Gobierno prevé crecimiento de 4,4% e inflación de 2,6% para 2021
El presidente Luis Arce volvió a cuestionar a Jeanine Áñez y afirmó que en su gestión hubo un manejo “absolutamente irresponsable” de la economía
Bolivia proyectó un crecimiento económico de 4,4% y una inflación del 2,6% para este año, según el Programa Fiscal Financiero 2021, suscrito entre el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas y del Banco Central de Bolivia (BCB).
El titular de Economía, Marcelo Montenegro, informó que, debido a la mala administración económica de la pasada gestión, se registró una variación negativa de -11,1% del Producto Interno Bruto (PIB). A ello se sumó la pandemia, que ahondó la crisis económica, dijo.
Otro de las proyecciones establecidas es que el déficit del sector público se reducirá a 9,7%, la inversión pública será de $us 4.011 millones y la variación de las Reservas Internacionales Netas (RIN) ascenderá a $us 1.114 millones.
Según el presidente Luis Arce, el anterior año, durante la gestión de Jeanine Áñez, hubo un manejo “absolutamente irresponsable” de la economía y que se pretendía el retorno al “viejo modelo neoliberal”.
Para esta nueva gestión y descartando afectaciones por nuevas olas de la pandemia, el mandatario afirmó que los índices se podrán alcanzar.
“Van a alcanzarse y van a poder mostrar una economía que gradualmente sale del fondo del abismo, una recuperación gradual hacia el camino del desarrollo, hacia el camino del progreso y, por supuesto, eso debe repercutir en una mejor calidad de vida de los bolivianos y bolivianas”, sostuvo.
El presidente interino del Banco Central de Bolivia (BCB), Edwin Rojas, dijo que el anterior Gobierno estableció metas “inconsistentes” e “inalcanzables”, que no estaban acordes con la realidad del país, ya que priorizó la reducción del déficit fiscal en desmedro de la inversión pública, lo que afectó a la dinámica económica y ocasionó un “alto costo” social, traducido en desempleo y pobreza.
Para ese año, dijo que el BCB plantea buscar garantizar la estabilidad de precios internos, preservando el valor del poder adquisitivo de la moneda nacional, la política económica del Gobierno destinando al fortalecimiento de la demanda y la generación de recursos para la reactivación de los sectores productivos.
Además de preservar el tipo de cambio y reforzar el proceso de estabilización de la inflación, implementar diversas medadas orientadas a mantener los niveles de liquidez en el sistema financiero y consolidar la bolivianización de la economía nacional.
Desde el 2006 se firma cada año el Programa Fiscal Financiero con el BCB, en el marco del libre ejercicio de la soberanía estatal y en remplazo de los memorándums de entendimiento que anteriores administraciones gubernamentales suscribían con el Fondo Monetario Internacional (FMI).