Medinaceli en el recuerdo

En 1958 no habían transcurrido diez años de la muerte de Carlos Medinaceli Quintana pero su recuerdo seguía latente en Potosí, la ciudad que él asumió como suya. El jefe del Distrito Escolar, René Calvo

Medinaceli en el recuerdo

Medinaceli en el recuerdo

Banda del Colegio Carlos Medinaceli en la fachada de su edificio propio. Foto: Cuenta de Facebook Carlos Medinaceli.

Banda del Colegio Carlos Medinaceli en la fachada de su edificio propio. Foto: Cuenta de Facebook Carlos Medinaceli.

Busto de Carlos Medinaceli en la Plaza 27 de Octubre de Cotagaita, departamento de Potosí.

Busto de Carlos Medinaceli en la Plaza 27 de Octubre de Cotagaita, departamento de Potosí.

Estudiantes del Colegio Carlos Medinaceli con el tigre, símbolo de su establecimiento. Foto: Cuenta oficial de Facebook

Estudiantes del Colegio Carlos Medinaceli con el tigre, símbolo de su establecimiento. Foto: Cuenta oficial de Facebook


    Juan José Toro Montoya (*) para Ecos
    Ecos / 17/02/2019 18:19

    En 1958 no habían transcurrido diez años de la muerte de Carlos Medinaceli Quintana pero su recuerdo seguía latente en Potosí, la ciudad que él asumió como suya. El jefe del Distrito Escolar, René Calvo, y el inspector de Educación Secundaria, Ricardo Bohórquez, afrontaban un problema: el crecimiento de la población estudiantil. Los dos colegios de varones, Pichincha y Calero, y los dos liceos de mujeres, Sucre y Santa Rosa, ya no daban abasto para más alumnado. Fue entonces que se decidió la fundación de un nuevo establecimiento: el Colegio Nacional Mixto Carlos Medinaceli.

    La historia de este establecimiento –que ya ha rebasado el medio siglo– es tan larga y rica que amerita todo un libro. Uno de sus méritos es su carácter pionero ya que fue el primero coeducativo, es decir, destinado a la educación tanto de varones como de señoritas, algo impensable en un momento en el que el machismo era una de las condiciones prevalentes de la sociedad.

    Para ese tiempo, un colegio mixto era un desafío pero el enfrentamiento a los retos fue una característica de Carlos Medinaceli. Bien lo sabía Ricardo Bohórquez, que lo conoció personalmente pues fue uno de los últimos en ser incorporados a la primera generación de Gesta Bárbara (1).

    Quizás por eso, el nombre que se eligió para el nuevo colegio fue el del autor de “La Chaskañawi”. Potosí tiene otro Carlos Medinaceli en su historia, el vencedor de la Batalla de Tumusla, pero los fundadores del establecimiento fueron específicos: el colegio llevaría el nombre del escritor.

    Con ese propósito se siguieron los trámites para la expropiación de un antiguo hotel que estaba ruinoso y con riesgo de derrumbarse en la hoy Avenida Villazón, cerca de la estación del ferrocarril. Una vez conseguido ese propósito, se refaccionó el edificio y el Colegio Nacional Mixto Carlos Medinaceli fue fundado a las 15:00 del miércoles 11 de marzo de 1959. Comenzó a funcionar con seis cursos de manera oficial el 2 de abril de ese año bajo la dirección del profesor Tomás Delgadillo.

    Durante sus casi 60 años de existencia, educó a generaciones y conquistó varios lauros. Sus colores deportivos son el amarillo y negro y es por eso que su mascota es un tigre. Su edificio, ubicado en el lugar donde se fundó el colegio, fue refaccionado y ampliado el año pasado por la Alcaldía de Potosí con una inversión que rebasó los 4,3 millones de bolivianos. Ahora, además de tener sus aulas remodeladas, cuenta con un coliseo para sus aproximadamente 800 alumnos.

    Más colegios

    “A las nueve ha comenzado a repicar la campanita de la capilla de San Javier, llamando a misa. Señoras y señoritas, cholas e indias, se encaminaban al templo. La capilla se encuentra en la plazuela llamada de ‘San Javier’, a la cabecera del pueblo, avanguardada en sus tres frentes por el caserío y al norte, por el cinturón blanquecino del ‘dique’”.

