Bejarano, feliz en Grecia

En diciembre de 2018, Danny Bejarano comenzó su segundo ciclo en el fútbol de Grecia atendiendo el llamado del Lamia FC, un club chico de la ciudad del mismo nombre.

La realidad del plantel no era de las mejores, pues cumplida la mitad de la temporada estaba en la parte baja de las posiciones y era serio candidato al descenso de categoría.

Pero el panorama cambió el anterior semestre y terminó el campeonato en séptima posición, entre 16 participantes. El volante de marca nacional fue uno de los protagonistas de ese ascenso.

Emigrar es complicado para los futbolistas bolivianos, debido a que el mercado es cada vez más chico. Bejarano lo atribuye a los dirigentes como el principal impedimento.

“Muchas veces traban y cierran las puertas, piden más dinero de lo real. En mi caso gracias a Dios tuve la ayuda del técnico que me dirigió en Panetolikos y me convocó para Lamia”.

No fue tomado en cuenta por Eduardo Villegas para la Copa América de Brasil, pero no pierde la esperanza de regresar a la Verde en las eliminatorias para Qatar 2022.

Más allá del fútbol, Bejarano estableció una ligazón fuerte con ese país con el compromiso matrimonial con una griega de nombre Xrysa con quien espera la llegada de Angelous, su primogénito.