Este miércoles, trabajadores de la carne definen si sube o no el precio en Chuquisaca

La Federación de Trabajadores en Carne de Chuquisaca decidió posponer hasta hoy su decisión sobre si acatará o no la disposición de su entidad matriz, Contracabol, de incrementar entre 2 y 3 bolivianos el kilo de la carne de res a nivel nacional. El Gobierno central descartó desabastecimiento y garantizó la estabilidad del precio de este producto.

La representación del sector local había anunciado para anoche una determinación respecto a las resoluciones de la Confederación Nacional de Trabajadores en Carne de Bolivia (Contracabol). Sin embargo, Florinda Gómez, presidenta del Comité ad hoc para conformación de la Federación de Trabajadores en Carne de Chuquisaca, en una entrevista con CORREO DEL SUR, anunció que esta decisión se la tomará recién hoy.

“Hemos tenido la reunión (ayer), se ha informado la resolución que ha salido de Santa Cruz y los dirigentes de las asociaciones han indicado que van a bajar a sus bases. Mañana (por hoy) estarán en reuniones y tenemos previsto una reunión a las 7 de la noche (de este miércoles), con todos los (representantes de) mataderos más para saber qué han determinado las bases en cada mercado”, indicó Gómez.

Entretanto no se tome una determinación, agregó la dirigente, el precio de la carne de res no sufrirá alzas. “No se ha incrementado, el precio está normal y estamos manteniendo hasta sacar una resolución a nivel departamental”, remarcó la representante.

GOBIERNO Y GANADEROS

Desde el Gobierno nacional, el viceministro de Comercio Interno, Grover Lacoa, aseguró  ayer, martes, que no existe justificativo para el alza del precio de la carne de res y advirtió con procesos penales contra los comercializadores de carne que estén cometiendo especulación y agio.

“No existe ningún justificativo técnico para que haya un incremento en los costos de comercialización ya que a la fecha está garantizado la producción, abastecimiento de carne a precio justo”, declaró la autoridad a los medios de prensa en La Paz.

Según los datos que brindó, en el país se producen 292.210 toneladas de carne por año y el consumo interno es de 268.696 toneladas, por lo que existe un saldo de 23.000 toneladas.

Lacoa precisó que de ese saldo, 16.000 toneladas son para la exportación, de las cuales solo se exportaron 13.000 toneladas.

Por su parte, la Confederación de Ganaderos de Bolivia (Congabol) rechazó ayer la amenaza de incremento del precio de la carne y desabastecimiento la Contracabol, argumentando que se trata de un conflicto malintencionado de los carniceros de La Paz, que intentan incidir en los carniceros de Santa Cruz. Aclararon que los precios se mantienen y hay normalidad en el país. “No hay motivo para incrementar el precio de la carne ya que el sector ganadero nacional garantiza el abastecimiento de carne en el país, como lo ha venido haciendo a lo largo de estos años, pese a la difícil situación que estamos atravesando producto de la sequía e incendios; por consiguiente, no se justifica el incremento anunciado”, afirmó el presidente de la Congabol, Hernán Julio Nogales, quien dio lectura a un pronunciamiento.

La Contracabol resolvió el lunes, en un ampliado nacional, incrementar el precio del kilo de la carne, en todo el país, entre 2 y 3 bolivianos. “Siendo que los centros de remate, ganaderos, empresas distribuidoras y proveedores en general, subieron injustificadamente el precio de la carne, nosotros, los comerciantes a detalle, también subiremos el precio”, anunció ese día su secretario ejecutivo, Jesús Huchani.

¿HAY ALZA O NO?

Algunas vendedoras del mercado Central afirmaron ayer que reciben el kilo gancho de la carne del proveedor con un alza de Bs 3, pero ellas decidieron mantener el precio al consumidor final, a Bs 30.

La papa sigue cara, pese a los controles

La papa es lo que más preocupa a las amas de casa en Sucre, pues su precio sigue alto, pese al esfuerzo de las autoridades de controlar el alza.

El intendente municipal, Érick Medrano, dijo que normalmente Ravelo abastece de papa a Sucre, pero por efectos climatológicos, como la granizada o la helada, afectaron la producción del tubérculo que no pudo llegar con normalidad a los mercados de la Capital.

La papa que hay es de Tarija y Cochabamba, pero su precio se incrementa por el costo del transporte y la logística. De todos modos, Medrano afirmó que pudieron “reducir” los precios en el mercado Abasto, donde ahora se vende entre 50 y 52 bolivianos la arroba de papa rosada nueva, y la papa imilla está entre 45 y 47 bolivianos (tamaño mediano) y de 55 a 58 bolivianos (más grande).

El coordinador municipal de Mercados, Vladimir Paca, por su lado, dijo que posiblemente la provisión de papa a Sucre se normalice en noviembre con la cosecha que comenzará a comienzos de ese mes en Ravelo. Anunció más controles.