Balmain Men’s Fall 2020

Una imagen gigante de dunas del desierto, una pista de arena de color arena y modelos con sandalias, vestidos con ropas drapeadas para climas cálidos, fueron parte de la pasarela de Olivier Rousteing.

Además, el show contempló la actuación dramática de danza moderna de hombres con el torso desnudo y pantalones de estilo dhoti. 

Un poco de Olivier

El diseñador, que creció como hijo adoptivo de padres franceses, ha estado reflexionando sobre sus orígenes y quería gritar sobre sus raíces recién descubiertas en Somalia y Etiopía.

El año pasado, el emotivo documental “Wonder Boy” hizo que Rousteing comience la búsqueda de sus padres biológicos. También ha estado presionando al gobierno francés para cambiar las leyes de información que rodean los nacimientos y la adopción para permitir que personas como él rastreen sus orígenes e identifiquen a sus padres biológicos. Es por eso que Rousteing describió el espectáculo como una mezcla de “lo personal y lo profesional”, y por qué estaba ansioso por revelar otro lado de su creatividad, uno que era menos duro y brillante, y más suave, colorido y drapeado.

Sobre los diseños

Mezcló los clásicos: un gran abrigo de camello, un blazer azul con botones brillantes y trajes de los años ochenta con brillos llamativos, con formas robadas del hemisferio sur, Medio Oriente e India, como pantalones dhoti y blusas drapeadas o envueltas y túnicas largas, algunos de ellos hechos en ante de plumas. También había capas para las noches frías del Sahara y tejidos sueltos y lánguidos.

Después de todo, es Monsieur Rousteing, y porque no puede resistir un poco de brillo, o un toque de motociclista, colocó suéteres de argyle con lentejuelas doradas, trincheras transformadas y trajes con telas doradas y satinadas y rodilleras acolchadas •