Nadie puede con Wilstermann

Wilstermann volvió a confirmar que es un serio candidato al título del Torneo Apertura, al conseguir anoche, a costa de Destroyers (2-0), su tercer triunfo consecutivo, con lo que continúa al frente del grupo “A”. Los aviadores asaltaron el estadio Ramón “Tahuichi” Aguilera de Santa Cruz.

Tras su eliminación de la Copa Libertadores, el director técnico del cuadro aviador, Álvaro Peña, aseguró que su equipo iba a dar pelea en el certamen nacional y por ahora, no defrauda. Anoche, además de ganar por tercer encuentro consecutivo, hilvanó su séptimo partido sin conocer la derrota en el Apertura.

En esta temporada, el Rojo cochabambino sólo perdió en su debut a manos de Bolívar (5-1) y ante Vasco da Gama de Brasil, en el duelo de ida de la tercera fase previa de la Copa Libertadores, en Río de Janeiro. Esos resultados quedaron en el olvido por su buen rendimiento.

La revancha que se tomó con Bolívar (4-2), el anterior domingo, en Sacaba, no fue casualidad, pues los dirigidos por Peña demostraron otra vez su alta efectividad en las oportunidades que tuvieron anoche para someter a Destroyers.

Sin embargo, luego de un inicio dubitativo de ambos planteles, el Canario fue el que más cerca estuvo de abrir el marcador, pero el delantero Ángel Cuellar desperdició dos oportunidades de gol.

Y cuando mejor se encontraba el elenco cruceño, apareció el brasileño Serginho. Aunque la acción debió ser invalidada por una mano clara que no vio el árbitro Orlando Quintana ni sus asistentes, el volante adelantó al cuadro cochabambino a los 25 minutos (0-1).

El gol dio lugar a la reacción de los “cuchuquís”, que volcaron la cancha para encontrar el empate, pero no tuvieron suerte. Vitor Cruz y Jefferson Tavares tuvieron sendas chances de anotar pero sus remates salieron desviados.

En la segunda parte, Destroyers mantuvo su libreto y continuó atacando, pero de a poco, el partido comenzó a tomar mucha fricción. En medio de las innumerables faltas cobradas por el árbitro, Serginho propinó una dura patada a Cruz que le valió su expulsión del partido.

Así, con superioridad numérica en el campo de juego, el panorama pintaba favorable para la Máquina Vieja, no obstante, el delantero aviador Ricardo Pedriel fue derribado en el área y el juez pitó penal a los 34’.

Fernando Saucedo se encargó de convertir y sentenciar el partido a favor de los aviadores (0-2), que en los últimos minutos se dedicaron a aguantar el resultado ante la presión destroyana.