San Francisco Xavier envía semillas a bóveda más grande del mundo
La Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca envió semillas nativas de maíz y frejol a la Bóveda Mundial de Semillas que está en la isla de Spitsbergen, en Noruega.
La Universidad San Francisco Xavier de Chuquisaca envió semillas nativas de maíz y frejol a la Bóveda Mundial de Semillas que está en la isla de Spitsbergen, en Noruega.
San Francisco Xavier –por intermedio del Instituto de Agroecología y Seguridad Alimentaria (IASA), dependiente de la Facultad de Ciencias Agrarias– se presentó a una convocatoria de la organización internacional Crop Trust con el proyecto “Activación de bancos de germoplasma del sur de Bolivia para la resiliencia del cambio climático”, que fue seleccionado para realizar esta labor desde octubre del 2022
La directora del IASA, Martha Serrano, explicó que esta actividad consistió en enviar un tercer duplicado de semillas nativas de maíz y frejol.
“Es importante subrayar este detalle porque el primer y segundo duplicado se queda en Bolivia, incluso durante la ejecución del proyecto se obtuvo un cuarto duplicado que se quedará en el Banco de germoplasma de la Facultad de Ciencias Agrarias y en su similar de Iboperenda de Muyupampa, dependiente de la Gobernación de Chuquisaca”, remarcó, según una publicación de la Universidad.
Añadió que este resguardo garantiza que, como país, se pueda recuperar las semillas en caso de alguna catástrofe o pérdida total del germoplasma boliviano.
Gracias al convenio firmado entre la Universidad y el gobierno de Noruega, San Francisco Xavier puede seguir enviando semillas durante los siguientes diez años.
Por tratarse de una convocatoria mundial, la casa de estudios superiores compitió con grandes bancos de germoplasma del mundo; con todo, la calidad del proyecto se impuso a través de las colecciones que existen en los bancos de la USFX dispuestos en Monteagudo, en la Granja de Villa Carmen (Yotala) y en el centro de investigación de La Barranca.
“Lo que se hizo fue tomar estas accesiones (semillas) para sembrarlas nuevamente en los campos experimentales. En estos campos se hizo el manejo del cultivo siguiendo los lineamientos que exigía el organismo financiador (Crop trust)”, indicó Serrano.