Sátira política

¿Qué es el cómic o historieta? Pablo de Santis lo define así: es el único género capaz de aglutinar sobre una hoja de papel todas las tendencias de su tiempo y de convertir mensajes en una estética que posee matices distintos a los de otros géneros como el cine, la literatura, la televisión. 

Sátira política

Sátira política

Sátira política

Sátira política Foto: Cristóbal Corso Cruz

Sátira política

Sátira política

Sátira política

Sátira política

Sátira política

Sátira política


    Cristóbal Corso Cruz
    Ecos / 22/08/2022 00:38

    ¿Qué es el cómic o historieta? Pablo de Santis lo define así: es el único género capaz de aglutinar sobre una hoja de papel todas las tendencias de su tiempo y de convertir mensajes en una estética que posee matices distintos a los de otros géneros como el cine, la literatura, la televisión. 

    Cuando apareció la historieta, resultó ser una expresión nueva de la humanidad. Hoy se ha convertido en una categoría comunicacional potencializada por los medios escritos. La historieta tiene doble recurso, el del gráfico representativo más el diálogo en su pequeño contexto, dirigida expresamente al carácter lúdico que puede tener un sentido irónico, respecto a la vida y los derechos humanos. Los formatos de presentación varían: el más conocido de todos es la tira cómica, que se publica en los periódicos y revistas. Consiste en una secuencia de viñetas colocadas horizontalmente. La macro viñeta es una historieta que desarrolla todo su argumento en un solo cuadro. En Bolivia nunca hubo una escuela, menos motivación para inducir a los dibujantes, cronistas y argumentistas a la cultura de la historieta como medio de expresión y como recurso de vida. Artistas del dibujo, siempre han existido ¿Qué falló para que en Bolivia no se hubiera cultivado el arte de la historieta? Tal vez se reduzca a la falta del visionario, —maestro o promotor editorial— capaz de correr esos riesgos de esa aventura. Pero en el pasado, en Bolivia se proyectó y publicó revistas en tiempos difíciles que vivió el país. Luego de la hecatombe política del año 1964, la galopante corrupción, la chacota ideológica de los politiqueros que perdura hasta el presente. El interés y la acuciosidad de interesados en la historieta en Bolivia logró recolectar, coleccionar y archivar muchas revistas dibujadas por artistas bolivianos de bastante calidad, ingenio, creatividad y crítica a los diferentes regímenes gubernamentales del pasado mediato.

    Los “únicos ejemplares de colección” serían: la revista “EL MOSQUITO”, editada en Oruro, agosto de 1959, la única revista humorística dirigida por Sacarías Roncha.  En el país, a partir del año 1961, un grupo de caricaturistas editaron la revista “CASCABEL”, la mejor revista de humor político. Mediante este órgano ilustrado, los célebres dibujantes de la realidad boliviana combatieron a los fascistas del gobierno de turno, y a la intromisión imperialista, pero en el año 1970; a causa de un gobierno militar golpista, fueron derrotados y salieron al destierro para nunca volver. A partir de esa década, Bolivia, desangrada, vivió tiempos de venganza, golpes de Estado, intolerancia y persecuciones; luego de cincuenta años, al parecer se repite, se vuelve a vivir lo mismo.

    A partir del año 1972, se publicó otras revistas: se tiene “TACA TACA”, de humorismo criollo, en La Paz; director: Lalo Flores. En 1976 se publicó la revista “THAMPULLI” del humor criollo, en La Paz, dirigida por Robert Condori y Lalo Flores.  En la ciudad de Santa Cruz se publicó la revista “TILUCHI” del humor nacional, en 1982.

    Otra revista en febrero de 1983, La Paz, “EL PEPINO”, dirigida por Jorge Villanueva Suárez. En 1987, en Oruro, se publicó la revista “DIABLURAS”, supay humorística, dirigida por Santiago Benito R. En 1989, en La Paz se publicó la revista ”EL MOSCARDÓN” de humor criollo, dirigida por Wálter León quien años antes publicó la revista de humor con un personaje típico de Chuquisaca (un indiecito tarabuqueño), “ULINCHITO”, que lastimosamente dejó de publicarse.

     Desde la década del “80”, tibiamente Bolivia respiró la ansiada democracia, relativamente vuelta la libertad de expresión, tiempos en los cuales se publicó algunas revistas: El caricaturista Julio Arce Gutiérrez volvió a la palestra y fue apresado a causa de sus “Viñetas” de sátira al gobierno en el periódico “Presencia” y la revista Cascabel. El artista salió libre gracias a la “amnistía general e irrestricta para todos los presos políticos”. 

    En la capital, Sucre, en 1989-1990 se publicó un libro titulado: “BOLIVIA DEL HUMOR. CARICATURAS POR RENNY (René Zárate), el mejor caricaturista del periódico “Prensa Libre”. 

    En 1982, una nueva generación de artistas dibujantes de historietas empieza a publicar la revista “CASCABEL” NUEVA ÉPOCA del humor político, director: Raúl Gil Valdéz. Publicaciones que perduraron hasta el año 1986. 

    Los artistas dibujantes que pusieron su arte fueron Juan Alfaro Ramírez (Juancho), Lalo Flores, Roque, Plumín, Villas. Lastimosamente, la devaluación monetaria que soportó Bolivia impidió el proyecto de editar más revistas. Se publicó libros donde aparecieron dibujos excelentes caricaturistas, EL CHISTE ES REUNIRSE II, Cochabamba año 2002. En la misma ciudad se publicó la revista AMOR CON AMOR SE PAGA, año 2016; argumentos de Gonzalo Montero Lara y las excelentes caricaturas de Ramiro Ortega. 

    En el año 2012 se publicó la ANTOLOGÍA PARA RISA, del caricaturista Iván Peñaranda, editado por el periódico Correo del Sur.

    Cuando se transita desde la primera década de este siglo, la añorada REPÚBLICA DE BOLIVIA, en el presente se cambió el nombre, hoy es un ESTADO PLURICULTURAL TOTALITARIO. Durante el último tiempo, todas las revistas mencionadas lastimosamente desaparecieron o simplemente ya no se publican más. Las “viñetas” de todos los periódicos fueron anuladas, los periódicos del interior del país dejaron de incluir viñetas, páginas de caricaturas y tiras cómicas. Tan solo sobrevive el Suplemento “LA GRAN SIETE”, mucho humor, editado por los periódicos Correo del Sur y El Potosí. Hábilmente ilustrado por el talentoso Iván Peñaranda Pérez.

    Si las desconfianzas son tan grandes en la prensa oral y escrita, posiblemente resultan ser mayores en las opiniones e interpretaciones en las caricaturas inscritas en viñetas y tiras cómicas. Este arte de las caricaturas es simplemente el reflejo de la opinión expresada mediante líneas e imágenes. La razón de la no circulación de revistas en Bolivia es la censura, como en el pasado, antes que vuelva la democracia. 

    Es necesario recalcar que un dibujo es la expresión del sentimiento de un artista, convertida en imagen •

    (*) Cristóbal Corso Cruz es Presidente de la Sociedad Geográfica y de historia “Potosí”

    Etiquetas:
  • Sátira política
  • Compartir:

    También le puede interesar


    Lo más leido

    1
    2
    3
    4
    5
    1
    2
    3
    4
    5
    Suplementos


      ECOS


      Péndulo Político


      Mi Doctor