María, Virgen y madre
En el mes dedicado a la Santísima Virgen María y a la Madre boliviana, la Casa Nacional de Moneda presenta imágenes Marianas de su acervo patrimonial, que llevan elementos decorativos labrados con la plata del majestuoso Cerro Rico de Potosí
En el mes dedicado a la Santísima Virgen María y a la Madre boliviana, la Casa Nacional de Moneda presenta imágenes Marianas de su acervo patrimonial, que llevan elementos decorativos labrados con la plata del majestuoso Cerro Rico de Potosí, plata que fue transformada en objetos de uso personal, doméstico, litúrgico, ceremonial, por hábiles artesanos indígenas, africanos, mestizos, criollos y españoles, los que contribuyeron al florecimiento del gremio de PLATEROS en la Villa Imperial y en poblados cercanos, como Caiza D, heredando esa tradición de trabajo artesanal hasta hoy en día.
1.- LA INMACULADA CONCEPCIÓN, Esta advocación de la Virgen María se desarrolla gracias al dogma de ser concebida sin pecado original. Se la debía representar con doce o trece años de edad y vestida con túnica blanca y manto azul, llevando una corona sobre la cabeza, aureolada por doce estrellas.
2.- LA VIRGEN Y EL NIÑO, Imagen que representa a María como madre protectora, en su multiplicidad de nombres y advocaciones que con el descubrimiento se entroniza sobre el territorio americano en la Conquista.
“El manto puede vincularse a la cualidad protectora de la Virgen, condición maternal que acoge bajo ella y sin distinción entre sus hijos, protección que refuerza su cualidad intercesora, atributo potenciado en el periodo colonial por las problemáticas identitarias contenidas en una sociedad mestiza en construcción”.
3.- LA VIRGEN DE LOS DOLORES, Imagen de María orante y contemplativa representa el sentimiento de dolor de Madre, a lo largo de toda una vida, ante el sufrimiento de su hijo, Jesús •