¡Alerta, caries!

Una buena higiene bucal no solo previene la formación de caries y evita el mal aliento, también impide la aparición de otras enfermedades más peligrosas —como cardíacas y pulmonares— que se generan por tenerla descuidada.

Según algunos expertos, las personas pueden conservar sus dientes incluso hasta los 75 años con un buen cuidado desde la infancia, es decir, con una higiene correcta y constante. Pero también es imprescindible acudir al dentista por lo menos una vez al año.

“Desafortunadamente son muchas las personas que aún no han tomado conciencia de este asunto”, manifiesta a ECOS el especialista en odontopediatría Milton Arturo Marquiegui, propietario de la Clínica Odontológica Integral Dentopía.

Este profesional trabaja en la Caja de Salud de la Banca Privada y también es miembro activo de la Asociación Latino Americana de Odontopediatría (ALOP), de la Asociación Internacional de la Odontología Pediátrica (IAPD) y es pastpresidente de la Sociedad Boliviana de Odontopediatría.

Marquiegui dice que la gente piensa que el cuidado de la dentición es más una cuestión estética, de mantener una boca sana con todas las piezas dentales posibles, que se traduce exclusivamente en una cuestión de comodidad para la hora de masticar.

No obstante, lo que pasa en la boca trasciende la cavidad oral, porque no es una parte del cuerpo aislada ni ajena a lo que sucede en el resto del organismo. Al contrario, es la puerta de entrada de muchas enfermedades como las cardiacas y pulmonares.

Caries

Marquiegui explica que la caries dental es una enfermedad que se caracteriza por la destrucción de los tejidos duros de los dientes. Se produce a causa de una combinación de factores como la presencia de bacterias en la boca, la ingesta frecuente de carbohidratos (alimentos azucarados) y limpiezas dentales deficientes.

Cuando la caries avanza y afecta al nervio del diente se desarrolla un foco de infección que se convierte en una puerta de entrada al resto del organismo, pues cada diente tiene terminaciones nerviosas y vasos sanguíneos que están conectados al torrente sanguíneo del cuerpo.

El especialista explica que por esa puerta de ingreso todas las bacterias de la caries, de la flora bacteriana y de la boca pueden llegar a los órganos del cuerpo y generar problemas serios como las patologías cardíacas y pulmonares.

Afirma que existe una relación directa entre las bacterias de la boca y las enfermedades cardiovasculares y pulmonares, como la endocarditis bacteriana, la pulmonía y neumonía en el sistema respiratorio.

Cuatro fases

La caries pasa por cuatro fases: En la primera, las bacterias atacan al diente, lo deterioran y dan lugar a pequeñas manchas blancas que luego se convierten en oscuras o negras. Además, la pieza dentaria presenta dolor ante el calor, el frío y los sabores dulces.

En la segunda fase, la caries forma una cavidad o un agujero en el diente. En la tercera fase el daño llega hasta el nervio y los vasos sanguíneos del diente. El dolor aumenta y se complica al comer o dormir.

En la cuarta fase, la dolencia se vuelve insoportable. La estructura del diente tiene un considerable daño, hay presencia de bacterias y gérmenes que provocan una infección que pasa al torrente sanguíneo.

Factores

Marquiegui indica que el tiempo de ese proceso depende de los factores locales y generales de la salud de cada paciente. Por ejemplo, de la edad. En los niños el avance es muy rápido, puede ser en uno o dos años. En cambio en los adultos es más lento, pudiendo tardar hasta cinco años para llegar a un proceso avanzado.

Asimismo, depende de la herencia, del tipo de saliva o de la predisposición a tener caries.

Cuando se tiene infección en los dientes hay presencia de bacterias, se alojan en la garganta superior y pueden obstruir la respiración o afectar a los pulmones provocando una pulmonía bacteriana, bronquitis o pulmonía.

“Para no llegar a esos extremos no se debe descuidar la buena higiene bucal. Los exámenes dentales regulares son la mejor manera de protegerse contra el desarrollo de las caries y de sus complicaciones”, aconseja el especialista.

En la actualidad existen técnicas de prevención, como el sellado de fosas y fisuras, que impiden la formación de caries en los dientes de leche y en los permanentes. ¡No hay pretextos para no tener una buena dentadura! •

Consejos del especialista

Los odontólogos recomiendan dedicar unos minutos al día para el cuidado de los dientes:

- Cepillarse por lo menos dos veces al día, tras las comidas, durante aproximadamente dos minutos.

- Utilizar un cepillo de cerdas suaves, que se adapten a la boca para que llegue a cada superficie del diente.

- Usar a diario hilo dental y visitar al odontólogo por lo menos una vez al año para que realice una limpieza profunda.

- Niños: hacer de los controles una rutina periódica, para que no sientan dolor, para prevenir las caries o tratarlas en su inicio.

Fuente: Dr. Milton Arturo Marquiegui