Rossy Cuéllar, la fondista local que sueña con conquistar el mundo

La pasión y el ímpetu están en la sangre de Rossy Cuéllar, la fondista chuquisaqueña que a base de resultados demostró ser la atleta ultra más resistente de Bolivia. Tras coronarse ganadora en las dos últimas pruebas de la temporada, Cuéllar se prepara para su mayor desafío: alcanzar la gloria mundial y conseguir un lugar en la Ultramaratón de Tennesse, Estados Unidos, programada para octubre de 2025.

La atleta, de 29 años de edad, ya dejó huella en la historia de este exigente deporte al establecer un nuevo récord nacional en la Ultramaratón Kuntur Backyard de Samaipata, donde se convirtió en la primera mujer en correr durante 25 horas y completar 160 kilómetros.

Pero la hazaña no terminó ahí. En la cuarta fecha del circuito Rumi Chaki Backyard Ultra en Cochabamba, Cuéllar demostró una vez más su fortaleza y resistencia al recorrer 28 vueltas al circuito de 6,7 km, acumulando un total de 187 kilómetros recorridos y siendo la última en pie. 

Esta victoria la consolidó como la campeona y líder del ranking nacional, lo que le aseguró un lugar en el Mundial de Ultramaratón de Santa Cruz.

Rossy, también apasionada por el fútbol, está concentrada en su sueño de brillar en el Mundial. 

“Mi objetivo es quedar la última en pie en Santa Cruz para ser la representante boliviana en Estados Unidos y tratar de ganar allá también”, afirma con determinación.

Iblin Rojas, directora General de la Ultramaratón Bolivia, explicó que el 19 de octubre los 15 mejores atletas nacionales competirán como equipo Bolivia en Santa Cruz, enfrentándose a representantes de 59 países. Solo uno de ellos ganará el boleto para Tennesse, y Cuéllar está decidida a ser la elegida.

Ahora la chuquisaqueña trabaja con rigor los martes, jueves y domingos junto a su entrenador, Ernesto Gonzáles, para encarar el desafío al cien por ciento de su capacidad, además de poner “el corazón y el alma en juego”.

“Cuando empiezo a correr, me transformo. Es como si mi alma se liberara y empiezo a correr sin pensar en nada más”, expresa con una sonrisa que refleja su pasión.

Con un espíritu indomable y un deseo de dejar su huella en el escenario mundial, Rossy Cuéllar avanza con paso firme hacia su sueño de poner en lo más alto la bandera chuquisaqueña y la tricolor nacional tanto en Santa Cruz como en Tennesse.