El Mundial desde el ojo boliviano
No es lo mismo ver el Mundial, que estar ahí. CORREO DEL SUR conversó con el periodista Mauricio Cambará, exeditor de deportes del diario El Deber y actual redactor de la revista RDC de la capital cruceña, quien nos cuenta su experiencia en la cobertura del Mundial de Qatar 2022.

No es lo mismo ver el Mundial, que estar ahí. CORREO DEL SUR conversó con el periodista Mauricio Cambará, exeditor de deportes del diario El Deber y actual redactor de la revista RDC de la capital cruceña, quien nos cuenta su experiencia en la cobertura del Mundial de Qatar 2022.
“Es un Mundial seguro, rico y caro”. Así resumió Cambará el Mundial que se va jugando en Qatar con relación a los que le tocó cubrir en Alemania 2006, Sudáfrica 2010, Brasil 2014 y Rusia 2018.
Desde el ingreso al país árabe, el periodista deportivo contó que los visitantes deben dar a conocer datos exactos de dónde se alojarán y cuánto tiempo se quedarán en el Mundial.
Para él, que fue a realizar la cobertura del evento, tuvo que mostrar su acreditación FIFA, pero a los hinchas les exigen las entradas de los partidos a los que asistirán.
Ya en Qatar, contó que existen algunas restricciones, como el consumo de bebidas alcohólicas, algo que está prohibido tanto dentro como en las afueras de los estadios.
“Solo venden cerveza sin alcohol”, apuntó, al explicar que los únicos lugares autorizados para el expendio de bebidas alcohólicas son los Fan Fest de la FIFA.
Y aunque mucho se escuchó sobre las restricciones en la vestimenta de las mujeres, explicó que solamente es para las habitantes del país árabe, no así para las visitantes. “Las mujeres pueden ingresar sin inconveniente, pero las de aquí con su indumentaria respectiva”, indicó.
UN PAÍS CARO
El alojamiento y la comida tienen variación de costos, pero para estar por el tiempo que dure el Mundial, es bastante caro.
Informó que se encuentran alojamientos desde 150 dólares la noche. “Es lo más barato que encuentras”, comentó.
Con relación a la comida, “pillas de todo, desde comida rápida, hasta platos tradicionales del lugar”. ¿El costo? Entre 25 y 30 Riyal qatarí, el doble en moneda boliviana.
CAMBIO DE CLIMA
Pese a que la FIFA programó el Mundial de Qatar en época de invierno, el país árabe registra elevadas temperaturas que pueden ser perjudiciales para los visitantes.
“Es un choque de calor al frio”, relató Cambará, al explicar que “hace mucho calor en la calle, pero cuando ingresas a una oficina hay aire acondicionado y eso nos juega una mala pasada”. “Muchos hemos caído resfriados”, confesó.
Por último, resaltó que pese a que el Mundial se juega en condiciones nunca antes vividas, lo que no cambia es la pasión de las hinchadas que llegaron de todas partes del planeta para alentar a sus respectivas selecciones.