“Sueños Conscientes”
El músico y cantautor chuquisaqueño Hernán Laguna presentará su nuevo disco, “Sueños Conscientes”, una producción en la que participaron nada menos que dos músicos de Gustavo Cerati en su etapa de solista: Fernando Nalé y Hernán de Micheli. ¡Un lujo total!
El músico y cantautor chuquisaqueño Hernán Laguna presentará su nuevo disco, “Sueños Conscientes”, una producción en la que participaron nada menos que dos músicos de Gustavo Cerati en su etapa de solista: Fernando Nalé y Hernán de Micheli. ¡Un lujo total!
El disco se grabó intermitentemente en Buenos Aires, Argentina, y Sucre, entre noviembre de 2019 y marzo de 2022. Será presentado en marzo y cuenta con el apoyo de la Universidad Domingo Sabio.
El disco tiene ocho canciones, todas cantadas. Es una obra bastante “ceratiana” por todo el contexto, el sonido, el estudio de grabación y los músicos.
“Me siento bien, estoy contento. Es un privilegio, es un sueño no soñado, porque jamás había imaginado tocar con los músicos de Cerati”, manifiesta emocionado Hernán.
Premonitorio
Relata que, pese a que pasaron seis años desde el inicio del proyecto hasta su conclusión, todo fue muy premonitorio.
Cuando en 2012 grababa el disco “Litio” los músicos con los que trabajaba andaban muy ocupados haciendo otras cosas con diferentes grupos, la falta de puntualidad molestó a Hernán pues le afectaba en el estudio de grabación y económicamente.
Un día, alguien con un poco de sarcasmo negro le dijo que sería bueno que buscara a los músicos de Cerati ya que él estaba enfermo y seguramente estarían libres.
Hernán ni corto ni perezoso tomó contacto después de seis meses con Fernando Nalé, considerado como uno de los mejores bajistas de la Argentina.
“Vi que estaba dando clases, lo contacté, me dijo ‘mándame música’ y de inmediato me pidió hacer el disco. Me preparé, tenía que estar en Argentina a finales de septiembre de 2014 pero Cerati murió el 4 de ese mes y los planes cambiaron”, relata Hernán.
Posteriormente, gracias a Nalé se contactó con Martín Carrizo, baterista del disco “Bocanada” de Cerati y productor del Indio Solari, un gran músico argentino que falleció en 2022 a causa de una esclerosis múltiple que inició en 2016, año en el que Hernán tenía que ir a la Argentina; empero, un hecho familiar frenó su viaje: su hermana enfermó y en 2017 falleció, todo ese tiempo estuvo apoyándola.
“Al final no me quedaron las ganas ni la economía como para poder retomar la idea”, comenta a ECOS Hernán.
En 2019 nuevamente habló con Nalé ya que se habían reproducido varias canciones y, ante la imposibilidad de que Martín Carrizo participe, convocó para trabajar al reconocido músico chuquisaqueño Carlos Zegarra, fan incondicional de Carrizo.
Emprendieron el trabajo. Nalé debió arribar a Sucre en abril de 2020, pero llegó la pandemia y el encierro comenzó en marzo. Contra todo pronóstico, lo que parecía ser en contra resultó ser favorable, pues le permitió a Nalé dedicarse al trabajo de producción en Argentina.
Cuando pasó el periodo de cuarentena estricta, Hernán pudo salir y grabar en un estudio las voces y guitarras para completar lo que faltaba, hasta que en marzo de 2022 le mandaron todo el trabajo completo.
Tomó el resto del año para meditar, trabajar en el diseño gráfico y otros detalles de pre producción del nuevo trabajo, en base a lo que ya había, para ver hasta dónde podía rediseñar su trabajo.
“Me tomó seis años, tenía todo a favor y a la vez todo en contra: eso me impedía avanzar. Estoy contento por cómo suena el disco, es algo a lo que nunca tuve acceso en Bolivia, pues me encaminaron a un mundo con sonido ‘ceratiano’ que me encanta”, expresa complacido.
Hernán busca con una nueva producción ir por rutas desconocidas, buscar sonidos diferentes con otras guitarras, encontrar el sonido y arreglo perfecto para una canción y eso le toma mucho tiempo cuando él es productor.
En este último disco, Nalé fue el productor ejecutivo musical y Hernán solo se preocupó de dar las canciones y hacer lo que ellos le decían que haga. Sostiene que es un relax que le permite expandir su idea de la música.
