Manchas en rostro y manos
Las manchas del rostro y las manos generalmente aparecen a partir de los 30 años, pero en nuestro medio surgen desde los 20 por efectos del sol, la altura y la radiación ultravioleta.
Las manchas del rostro y las manos generalmente aparecen a partir de los 30 años, pero en nuestro medio surgen desde los 20 por efectos del sol, la altura y la radiación ultravioleta. Esos factores determinantes se pueden prevenir para evitar las desagradables manchas.
La dermatóloga Carla Flores explica que la palabra mancha es un término muy restringido para una patología que puede surgir por distintas causas en la cara o las manos.
El melasma en el rostro es la afección más frecuente y la de mayor consulta hiperpigmentación post inflamatoria, también están los lentigos y las pecas. Las manchas en las manos son lentigos o pecas y aparecen por el impacto del sol en la piel.
Independientemente de las causas mencionadas, la principal es la radiación ultravioleta, no solo de tipo UV o UVA, también influye el infrarrojo, la luz visible y la luz azul de los dispositivos que inducen la despigmentación.
Prevención
Flores afirma que la mejor manera de prevenir la aparición de manchas es cuidarse del sol, evitando la exposición directa, especialmente en horarios pico, entre las 10:00 y 16:00.
“La gente tiene que restringir la exposición al sol. En el caso de exposición tiene que utilizar protector solar, aplicarse 20 minutos antes de exponerse y renovar cada tres horas, durante todo el día. También hay que usar el bloqueo físico caminando por la sombra, usar sombrero, gafas y ropa cubierta de color oscuro.
El blanco y los colores claros son los que más permiten el paso de la radiación. En el mercado hay prendas con protección solar: sombreros, camisetas o mallas, muy útiles para nadadores y deportistas con actividades al aire libre.
Según Flores, la desaparición de las manchas depende mucho de qué tipo es. Por eso es importante que un profesional del área realice una evaluación sobre la predisposición genética de cada paciente.
“Los bolivianos nos defendemos racialmente de la altura y del sol pigmentando la piel y manchando con mayor facilidad, pero también influyen la aplicación de sustancias de origen natural, medicación de venta libre o cremas de uso profesional accesibles para los pacientes pero que, al darle un mal uso, empeoran las manchas en vez de mejorarlas”, comenta.
Sinónimo de enfermedad
Además, la mancha al ser de cualquier índole, expresa enfermedad de la piel. En algunos casos solo compromete la piel, pero en otros puede haber asociación hormonal como hipotiroidismo, síndrome de ovario poliquístico, asociación con otras patologías, como rosácea o melasma: entonces implica un manejo multidisciplinario.
Las hormonas tienen que estar estables dice Flores. Cuando pasan los años el envejecimiento también agrega manchas, que pueden ser pecas, lentigos, queratosis actínicas y seborreicas, deteriorando más la piel.
La experta dice que también hay que tomar en cuenta la medicación que consumen los que se polimedican. Hay manchas que pueden ser inducidas por medicación como el losartán, la amiodarona, ivermectina e hidroxiclororquina.
Para evitar las manchas en el rostro y manos no hay que ponerse productos inadecuadas naturales, como aloe vera, aspirina, naranja, limón y bicarbonato.
Si el pigmento es profundo, la expectativa de quitar la mancha es baja, pero si es superficial el pronóstico es bueno. Es importante acudir a un especialista y no así a los aficionados, porque son tratamientos largos, indica •
Su perfil
Carla Flores hizo tres años de especialización en Dermatología en el Hospital de Clínicas José de San Martín y un posgrado en la ciudad de Buenos Aires. Asimismo, tiene subespecialidad de un año en cirugía dermatológica avalada por la Sociedad Argentina de Dermatología y la Escuela Médica Argentina.Tiene 12 años de experiencia profesional, los primeros seis los cumplió de forma paralela en la Universidad de Buenos Aires y en Bolivia. Desde hace seis años trabaja en Sucre, aportando todos los conocimientos que adquirió en el extranjero.