    Quienes lean “La Chaskañawi” encontrarán en esa y otras descripciones referencias inequívocas a Cotagaita, capital de la provincia Nor Chichas del departamento de Potosí. Hasta ahora se repite que San Javier de Chirca es, en realidad, Santiago de Cotagaita, el que, en palabras del protagonista de la novela, Adolfo Reyes, era un “pueblo que se enorgullece de sus ‘tradiciones heroicas’, de su soberbio nombre” y “ceremonioso cuanto a cumplimientos sociales”. Debido a ello, esa ciudad intermedia es denominada “la tierra de la Chaskañawi” y allí, en la Plaza de Armas 27 de Octubre, está un busto de Carlos Medinaceli.

    Sin embargo, a diferencia de Adolfo, Medinaceli no vivió en Cotagaita sino en un pueblito todavía más pequeño ubicado unos 25 kilómetros más allá, Vichacla. En ese lugar estuvo la hacienda de Francisco Medinaceli, el padre de Carlos, y lo más probable es que ese haya sido un solar familiar, herencia de antepasados entre los que se cuenta Carlos Medinaceli Lizarazu, el vencedor de Tumusla.

    La construcción está ruinosa, pues de ella solo quedan los muros, pero, tras el entusiasmo por el hallazgo de los restos de Medinaceli en La Paz, la Gobernación de Potosí inició trámites para su restauración y conversión en museo.

    Tanto en Cotagaita, que está a 180 kilómetros de Potosí, en el camino hacia Argentina, como en Vichacla hay sendos colegios con el nombre de Carlos Medinaceli y ambos están dedicados a la memoria del escritor. El de Cotagaita es de nivel secundario mientras que el de Chequelte, ubicado justo enfrente de la hacienda, tiene inicial y primaria.

    Además, en el municipio de Cotagaita existen otros establecimientos con el nombre de Carlos Medinaceli, uno en Rosario y otro en Witahui, ambos de niveles inicial y primaria.

    En Colquechaca, capital de la provincia Chayanta, hay otro colegio con el nombre de Carlos Medinaceli y en la jurisdicción de ese municipio otro, en Yacona Baja.

    En Llallagua, ciudad intermedia de la provincia Bustillo, existe una escuela con ese mismo nombre, solo con el nivel primario y, finalmente, en Tomave, en la provincia Antonio Quijarro, está la unidad educativa Carlos Medinaceli de Altipampa.

    En total existen nueve escuelas y colegios con el nombre de Carlos Medinaceli en el departamento de Potosí mientras que, según confirmó el director departamental de Educación de Chuquisaca, Humberto Tancara, en su jurisdicción no existe uno solo.

    Existen, en cambio, una unidad educativa con ese nombre en Cochabamba, en el camino a Buena Vista; y en La Paz, en Tembladerani.

    Estos datos confirman, por una parte, la trascendencia que tuvo su obra en la literatura boliviana y, por otra, cuál fue la tierra que lo quiso y aceptó más.  

    (*) Juan José Toro es presidente de la Sociedad de Investigación Histórica de Potosí (SIHP).

    (1) La pertenencia de Ricardo Bohórquez Ramírez a la primera generación de Gesta Bárbara está referida por el propio Medinaceli en el número 10 de la famosa revista en la que se publicó que “integran su Redacción nuevos y valiosos elementos. Los señores Teófilo Loayza y Ricardo Bohórquez de sorprendentes aptitudes para los grabados xilográficos, se encargarán de la parte gráfica”.

    Orígenes

    Fue Mariano Baptista Gumucio quien reveló que Carlos Medinaceli Quintana, el escritor, es descendiente directo de Carlos Medinaceli Lizarazu, el vencedor de la batalla de Tumusla.

    Detalla que, cuando tenía 25 años, en 1814, Medinaceli Lizarazu se casó con Gabina Leaño y Baspineiro, una mujer de los Chichas con la que tuvo cuatro hijos.

    El mayor de ellos, Gabino Medinaceli Leaño, fue padre de Zacarías Medinaceli Ferreira, que formó parte de la Quinta División del Ejército, encabezadas por Narciso Campero, precisamente en los años en los que se produjo la invasión chilena al Litoral boliviano.