También participaron los músicos Diego Laguna, guitarra; Poche Ponce, bajo; Oaky, batería; Marcelo Murillo, percusiones; Miguel Chávez, charangos; Karina Noya, armónica; Sergio Salazar, guitarra; Martín Seguel, saxofón.
“Esta vez el enfoque es diferente, está pensado para una ciudad grande, cosmopolita. En mi búsqueda siempre miré al pasado, al rock progresivo; en cambio este disco tiene otra dinámica, no se puede decir que es puramente pop pero si coqueta y le hace guiños absolutos en cuanto a audio y lírica al pop”. “Es un pop rock”, expresa.
Ya se pasaron ciertas canciones en algunas radios, como “Fábula”, “Sin piel” y “Cerca de ti”. Fábula llegó a ser número uno, está sonando en diferentes lugares. Hernán recibió buenos comentarios, incluso desde otros países.
Pasión por el rock y la química
Desde pequeño, Hernán tuvo mucha afición por la química y alquimia, de la que dice tiene algo trascendental y oculto, quizá por influencia de su padre que fue profesor de química y biología, además de ser policía.
Una vez bachiller, decidió estudiar ingeniería química, desatándose en él una pasión por esta ciencia casi similar a la música.
Reconoce que su profesión le sirvió más adelante para financiar su carrera de músico, todos sus discos son de producción independiente, nunca recibió apoyo de las autoridades, de las que dice deberían respaldar al arte en general. Lo que sí pondera el músico es el respaldo familiar que siempre estuvo ahí.
Su familia paterna siempre tuvo una vena artística musical: su padre fue un gran tenor, estudió con Hoffman y fue amigo íntimo de Carlos Loayza.
Hernán creció muy cercano a la ópera; por eso, su progenitor entendió que su hijo llevaba el arte en la sangre y le aconsejó ir por esa ruta, pero con un buen respaldo económico a través de una profesión.
¿Cuándo se conectó con el rock?
Hernán sintió una fuerte conexión con el rock de niño cuando empezó a ver la serie animada The Beatles que mostraba sus aventuras, desventuras y la música de la icónica banda de rock británico. Le encantó. Luego conectó con Queen, Pink Floyd y el rock progresivo con el que quedó atrapado y no le suelta hasta ahora.
Este año, Hernán cumple 33 años de carrera musical. Comenzó con Viuda Negra en 1990, La Logia entre 1998 y 1999 con Juan Calderón, El Silencio entre 2001 y 2002 y de ahí hasta ahora trabaja como solista.
Tuvo una carrera bastante lineal. Recuerda que en los años 90 el rock boliviano tuvo un boom. En esa coyuntura, la banda Viuda Negra llenaba la plaza de La Recoleta, así como el estadio Sucre, con sus conciertos pagados.
“Ese ha sido un momento de popularidad y fama con el que no me llevé muy bien, no era para mí. Me sentía un poco agobiado ya que la gente me prestaba más atención de lo normal. También tuve mis 15 minutos de fama con el premio Eduardo Abaroa, no me gustó porque no podía salir ni estar tranquilo”, relata.
Dice que la verdadera fama no le sentaría bien, por eso evita publicar fotos en sus discos y hace pocos videos donde esté actuando. No le interesa la popularidad, lo que le interesa es realizar su obra, nada más.
Tiene cuatro discos grabados con bandas: dos con Viuda Negra, uno con La Logia y otro con El Silencio. Como solista grabó otros cuatro: “Laberinto”, “Rupestre”, “Litio” y “Sueños Conscientes”.
También escribió el libro “50 años de rock en Sucre, de 1966 a 1993”, para comprender la identidad del rock chuquisaqueño en más de tres décadas de historia musical.
Hernán es el padre orgulloso de Diego Laguna Paravicini del que dice ha llegado mucho más lejos que él con el canto y la guitarra y también compone sus temas. Le encantaría producir un disco para su hijo, para Miguel Serrano, para la banda Arcadia y para los que quieran.
“El rock siempre está vigente, cuando doy conciertos la gente acude. Siempre hay espacio para el rock”, concluye •
Créditos del disco “Sueños Conscientes”
Hernán Laguna: Voz, guitarras
Fernando Nalé: Bajo, guitarras, teclados y coros
Carlos Zegada: Batería
Hernán de Micheli: Guitarras, teclados y coros
Carla Casanovas y Judith Sivila: Coros
Cristian Flores: Fotografía
Nicole Rivas: Diseño Gráfico