
El holandés Max Verstappen (Red Bull) ganó ayer el Gran Premio de Austria y el alemán Sebastian Vettel (Ferrari) recuperó el liderato del Mundial de Fórmula Uno, al término de una carrera en la que el desgaste de los neumáticos y los problemas mecánicos fueron decisivos.
Detrás del neerlandés entraron los Ferrari del finlandés Kimi Raikkonen y el alemán Sebastian Vettel, que retoma el liderato del mundial después de que los Mercedes del británico Lewis Hamilton y el finlandés Valtteri Bottas abandonaran por problemas mecánicos.
La carrera tuvo diferentes líderes, desde que Lewis Hamilton le arrebatara ya en la primera curva la primera posición a su compañero Valtteri Bottas, quien tuvo que abandonar la carrera en la vuelta 15 por problemas en la presión hidráulica.
En la vuelta 39, Vettel adelantó a Hamilton, quien en la 53 debió entrar en boxes para poner otros neumáticos ante la grave degradación que sufría. A pesar de incorporarse justo por delante de Ricciardo, el inglés abandonó en la 63 por un problema en la presión de la gasolina.