Cancha a tiempo completo
En la cancha de fútbol de la zona de Garcilazo rueda el balón desde que sale el sol hasta que se oculta. Es el campo más utilizado de Sucre y así, va pagando su vida útil. La necesidad de mantenimiento es inminente...
En la cancha de fútbol de la zona de Garcilazo rueda el balón desde que sale el sol hasta que se oculta. Es el campo más utilizado de Sucre y así, va pagando su vida útil. La necesidad de mantenimiento es inminente tanto para el césped sintético como para los sectores aledaños.
Fue inaugurada en 2013, cuando el presidente Evo Morales llegó y la zona se vistió de gala. Esa imagen quedó lejos de su panorama actual, ya que la basura, el enmallado deficiente y el deterioro de la alfombra sintética son los aspectos que llaman la atención cuando se visita el escenario.
La cancha, que costó Bs 1.797.875, atrajo la atención de los capitalinos porque se trataba de uno de los primeros campos de césped artificial que se construyó en la ciudad, pero también se llevó todas las miradas en octubre de 2016, cuando quedó inundada tras una torrencial lluvia.
Esa lluvia dejó en evidencia otra de las deficiencias del escenario, el sistema de drenaje. Todavía se recuerda cómo algunos futbolistas quedaron “estancados” en medio de la cancha anegada. La atención fue parcial, pero requiere un mantenimiento especial.
“Debemos hacer una revisión al sistema de drenaje”, aseguró el jefe Municipal de Deportes, Roberto Aracena, al recalcar que para esta gestión existe un presupuesto asignado para la refacción de campos deportivos administrados por la Alcaldía.
La idea de la administración del campo de juego también es atender las principales demandas del predio de Garcilazo como el arreglo del enmallado, la reposición de los gránulos de caucho y la limpieza.
“Hay un sector que se nota que hay desechos, de manera coordinada tenemos que hacer una limpieza en el área circundante para que la vista sea mucho mejor, más positiva, de un campo deportivo limpio”, aseguró Aracena.
Es evidente también que el poco cuidado al escenario por parte de los usuarios es lo que provoca que desechos se acumulen en cercanías al campo de juego, así como las averías en la malla olímpica.
Tampoco existen comodidades ni para jugadores ni para espectadores porque a pesar de ser la cancha de fútbol más utilizada en Sucre, no cuenta con camerinos ni graderías.
Los futbolistas deben utilizar las bancas de cemento cercanas al campo o bien, improvisar en algunos morros de tierra, que a su vez sirven como tribunas para los aficionados.
La Asociación Chuquisaqueña de Fútbol, la Liga Institucional de Deportes Sucre, la Mutual de Ex Futbolistas, entre otras instituciones, y clubes ocupan la cancha los fines de semana y también los días de semana. Es complicado ver el escenario vacío, así como divisarlo en buenas condiciones.
LA OTRA MIRADA
El enmallado se va cayendo
Las averías en la malla olímpica generan un mal aspecto del campo deportivo, es evidente que su deterioro fue provocado por los propios usuarios. De a poco, el alambre se va cayendo.
La basura en los alrededores
Los sectores adyacentes al campo deportivo se encuentran con desechos orgánicos e inorgánicos. La falta de limpieza y educación son los principales factores para este panorama.
Las fallas, desde el ingreso
El ingreso a la cancha de Garcilazo es otra de las zonas afectadas y que muestra deterioro. Los usuarios deben sortear unas gradas de piedra cuyos niveles están deformes y hasta parecen improvisados.
Se necesita tribunas
Los morros de tierra cercanos a la cancha son improvisados como tribunas para los espectadores. Asimismo, ante la falta de camerinos, los futbolistas se visten bajo la sombra de algunos árboles.
Inundaciones, la pesadilla
En octubre, la cancha quedó inundada por una torrencial lluvia y aunque hubo una atención parcial, el sistema de drenaje será el primer aspecto a mejorar según anunció la Jefatura Municipal de Deportes.