Bolívar ahoga al Tigre

Bolívar fue letal en el segundo tiempo y se quedó con el clásico paceño 209, al derrotar por 3-0 a The Strongest, que no pudo celebrar su aniversario con una victoria ante su eterno rival.

Un clásico con pocas emociones y hasta aburrido fue el que se vivió en gran parte de la etapa inicial. Los celestes intentaron animar el compromiso en la parte final del primer tiempo, donde estuvieron más cerca de abrir el marcador.

Predominó la marca y, por momentos, el juego fuerte que ejercitaron ambos equipos, que se olvidaron de llegar a los arcos de Romel Quiñónez y José Peñarrieta.

La única jugada de riesgo en más de 30 minutos de juego fue el disparo de media distancia de Raúl Castro, que desvió Quiñónez. Esa jugada fue a los cinco minutos y hasta los 37’, el compromiso fue deslucido y con varias imprecisiones de ambos cuadros.

Antes del descanso, la Academia despertó. Juan Miguel Callejón estuvo cerca de anotar a través de un tiro libre, Marcos Riquelme falló primero en el mano a mano frente a Peñarrieta y después, su cabezazo se fue desviado.

Todo lo bueno que mostraron los celestes en la parte final del primer tiempo lo repitieron en el complemento para liquidar a su rival.

A los 5’, los académicos se apuraron en un saque de costado, Leonel Justiniano lanzó un centro para Arce, cuyo remate ingresó al arco con la complicidad de los desesperados zagueros atigrados (1-0).

Ahí se cayó The Strongest, que nunca tuvo poder de reacción. Bolívar retrocedió un poco sus líneas y jugando al contragolpe fue contundente para llegar a la victoria.

De esta forma, sobre el minuto 32, Callejón ganó en velocidad a sus marcadores, cedió para Riquelme que puso en bandeja el gol a Ferreira (2-0). El uruguayo marcó el histórico tanto 21 que lo deja como máximo artillero de la historia del clásico paceño.

El Tigre estaba entregado y a los 37’, Lizio, Riquelme y Callejón se unieron para que el español anote el tercero. Así, Bolívar se quedó con el clásico y la punta del grupo “A” –también por la derrota de Wilster–, en una gran lección de contundencia ofensiva ante un elenco atigrado que no levanta cabeza y lleva cinco juegos consecutivos sin ganar.