    Debido a esa circunstancia histórica, a Zacarías le correspondió combatir en la batalla de Inti Orcko, también conocida como del Alto de la Alianza debido a que las tropas bolivianas y peruanas fueron derrotadas por los chilenos, el 26 de mayo de 1880, y, tras esa tragedia, Bolivia se retiró de la guerra. Zacarías murió en esa acción bélica así que, al igual que su abuelo Carlos, es héroe de la Patria.

    Zacarías Medinaceli no murió sin descendencia. Su hijo, Francisco Medinaceli Villegas, fue el propietario de la hacienda en Chequelti y es quien tuvo seis hijos con Carmen Quintana Carrasco y Mendoza, ilustre dama de la sociedad sucrense cuya casa familiar estaba en la hoy calle Junín de la capital del Estado. Uno de ellos fue Carlos Emilio Medinaceli Quintana, nuestro escritor.

    ¿Cómo fue la relación entre Francisco y Carmen? Aunque los indicios permiten tener una idea, es difícil hacer afirmaciones porque los testimonios de los hijos apuntan hacia la armonía.

    “Carmen Quintana Carrasco y Mendoza, mi madre, se casó en Sucre a los 16 años de edad. Francisco, mi padre, tenía entonces 27. Ella era de gran sensibilidad, admiradora intelectual e impulsora de las inquietudes intelectuales de su hijo Carlos. Las relaciones entre mis padres fueron cordiales, no discutían jamás, pero Francisco, por razones de salud y preferencia, vivió en su propiedad de Cotagaita desde 1915 hasta 1945, en que murió, con ocasionales visitas a la familia en Potosí y la Paz”, escribió Emilio Medinaceli.

    Se habla, entonces, de un matrimonio, pese a que la partida de bautismo de Carlos lo refiere como “hijo natural”. Si se toma en cuenta que Carmen nació en 1879, su matrimonio debió ser en 1895, dos o tres años antes del nacimiento de Carlos.

    Pero lo que permiten deducir esos datos es que Francisco y Carmen se visitaban constantemente, así que no se puede descartar que algunos de sus hijos, o incluso todos, pudieron haber nacido en la casa de hacienda de Chequelte, que tenía un clima más benigno incluso que el de Sucre.

    La decisión de bautizarlos a todos en Sucre, como que así parece haber sido, pudo ser una decisión de doña Carmen que, por todos los indicios, era la que influía más en el destino de sus hijos. “Mi mamá se vino con nosotros de Cotagaita a Potosí porque ya teníamos que entrar al colegio –escribió Laura–. Carlos estudiaba en Sucre. Antes estuvimos todos en Uyuni, donde trabajaba mi padre y donde se hizo muy amigo de Emilio Villanueva. Después radicamos con mi madre en Sucre y en Potosí, y los hijos volvíamos, sobre todo Carlos y yo, a ver a mi padre, solamente en las vacaciones a Chequelti”.

    Los colegios Medinaceli

    DISTRITO

    CÓDIGO

    NOMBRE

    Potosí

    8148121

    Colegio Nacional Mixto Carlos Medinaceli

    Colquechaca

    81450071

    Unidad Educativa Carlos Medinaceli

    Colquechaca

    81450100

    Carlos Medinaceli de Yacona Baja

    Llallagua

    61470004

    Unidad Educativa Carlos Medinaceli

    Cotagaita

    81430120

    Colegio Nacional Carlos Medinaceli

    Cotagaita

    81430021

    Carlos Medinaceli de Chequelte

    Cotagaita

    81430128

    Carlos Medinaceli de Rosario

    Cotagaita

    81430090

    Carlos Medinaceli de Witahui

    Tomave

    71370007

    Carlos Medinaceli de Altipampa

     

     Fuente: Dirección Departamental de Educación de Potosí.

     

    Etiquetas:
  • Medinaceli
  • recuerdo
  • Compartir:

    También le puede interesar


    Lo más leido

    1
    2
    3
    4
    5
    1
    2
    3
    4
    5
    Suplementos


      ECOS


      Péndulo Político


      Mi Doctor