El talento habla por él
En cancha de césped o de concreto es prenda de garantía.
En cancha de césped o de concreto es prenda de garantía. Sus regates, potencia física y goles, hoy por hoy, lo catalogan como uno de los mejores proyectos del fútbol y el salonismo capitalino. Él es Rubén Darío Sandi Ortiz, deportista que a sus 19 años ya defendió la divisa de Chuquisaca y Bolivia.
Sus primeros pasos los dio en el Club Diablos de Oro y en el ocaso de su niñez pegó el salto a Fancesa, equipo que lo premió jugando en la Primera A del fútbol local debido a su talento con la pelota.
Simultáneamente, Sandi también le hacía al fútbol de salón, disciplina en la que tampoco desentonó y se podría decir que le regaló uno de sus máximos anhelos: defender los colores de Bolivia Sub-19.
Antes de ese dulce capítulo, el capitalino tuvo que ser paciente y ‘tragarse’ ciertas injusticias que lo dejaron fuera de dos selecciones chuquisaqueñas. Pero este año, cuando le dieron oportunidad con la Sub-19, no la desaprovechó y se coronó campeón.
En el fútbol también demostró sus créditos, tanto en Fancesa como en la selección del departamento y una tarea pendiente es el llamado de la Verde.
Propuestas no le faltan, ni en el fútbol ni el futsal, pero tampoco quiere apresurarse y cada opción la toma con calma, ya que confía en su talento, y trabajo para lograr mucho más.
Rubén, ¿fútbol o futsal?
Me gusta más el fútbol, pero en Sucre no hay muchas oportunidades y es en el futsal donde he surgido más, llegando incluso hasta la selección boliviana.
¿Cuál de estas disciplinas es la que mayores alegrías te dio?
Sin duda alguna que el futsal. Gracias a Dios, formé parte de la selección Chuquisaca Sub- 19 que se coronó campeón nacional aquí en Sucre y eso me sirvió para jugar con la selección boliviana en la que también creo que di la talla.
¿Cómo empezó tu historia con la pelota?
En el fútbol empecé en el club Diablos de Oro. Fue el equipo que me cobijó desde mis siete hasta los 12 años y en un partido que jugué me vieron los de Fancesa y a esa edad pasé a sus filas, en las que sigo hasta el día de hoy.
¿Cómo te va con el cementero?
Gracias a Dios fui y sigo siendo uno de los destacados, por lo que desde mis inicios me subían a categorías mayores y desde hace dos años que juego en el equipo de Primera A de la Asociación Chuquisaqueña de Fútbol (ACHF).
Ahí pude mostrarme para ser convocado a la selección Chuquisaca.
¿Qué planes tienes a futuro?
La verdad que vivo del día a día. Mi proyecto es trabajar duro, esforzarme más para que las oportunidades se presenten y tomar la mejor opción para mí y para mi futuro.
¿Qué destacas de tu juego?
Creo que mi estatura me ayuda mucho. Hasta ahora supe aprovecharlo para marcar presencia en el ataque del fútbol y también en una cancha de futsal.
¿Tus buenas actuaciones ya despertaron el interés en otros clubes?
Gracias a Dios, sí. Este año me hablaron de cuatro equipos de la Liga Boliviana de Futsal, pero me quedé jugando la Copa Simón Bolívar de Futsal con Singapur.
Y en fútbol, ¿algún equipo de División Profesional?
Me habló un dirigente de Always Ready para que forme parte de su equipo y me vaya a vivir a La Paz. Estoy esperando que la oferta se concrete porque me adelantaron que ingresaría a la Universidad, tendría vivienda y todo eso.
¿Qué se siente cuando hay ese tira y afloje por tus goles?
Hay una cierta presión, porque tienes miedo de tomar una decisión y que después lleguen ofertas mejores.
¿Quieres agradecer a algunas personas por estos logros?
La familia es lo primero. Mi padre y mi madre siempre me apoyaron y, gracias a Dios, supe salir adelante. En un momento ya estaba por dejar el futsal porque, inexplicablemente, antes de un viaje me sacaron de dos selecciones Chuquisaca y este año tuve que darme una escapadita para seguir en la Sub-19, porque mi papá ya no quería saber nada del futsal por esas situaciones.
Si te dicen: “decídete solo por uno”, ¿cuál eliges?
¡Uh! La verdad que ambos forman parte de mí y es muy difícil, pero creo que me iría por el fútbol.
¿Y a tus rivales?
Prepárense, porque en mí tienen una buena competencia.
FICHA PERSONAL
Nombres: Rubén Darío
Apellidos: Sandi Ortiz
Edad: 19
Fecha de nacimiento: 8 de marzo de 2003
Padres: Martha y Teófilo
Hermanos: Mauricio, María Cristina y Abel
Ocupación: Estudiante de segundo semestre de la carrera de Construcción Civil en la Universidad San Francisco Xavier