Los hechos del 10 de Noviembre

Al conmemorar los CCXIII años de la Gesta Libertaria de Potosí del 10 de Noviembre de 1810, los potosinos nos preguntamos ¿cuál fue la trascendencia histórica del Grito Libertario del 10 de Noviembre de 1810?

Alegoría al 10 de Noviembre. Cuadro de la Casa de Moneda.

Alegoría al 10 de Noviembre. Cuadro de la Casa de Moneda. Foto: El Potosí

Placa en la plaza 10 de Noviembre.

Placa en la plaza 10 de Noviembre. Foto: El Potosí

Parte de los Anales inéditos de Potosí en los que se hace referencia a Belgrano.

Parte de los Anales inéditos de Potosí en los que se hace referencia a Belgrano. Foto: El Potosí


    Gody Gualberto Hochkofler Sánchez
    Ecos / 14/11/2023 11:59

    Al conmemorar los CCXIII años de la Gesta Libertaria de Potosí del 10 de Noviembre de 1810, los potosinos nos preguntamos ¿cuál fue la trascendencia histórica del Grito Libertario del 10 de Noviembre de 1810?, ¿cuáles fueron los hitos libertarios en el territorio potosino que permitieron forjar la independencia y la formación de Bolivia? ¿Potosí continuará encarnando a Bolivia y constituyendo el epicentro de su integridad, estabilidad y desarrollo de la Patria? Hoy contribuiremos al esclarecimiento de esas interrogantes como aporte a la autoestima y actitud patriótica de los potosinos.

    Los hechos

    El historiador potosino Edgar Armando Valda Martínez, sostiene que muy poco se ha estudiado sobre los acontecimientos del 10 de noviembre de 1810, entre ellos Lucas Jaimes o Brocha Gorda contenidos en su libro “La Villa Imperial de Potosí”: “Con todo, en la madrugada del 10 de Noviembre de 1810, se condensaron las opiniones diversas y se resolvió jugar el todo por el todo, sin que pudiera ya evitarlo el Gobernador don Francisco de Paula Sanz (…) Acudieron los conjurados á la plaza por diferentes rumbos, mientras funcionaba el Cabildo justamente ya alarmado con los anuncios y los claros síntomas del alzamiento (…) Un joven tan patriota como audaz y decidido, se presentó en persona en pleno cabildo y tomó preso en medio del estupor general, al Gobernador y lo condujo luego á la carcel pública ya ocupada por los revolucionarios. Ese joven patriota fué don Manuel Molina que después figuró en la Junta de Gobierno (…) “Luego se echaron á vuelo las campanas y se convocó al pueblo para el gran comicio y después de aclamar éste con verdadero frenesí la conveniencia de la independencia de aquellas provincias del dominio español, se procedió á nombrar la Junta de Gobierno, compuesta de los señores don Joaquín de la Quintana, Gobernador interino y presidente del Cabildo y los iniciadores del movimiento don Salvador Matos, don Pedro A. Ascárate, don Eustaquio Eguibar, don Alejo Nogales, don Mariano Nogales, los hermanos Millares, el ya citado don Manuel Molina, don Mariano Subieta, don Melchor Daza, don Diego Barrenechea, don Pedro Crotas, don Mariano Toro y don Manuel Orosco y Bulucua (…) Los patriotas tomaron los cuarteles y la artillería, todas las armas y los tesoros reales y la revolución quedó consumada, porque la aproximación del ejército argentino vencedor en Suipacha, á las órdenes de Castelli á la sazón delegado de la Junta de Gobierno de Buenos Aires, ahogó en absoluto toda idea de reacción en los elementos conservadores”.

