¿Qué medida aplica Argentina para intentar frenar el alza del precio del pan?
El gobierno de Alberto Fernández creó el Fondo Estabilizador del Trigo Argentino, con el objetivo de “estabilizar el costo de la tonelada de trigo que compran los molinos argentinos”
El conflicto entre Rusia y Ucrania repercute en los precios de los alimentos. Ambos países son considerados como productores de trigo, por lo que a partir de la invasión rusa, los precios se elevaron hasta alcanzar récords internacionales.
Este fenómeno se comienza a sentir en la producción de harina y pan en varios países. Es el caso de Argentina, que exporta estos productos y donde en los últimos días subieron los precios. Ante esta situación, el gobierno de Alberto Fernández ordenó medidas para evitarlo.
El pasado fin de semana, el Ejecutivo argentino promulgó el decreto 132 para la creación del Fondo Estabilizador del Trigo Argentino, con el objetivo de “estabilizar el costo de la tonelada de trigo que compran los molinos argentinos”.
“La nueva coyuntura internacional impone la toma de medidas urgentes que coadyuven a la estabilización de los precios internos de productos esenciales para la alimentación de los argentinos y las argentinas, así como mantener un volumen adecuado a las necesidades de abastecimiento del mercado interno, fomentando una mayor producción de estos bienes en la cadena que va desde el productor primario y la productora primaria hasta los consumidores y las consumidoras finales”, versa uno de los argumentos del decreto para la creación del fondo.
Este fondo estará compuesto por los recursos extraordinarios provenientes del aumento de los derechos de exportaciones a los derivados de la soja (harina, aceite y biodiesel), cuya alícuota pasó del 31 al 33 % desde el pasado sábado.
Con estos recursos, el Gobierno argentino otorgará un subsidio a los molinos para evitar que el incremento del precio del trigo afecte a las industrias alimenticias y a las panaderías; con esta medida, los molinos deberán vender la harina a precios similares a los de febrero pasado, antes del conflicto entre Rusia y Ucrania.
El diario Clarín calcula que el precio de la harina de trigo para las panaderías volverá a 25.000 pesos argentinos (alrededor de 1.556 bolivianos), la tonelada, valores previos a la guerra entre Rusia y Ucrania, luego de alcanzar los 35.000 pesos argentinos (alrededor 2.179 bolivianos), en los últimos días.
“Lo que no se aclaró es cómo se distribuirá los fondos a los molineros ni cuánto puede llegar a bajar el precio del pan al consumidor a partir de esta medida”, detalla el diario argentino.
Argentina exporta harina a Bolivia, por lo que los panificadores nacionales sienten el incremento del precio de este producto en el vecino país. El quintal de harina argentina, que antes costaba entre Bs 150 y 160, subió a Bs 220 e incluso hasta Bs 250.