Club Atlético Concretec, transformando vidas
El Club Atlético Concretec usa al deporte como una herramienta de transformación social de niños y jóvenes en situación vulnerable
Su objetivo es desarrollar talentos porque el porcentaje de jugadores chuquisaqueños que participan en la Liga de Fútbol Profesional Boliviano o en equipos extranjeros, es muy bajo.
Álvaro José Amonzabel Martínez (43 años de edad), licenciado en Contaduría Pública de la Universidad San Francisco Xavier, presidente del Club Atlético Concretec y trabajador de ISSA Concretec desde hace 16 años, explica a ECOS que todo comenzó hace más de diez años cuando la Organización No Gubernamental (ONG) Ñanta, invitó a su hijo para que forme parte del equipo de fútbol de los Niños y Adolescentes Trabajadores de Sucre (NATS).
Hasta 2010, Ñanta apoyó a los NAT’s desde los siete hasta los 18 años de edad que trabajaban como voceadores de micros, lustrabotas, escaleras del cementerio, cargadores de bolsas, vendedores ambulantes y otros.
Les ayudaban en el área pedagógica, psicológica, social, deportiva y con alimentación. Asimismo, les brindaban orientación laboral, oportunidades de capacitación y ayuda para encontrar trabajo. Los equipos de fútbol y futsal solo participaban en campeonatos de barrio.
Sin embargo, Amonzabel cuenta que en 2010 Ñanta dejó el proyecto quedando los NATs a la deriva. Al ver la orfandad en la que quedaron los chicos decidió tomar las riendas y continuar con ese proyecto social.
Club Atlético Concretec
Así se funda el Club Atlético Concretec el 10 de octubre de 2010 con la inquietud de crear espacios para la práctica del deporte. Amonzabel indica que le puso ese nombre como agradecimiento a la empresa donde trabaja.
De a poco, los equipos de fútbol y futsal se consolidaron sobre la base de algunos de los hijos de los trabajadores de la empresa Concretec y otros niños de Sucre.
Al ver el potencial que tenían los chicos, Amonzabel impulsó al equipo para participar en campeonatos y subcampeonatos de las Asociaciones Departamentales de Futsal y Fútbol, consiguiendo buenos resultados. También comenzaron a participar en las divisiones inferiores de 12 y 14 años.
“El Club Atlético Concretec, es una organización no lucrativa e inclusiva que busca formar y potenciar los talentos futbolísticos en Chuquisaca, de la mano de un programa integral como herramienta de trasformación social para alejar a los niños y adolescentes de las malas influencias, como el alcohol, las drogas, las pandillas, y otras lacras de nuestra sociedad”, sostiene el presidente.
La mayoría de los progenitores de esos niños y adolescentes viven y trabajan en el campo, otros no tienen a uno de sus papás y los menos son huérfanos.
Escuela de fútbol
Hace cinco años también se creó la escuela de fútbol Club Atlético Concretec a donde acuden chicos con y sin recursos económicos. Los que tienen carencias reciben becas completas, material deportivo, seguro médico y ayuda psicológica.
El resto de los muchachos pagan una mensualidad que se destina para el alquiler de escenarios deportivos, cuerpo técnico y gastos de logística.
“El propósito del club es formar niños y jóvenes para desarrollar talentos con espíritu triunfador, ya que hay un bajo porcentaje de jugadores chuquisaqueños participando en la Liga Profesional de Fútbol Boliviano, y más aún en equipos extranjeros”, explica Amonzabel.
También trabajan en otras áreas de sus vidas: emocional, social, educativa, inculcando valores como la disciplina, constancia, lealtad, trabajo en equipo, solidaridad y buenos hábitos.
Logros
Después de una década de trabajo el Club Atlético Concretec adquirió prestigio y se posicionó en el ámbito futbolístico a nivel departamental, nacional e internacional.
“Tenemos nuevas divisiones que van desde la sub 7, hasta la sub 19, primera de ascenso en la disciplina del fútbol. En fútbol de salón también tenemos desde la sub 8 hasta la segunda división, incluyendo un equipo de mujeres en fútbol sala en la división Primera. Ahora tenemos registrados a más de 130 niños, adolescentes y jóvenes”, comenta Amonzabel.
Los niños entrenan en diferentes categorías dependiendo de su edad, bajo la dirección técnica del profesor Adalit Sanabria, destacado profesional con una amplia trayectoria futbolística y Juan Carlos Fuentes encargado de deportes.
Su metodología de trabajo está dividida en áreas del futbol como el trabajo de equipo en cancha, preparación física, apoyo psicológico y motivacional.
“Más que una escuela de formación y competición futbolística somos una gran familia. La familia que en muchos casos no tienen debido a situaciones difíciles que cada uno vive en su casa”.
Debilidades
Como siempre los recursos económicos son una limitante para seguir creciendo, a esto se suma la falta de escenarios deportivos en la ciudad que son escasos.
“Para esta gestión esperamos concretar el apoyo efectivo de las empresas chuquisaqueñas. Queremos que se sientan comprometidas con el desarrollo humano de este departamento que son los jóvenes y niños”, finaliza el presidente del club.