en la que el ciclismo internacional recorriera las carreteras de la Capital, ya que la falta de apoyo institucional puso fin a la Vuelta al Sur de Bolivia.
Las nuevas autoridades del ciclismo chuquisaqueño anhelan poder devolver ese evento internacional a Sucre, un reto bastante grande y que parece lejano por la falta de compromiso y la indeferencia demostrada en 2015, año del fallecimiento de la Vuelta al Sur.
HECHOS DESTACADOS
MASIVA PARTICIPACIÓN
En su primera versión, la Vuelta al Sur contó con la participación de 17 equipos: 14 nacionales y tres extranjeros. Más de medio centenar de pedalistas de Bolivia, Colombia, Argentina y Perú corrieron la prueba.
El “VOLCÁN” hizo historia
El pedalista potosino Oscar Soliz hizo historia al adjudicarse no sólo la primera etapa de la prueba internacional, que se desarrolló entre Sucre, Zudáñez y Tarabuco, también ganó la Vuelta al Sur, luego de cinco jornadas de competencia.
EQUIPO CON OLOR A CAFÉ
El equipo Colombia 472 fue el más destacado de los 17 que corrieron la prueba internacional. Los cafeteros se ubicaron en el primer lugar de la clasificación general, merced a su buen trabajo en conjunto a lo largo de cada etapa.
HOMBRES DE ACERO
El denominativo “hombres de acero” honró a cabalidad a los ciclistas, que tuvieron que pedalear durante cinco días por las carreteras de Chuquisaca y Potosí, sin descanso. Cada jornada corrieron entre tres y cuatro horas.
PASIÓN POR LAS RUEDAS
El ciclismo demostró que tiene grandes adeptos en el sur del país. Las personas ocuparon las calles, avenidas e incluso las carreteras por donde circularon los pedalistas, para brindarles su apoyo con aplausos y vítores.
TERMINÓ MUY RÁPIDO
La falta de apoyo institucional para solventar los gastos que demanda organizar una prueba internacional de esta magnitud, obligó a la Federación Boliviana de Ciclismo a dar fin a la Vuelta al Sur luego de sólo dos versiones (2013 y 2014).