    El orden de la revolución

    Conocida la derrota de Sipe Sipe, los jefes revolucionarios Pueyrredón, Quintana, Nogales, Barrenechea, Ascárate, Ferreira y otros, acordaron después de serias discusiones y en consejo secreto, divulgar la noticia falsa del vencimiento de los patriotas. Dichos jefes revolucionarios, deciden irse de Potosí. Pueyrredón se irá no sin antes hacer sacar 800 mil pesos en efectivo que fueron transportados en 400 mulas. Era el 24 de agosto de 1810. Al día siguiente, el domingo 25, se nombró en Cabildo Abierto y por aclamación general como gobernador interino al Tesorero de la Real Caja, Miguel Lamberto de Sierra, quien ordenó que buscaran y saquearon las casas de los sospechosos revolucionarios. Sierra acusó a Salvador Matos le acusó de haber encontrado en esos sucesos y dentro de sus bienes “un sello fabricado por Millares en que decía VIVA LA PATRIA, VIVA LA LIBERTAD I LA INDEPENDENCIA”. Este hallazgo tuvo como alcance el autogobierno y la necesidad de independencia.

    El día jueves 30 de julio de 1812 dieron muerte a Matos y Millares. La revolución iniciada el 10 de noviembre de 1810 duró 9 meses.

    Los investigadores, cuya publicación fue realizada por la Consultora Productora Expansión Global: Turística Social y Cultural el año 2011, sostienen que los sectores sociales que participaron el 10 de noviembre de 1810, además de los patriotas señalados mestizo-criollos, fueron “campesinos de los alrededores, gente de los centros mineros y trabajadores de Cantumarca. Era impresionante la masa humana que bajaba desde el Cerro Rico, conformada por mayordomos, barreteros, mitayos, chivatos, kumuris y palliris (…) Ese día, la población de la Villa: blancos, mestizos e indígenas congregados en la plaza principal”. 

    Potosí, epicentro de la bolivianidad

    La descripción de lo que fue la lucha revolucionaria por la libertad anticolonial y por la construcción de un Estado Independiente tuvo como epicentro Potosí porque fue el corazón de la economía de la colonia con su portentoso Cerro Rico y su riqueza minera extraída que sangraba al mismo tiempo por la explotación de los mitayos. La colonia era allí más evidente y extrema; por tanto, en Potosí la libertad e independencia tenía un significado mayor. Con la libertad de Potosí nacía Bolivia, no podían existir el uno sin el otro, y así, hasta ahora, su corazón no puede estar separado de su corporeidad y si dejase de latir su integridad se vería afectada. No solo en referencia a su economía, Potosí como epicentro irradió la bolivianidad e integridad del Estado.

    Sus raíces históricas y potencialidades, nutren a Bolivia. Hoy y en el futuro continuará constituyendo el epicentro de la economía, la integridad y el desarrollo de Bolivia. Sus cuadros de ciudadanos actuales y futuros heredan esta misión irrenunciable, lo contrario es remar contra la bolivianidad e integridad nacional.

    Conclusiones 

    Las respuestas a las interrogantes iniciales se traducen en las siguientes conclusiones:

    1. Revoluciones para el autogobierno: Las revoluciones del 16 de julio de 1809 en La Paz y la del 10 de noviembre de 1810 fueron auténticas revoluciones que lograron su autogobierno y propusieron la independencia, mientras que la del 25 de mayo de 1809 no pasó de un alineamiento de los oidores a los propósitos de adhesión a Fernando II, el Rey de España.

    2. Autoridades propias: El Cabildo de Potosí, como autogobierno tuvo sus propias autoridades que eran los revolucionarios. No sólo legislaron sino también administraron el poder durante nueve meses como ningún otro Cabildo, constituyendo la más clara y auténtica revolución que propuso la libertad anticolonial y la independencia de un nuevo Estado. 

    3. Hitos libertarios: El inicio del proceso con Chaqui Catari; la Revolución del 10 de Noviembre de 1810 que proclama la Patria, la Libertad y la Independencia y la Batalla de Tumusla (1º de abril de 1825) que define la Independencia del Alto Perú hoy Bolivia y posibilita la fundación de la República de Bolívar, hoy Bolivia (6 de agosto de 1825). Es decir, en Potosí se inició y concluyó la gesta libertaria, y se forjó Bolivia como un Estado independiente y soberano.

    4. Potosí, corazón de Bolivia: Bolivia y Potosí siempre estarán juntos, corazón/corporeidad. El uno no puede existir sin el otro. Potosí le dota y llena de contenido a Bolivia como su epicentro histórico, presente y futuro •

    * Gualberto Hochkofler es exconcejal de Potosí y ex viceministro de política minera.

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