Primer “salto del diablo”: ¡Puenting en Yocalla!

Unas 15 personas cuyas edades oscilan entre 13 y 35 años experimentaron la aventura más extrema de su vida: superaron sus miedos y se atrevieron a realizar un salto de infarto en el puente nuevo de Yocalla, situado por encima del “Puente del Diablo”, dueño de una de las leyendas más famosas de la Villa Imperial.

Este fue el primer “salto del diablo” —así lo denominaron— y a él solo se apuntaron aquellos que gustan de la aventura y el riesgo, de los desafíos y las emociones fuertes.

La práctica conocida como “puenting” es un deporte extremo, emocionante, que consiste en lanzarse al vacío desde un puente sujeto con una cuerda atada al cuerpo sin llegar a tocar el suelo. ¡Menuda adrenalina!

Entre los 15 valientes había dos que llegaron especialmente para el efecto desde La Paz.

El puente tiene una longitud de 60 metros y una altura, hasta el lecho del río, de 25. La altura del salto está relacionada con las características del viaducto.

Según el testimonio de algunos de los que vivieron la experiencia, al margen de la adrenalina corriendo por todo el cuerpo mientras se prepara el salto al vacío, se siente una emoción única. Y, como se trata de algo novedoso, uno sale de su zona de confort. Además, es liberador y desestresante.

Seguridad ante todo

La actividad en concreto se desarrolló el 29 de junio, a partir de las 8:00. Fue organizada por el Club Aventura Sucre con el apoyo del Club Ecoclimb de Potosí. La Alcaldía de Yocalla dio su visto bueno y la Agencia de Viajes Silver Tours, de la Villa Imperial, se encargó de recibir las inscripciones.

Carlos Asebey, presidente del Club Aventura Sucre, es ingeniero civil y especialista en sistemas de gestión, seguridad y salud, además de miembro del SAR Bolivia e instructor de rescate de esa institución. Los demás instructores del club también cumplen la misma función en el SAR Ejército.

En el puenting, el riesgo y la seguridad van de la mano. Días previos al salto, Asevey y el equipo de instructores hicieron una inspección técnica en el lugar, de modo tal de calcular diferentes factores y reducir al máximo el riego antes de la aventura.

No obstante, para disfrutar de esa experiencia única hay ciertos requisitos de salud y aptitud física que la gente debe reunir; por ejemplo, no es apta para quienes tienen problemas de corazón y sobrepeso. “Todo es garantizado, somos especialistas en manejo de cuerdas con más de 12 años de experiencia”, aclara Asebey.

Luego, “no es solo saber hacer nudos y botarse al éxito; eso lo hacen los empíricos. Tienen que ser personas con formación y criterio que saben lo que hacen. No cualquiera hace esto”, manifiesta, seguro de lo que está diciendo.

A los aventureros les tocó un día agradable y con un clima benigno, mientras en Potosí el frío era intenso. Asebey aclara que las bajas temperaturas no afectan en ningún sentido al puenting.

Pioneros

El Club Aventura Sucre empezó haciendo puenting en la capital del país hace dos años y medio. En 2018 lo intentaron también en el área rural de Potosí.

Estuvieron con esta intrépida actividad en la inauguración del puente de Fisculco y hace un año, en Tarija.

“Nosotros somos pioneros en organizar estas actividades extremas en el sur del país”, remarca Asebey. •