Crisis de diésel paraliza sectores productivos y desata protestas en varias regiones
Cañeros, arroceros, lecheros y transportistas advierten millonarias pérdidas y temen una “hambruna” si el Gobierno no garantiza el suministro de combustible
La falta de diésel puso en emergencia a varios sectores de la producción nacional, que este miércoles protagonizan protestas y bloqueos para exigir una respuesta inmediata del Gobierno. El desabastecimiento de combustible frena la actividad agrícola e industrial y amenaza con graves pérdidas económicas.
“Estamos atravesando una de las peores zafras de los últimos años por la escasez de diésel porque vivimos en la cola para agarrar diésel y de forma limitada. Más del 70% de nuestra materia prima está en campo”, denunció Ruddy Rodríguez, productor cañero, mientras el presidente de su sector, Beltrán Flores, señaló que ya no se trabaja de forma continua porque deben pasar días en filas para abastecerse.
En Beni, los arroceros enfrentan la temporada de siembra sin combustible. David Pérez, su representante, aseguró que en Trinidad el diésel es acaparado por personas que luego lo revenden, lo que agrava la crisis.
En Cochabamba, los productores de leche reportaron una caída del 70% en su producción. “Varios compañeros relacionados con el tema del agro están sufriendo porque no se ha podido garantizar el tema del combustible, porque necesitamos para la maquinaria agrícola, los tractores (…) el perjuicio es abismal”, lamentó Jhasmani Medrano, de Fundaprolec.
La preocupación se extiende también al transporte de carga pesada. Pedro Quispe, dirigente del sector internacional, alertó que la escasez de diésel podría derivar en un desabastecimiento de alimentos. “En Santa Cruz no va a haber alimentación, res, pollo, azúcar, arroz, porque no están sembrando, no están cosechando ni el 50%; llegamos a una hambruna a fin de año”, advirtió.
En días recientes, productores de arroz y soya en el municipio de San Juan, Santa Cruz, ya habían bloqueado carreteras para exigir la provisión de diésel, advirtiendo que la siembra de verano está en riesgo.
Ante la magnitud de las protestas y el impacto en la cadena productiva, los sectores movilizados demandan una pronta solución que evite una crisis alimentaria nacional.