Incendios: ¿Cómo evitar o reducir riesgo en casas?
Las placas de yeso, madera no tratada, textiles, plástico, madera y papeles son inflamables
Los incidentes que originan con más frecuencia los incendios en viviendas o técnicamente conocidos como incendios estructurales se atribuyen en mayor parte al desgaste en conexiones y descuidos comunes.
Con ocho incendios de viviendas suscitados este año en Sucre –que en algunos casos ocasionaron daños de consideración– CORREO DEL SUR consultó a un especialista para conocer las medidas que se deben aplicar para evitar o reducir el riesgo de estos incidentes.
“Lo más común es que esto se provoque primero debido a problemas en las conexiones eléctricas y conexiones de gas, estos dos, son los elementos más conflictivos de una edificación”, explica Pedro Chavarría, magister en Ingeniera Estructural quien apunta que los principales problemas son el desgaste y a falta de protección de estas instalaciones.
Otro factor que genera riesgo es la acumulación de materiales inflamables como ser madera seca, papeles, materiales antiguos o líquidos inflamables. Chavarría no deja de mencionar los descuidos humanos, como el mal uso de juegos pirotécnicos o equipos de soldadura, velas o un cigarrillo mal apagado y un lugar mal ventilado.
MATERIALES INFLAMABLES
En las construcciones todos los materiales sufren daños por el fuego, pero hay materiales que corren más riesgo por sus reacciones ante este elemento, lo alimentan y hacen que las llamas se propaguen, estos son: las placas de yeso, la madera no tratada, textiles tratados, plástico, madera y papeles.
Por el contrario, los materiales no combustibles son los que conforman la obra gruesa como ser el hormigón, vidrio, acero y la mampostería de ladrillo o adobe, señala el arquitecto. “A pesar de no ser inflamables, debido al cambio de temperatura y al calor que provoca un incendio pueden perder mucha resistencia y esto podría darnos un menor tiempo de evacuación”, añade.
VIVIENDAS MÁS AFECTADAS
Las viviendas que sufren mayor afectación son aquellas que están construidas con materiales inflamables, tienen un mal diseño estructural y cuyas columnas de hormigón dejan ver las barras de acero, lo que representa un alto riesgo.
Entre ellas se encuentran las viviendas coloniales que tienen elementos vulnerables: las cubiertas de madera, paja o cañas y cielo falso de tumbadillo, que sufren fácil daño por incendios.
DOS TIPOS DE DAÑOS
Existen dos tipos de daños: estéticos o superficiales y estructurales. Los primeros no presentan un riesgo para la estabilidad del edificio y solo dañan el revoque, la pintura o afectan a los elementos decorativos, entre ellos las lámparas y letreros.
Los estructurales sí son de alto riesgo y dañan la integridad del edificio, al disminuir el espesor de las vigas o pilares pueden provocar el desplome del edificio. En estos casos para determinar una demolición parcial o completa que garantice la seguridad de los que habitan o trabajan allí, se requiere una inspección técnica y de cálculo estructural para evaluar el impacto del fuego.
RECOMENDACIONES
“Es mejor prevenir los incendios desde el principio de la construcción y el diseño”, afirma Chavarría al recomendar un revoque adecuado de la estructura de hormigón. “Dejar la armadura en el interior a cinco centímetros del borde”, exhorta.
Chavarría pide a los propietarios de viviendas no acumular materiales inflamables, que son focos de posibles incendios. En edificios de gran magnitud, sugiere “tener rutas de evacuación y elementos de protección contra incendios, tratando de disminuir los tiempos de escape de la gente del edificio y permitiendo que se pueda apagar el incendio cuando es pequeño”, asimismo, hacer mantenimiento de las instalaciones.
¿QUÉ HACER?
Para evitar los incendios estructurales se recomienda pensar en materiales de construcción resistentes, de buena calidad, rutas de escape, no acumular materiales inflamables y hacer constante mantenimiento de las instalaciones eléctricas.
47 incendios en lo que va del año
La temporada de incendios continúa con repercusiones en el municipio de Sucre. En lo que va del año, se registraron 47 incendios, entre los que se contemplan ocho de carácter estructural y 39 de tipo forestal.
“Son hechos que evidentemente dan pena y también (suceden) por descuido de muchas personas”, informa el titular de la Dirección Integral Municipal de Gestión de Riesgos (Dimger), Jorge Tanus.
Tanus agrega que en lo que va del año se atendieron 47 incendios, de los cuales 39 fueron de tipo forestal y ocho de carácter estructural. “Estamos más o menos con la incidencia similar de la gestión anterior”, indicó la autoridad. La gestión 2022 cerró con 98 incidentes forestales y 5 quemas estructurales.
La Dimger recomienda contactarse con los números de emergencia 114 y 800-13-1000 ante cualquier situación que involucre incendios en la ciudad.