Una persona sin manos dijo presente en las Bodas de Oro del Oscar Crespo

Ayer quedó demostrado que no hay impedimentos para cumplir con los sueños. Un claro ejemplo fue el orureño Josué Vidal, un hombre sin manos que intervino en la primera jornada de competencia de las Bodas de Oro del Circuito Oscar Crespo.

La pasión por los fierros del piloto orureño es destacable, ya que es un hombre que pese a perder las manos, se da modos para competir en pruebas de exigencia como el Oscar Crespo. Ayer lo hizo en la clase R2B.

A pesar de lo dificultoso de la competencia chuquisaqueña, el piloto de Sebastián Pagador pudo cumplir y concluir la carrera. A su llegada a la plaza 25 de Mayo fue elevado en hombros por una gran cantidad de sus paisanos, quienes lo arroparon y lo bañaron en elogios. “Al año les vas a dar con los ojos vendados”, dijo uno de sus simpatizantes.

Emocionado y con la voz a punto de quebrar, Vidal agradeció la presencia de sus coterráneos y aprovechó la oportunidad con los micrófonos de CORREO DEL SUR para destacar el gesto de la Federación Boliviana de Automovilismo Deportivo (Febad), de darle la licencia para conducir en el campeonato nacional tuerca.

Como a lo largo del año, el crédito orureño fue acompañado por el chuquisaqueño Javier Cors, uno de los navegantes más requeridos a nivel nacional y que decidió correr con Vidal. El copiloto también recibió el aplauso de la gente. 

Es lo lindo del deporte, que no discrimina a nadie, sin importar su edad, discapacidad física u otra particularidad.