Quiere seguir los pasos de su padre
A sus diez años, ya es campeón departamental de karting
La manzana nunca cae lejos del árbol. Eso quedó demostrado con Lorgio Ignacio, el hijo menor del consagrado piloto de automovilismo Lorgio Sandoval Montalvo. A sus diez años, ya es campeón departamental de karting y sueña con correr un día en carreras de autos.
Demostrando que la familia Sandoval es sinónimo de deporte tuerca, Lorgio Ignacio va siguiendo los pasos de su padre y su hermano, que iniciaron su carrera deportiva en el karting y ahora compiten en automovilismo.
Y sus primeros acelerones ya le dieron momentos gratos. En 2018 fue el mejor piloto de la Asociación Municipal de Karting en su categoría (6,5 HP), reservada para los pilotos más pequeños. Y este 2019 comenzó con el pie derecho, al ganar la primera prueba del calendario departamental.
“Comencé a mis siete años y tenía la esperanza de cumplir mi meta, ser primero y ahora lo cumplí”, confiesa Lorgio Ignacio, quien reconoce que debe seguir mejorando para debutar en las competencias nacionales e internacionales.
Si bien fue incentivado por su padre para colocarse detrás del volante de un kard, Lorgio Ignacio cuenta que en sus inicios sintió la pasión por este deporte. “Me gustó sentir la velocidad, aunque me costó manejar y aprender las maniobras”, indica.
Pero el “empujoncito” de su padre no fue la única ayuda que recibió de él. Actualmente, Lorgio Ignacio tiene a su progenitor como su jefe de mecánicos y su entrenador personal. “Me lo arregla el karting y me ayuda a descubrir cómo hacer las maniobras en las curvas”, cuenta con mucha alegría.
Ese respaldo, sumado a la habilidad heredada, fue suficiente para que se corone campeón departamental en 2018. Señala que “no fue fácil, me costó bastante, pero al final me sentí orgulloso de mí mismo”.
Aunque recién va dando sus primeros pasos en el deporte tuerca, Lorgio Ignacio ya tiene bastante claro a dónde quiere conducir su carrera. “Quisiera ser campeón nacional y correr a nivel internacional porque a los 15 años voy a entrar a carreras de autos como lo hacen mi padre y mi hermano”, señala.
Es una ilusión que también es compartida por su padre. “Me siento contento por tener dos hijos tuercas. Luis empezó en el karting y ahora está peleando los tres primeros lugares en el automovilismo. El sueño es sacarlos a correr internacionalmente”, comenta, orgulloso, el papá.
Como todo queda en familia, la mamá también juega un rol importante para el desarrollo deportivo de sus hijos. “Soy fan número uno de mis hijos, los apoyo, me encanta que corran, siempre le exijo a mi esposo que si van a correr tengan toda la seguridad del mundo”, dice Paola Vega, madre de Lorgio Ignacio.
Pese al apoyo total que les brinda a sus hijos, la madre confiesa que al principio no fue fácil verlos correr. “Hubo miedo, pero ellos tienen que seguir su camino, hacer lo que más les gusta, a mí sólo me queda apoyarlos y orar por ellos”.
Esta historia se va escribiendo en la familia Sandoval, que vive una carrera a la vez. Lorgio Ignacio es el más pequeño del Team, pero por sus recientes logros promete un camino pavimentado y lleno de alegrías.