El misterio de la esfinge Gizeh develado
La esfinge de Gizeh en Egipto siempre fue un misterio, hasta que el científico alternativo Robert Temple develó sus secretos después de descubrir que probablemente la misma no corresponde a un león...
La esfinge de Gizeh en Egipto siempre fue un misterio, hasta que el científico alternativo Robert Temple develó sus secretos después de descubrir que probablemente la misma no corresponde a un león, sino al perro Anubis el cual fue tallado durante el gobierno de un faraón con su rostro, tal cual la conocemos hoy.
Era perro, no león
El cuerpo de la esfinge, que fue desenterrado luego de 4.500 años de que su cabeza apenas asomara en un terreno bajo, no ha hecho más que despertar la curiosidad de los investigadores de todos los tiempos por los muchos misterios que la rodean. Entre ellos la evidente erosión por agua (supuestamente de lluvia en pleno desierto) ese rostro inquietante en cuerpo de animal, y la "cámara secreta" que yace debajo de ella, entre otros.
Robert Temple está seguro que la esfinge no siempre tuvo cara humana y que su cuerpo no es de león, sino que fue tallada en forma de perro, dedicada al dios Anubis, guardián del más allá de los egipcios.
Su descubrimiento lo realizó en base al sentido común, pues es evidente la apariencia anormal y desproporcionada de la esfinge. Él, quien la vio de frente, la describe como una estatua gigantesca del tamaño de un trasatlántico con una cabeza diminuta, lo cual se contradice con el arte egipcio que se caracterizó obsesivamente por mantener la proporcionalidad en todas sus expresiones arquitectónicas o artísticas.
Era ilógico que se hayan equivocado tanto en las proporciones justo al construir la estatua más grande del mundo y tampoco se explicaba por qué la esculpieron sobre un foso y en un nivel más bajo del suelo, como si no quisieran mostrarla. (La Gran Pirámide se construyó sobre una colina y desde ella apenas se puede ver la esfinge asomada a lo lejos).
Quedó por los suelos la primera teoría que decía que es león basándose sólo en las patas, pero es seguro que no tiene nada "remotamente leonino”, afirma.
Concluyó que la cabeza fue esculpida sobre la que alguna vez fue más grande.
Llegó a la conclusión de que la esfinge era en realidad un perro agazapado, lo cual sí tiene sentido pues era un guardián que protegía lo que estaba detrás, en este caso la sagrada necrópolis de Guiza.
Dentro de la tumba de Tutankamón encontraron al perro Anubis (la imagen tradicional), con las patas agazapadas, igual que la estatua.
Luego de ese descubrimiento, con su esposa Olivia continuaron buscando la verdad sobre otras cosas ocultas, como a quién pertenece el rostro tallado posteriormente. Sus investigaciones arrojaron que la esfinge no tuvo cabeza humana sino hasta el 2.000 a.C. y que pertenece al faraón de la XII dinastía, llamado Amenemhet II, esculpido a partir del cuello y tronco de Anubis.
La cámara secreta
Otro de los misterios era la erosión ocasionada por agua en la Esfinge y en las paredes del foso sobre la que está construida. (El investigador Schwaller de Lubicz , en 1950, fue el primero en hablar de erosión por agua en la esfinge ubicada en pleno desierto). En aquel entonces dijeron que se debió a una "lluvía antigua" cuando el clima en Egipto era probablemente otro.
Fue un tema que no se discutió ni analizó lo suficiente en su momento.
Otro misterio son las cámaras que habrían debajo de este gigante deformado. Incluso se acuño la teoría de la “Cámara secreta” que tal vez inspiró a J.K. Rowling a escribir uno de los libros de la saga de Harry Potter. Por años se afirmó lo de la cámara y hasta un “túnel trasero” sin tener las pruebas.
Robert y Olivia las buscaron y las encontraron en textos antiguos donde aparecen testimonios oculares que la describen y ubican de manera precisa debajo de los muslos de la Esfinge a la cual se accedía de manera vertical, con dimensiones exactas indicando su distancia entre la cola y la cabeza, la cual tendría una apariencia típica de una cámara funeraria con inscripciones jeroglíficas en las paredes y restos de un ataúd.
Supuestamente fue el enterramiento de un faraón posterior. Plinio, el S. I d. C. sugiere fue el rey llamado Amasis. Todas las fuentes están citadas en su libro “El misterio de la Esfinge”.
Esa cámara ahora está inundada de cemento y es inaccesible desde 1926 para supuestamente protegerla del entonces incipiente turismo.
Construida en el suelo
Para el investigador Temple, tenía que haber alguna buena razón para que hayan decidido ponerla en una depresión del suelo. Fue entonces que encontró la relación con la erosión por agua, indicando que el foso de la Esfinge era en realidad la puerta de una cisterna en el tiempo en que el Nilo solía crecer y formar un lago hasta las puertas de la esfinge durante tres meses al año, lo que ya no ocurre desde que se construyó la represa de Asuán.
Los Temple registraron incluso fotos de agujeros de perno y otros signos de compuertas de agua que se utilizaron entre el Templo de la Esfinge y el Templo del Valle.
En síntesis, la Esfinge estaba en la base de un lago cuyo nivel subía o bajaba de acuerdo a las crecidas del río Nilo. Sus compuertas se cerraban o abrían para permitir o frenar el paso de agua.
Esa es la razón de su erosión horizontal, por las variantes del nivel del lago que allí se formaba. La erosión vertical en las paredes del foso se explican a partir del dragado continuo de la cisterna que siempre se llenaba de la arena arrastrada por el viento, la cual tenía que ser retirada y en ese proceso formaba las grietas verticales.
En sus rituales mortuorios, la Esfinge era el centro del culto pues en el Lago del Chacal (tal vez el que crecía al borde de la Esfinge), el hijo del faraón muerto tenía que lavar las entrañas de su papá por 70 días que era el tiempo que duraba el periodo de momificación.
- Robert Temple es investigador estadounidense y radica en Gran Bretaña. Mundialmente conocido por el “Misterio de Sirio”, entre otros libros que son un referente de la arqueoastronomía alternativa. Fue miembro de la Royal Astronomical Society y profesor en varias universidades.
- La foto que sirve de fondo a este reportaje, es parte de una colección privada la cual se calcula fue tomada entre la 1a y 2a guerras mundiales, por la indumentaria de las personas. La Gran Pirámide aparece atrás en el horizonte. La de abajo (a color) es reciente y fue tomada por el investigador. En la misma se ve "silueteada"la forma original de la Esfinge que era un perro. Los rasgos del rostro se van borrando con el paso de los años.