Santiago Apóstol y las piedras de Santiago
En el calendario litúrgico, cada 25 de julio se recuerda a Santiago el Mayor; apóstol de Jesucristo y cuya imagen llega al nuevo mundo en el estandarte que portaba el mismísimo Cristóbal Colon.
En el calendario litúrgico, cada 25 de julio se recuerda a Santiago el Mayor; apóstol de Jesucristo y cuya imagen llega al nuevo mundo en el estandarte que portaba el mismísimo Cristóbal Colon. Durante la época colonial y los procesos de sincretismo cultural, Santiago Apóstol es asociado al Dios andino Illapa. Según Polo de Ondegardo (1906) después de Viracocha y del Sol, la tercera wak’a de mayor veneración era el trueno, que era conocido por varios nombres como: Chuquilla, Catuilla, o illapa. Dentro la mitología andina, este dios se asemeja a un hombre que habita en los cielos sosteniendo una porra y una onda en las manos, teniendo la potestad de hacer llover, granizar, enviar relámpagos y todos aquellos fenómenos relacionados al tiempo. De igual manera, el jesuita Martin de Murúa menciona que “en el templo dicho Curi Cancha estaban las estatuas…del trueno y del relámpago, que todos estos reverenciaban como cosa temerosa y espantable, y que les podía hacer daño” (1590, p.126).
La asociación del Apóstol Santiago con Illapa se remonta a la conquista española del imperio inca, en la que el ensordecedor ruido provocado por los cascos de los caballos, el fulgor de las espadas toledanas y los mosquetes de los soldados españoles son asociados con el dios andino Illapa. Sin olvidar que en 1536, en medio de una terrible tormenta, los españoles logran derrotar al ejercito inca liderado por Manco Inca en la denominada batalla de Sacsahuaman o Sacsayhuamán (Cuzco). Según Guamán Poma de Ayala (1936), el Tata Santiago habría descendido desde los cielos en medio de truenos y un rayo que cayó directamente en el campo de batalla. Al ver caer este rayo, los indios se espantaron mencionando que había caído el dios andino Illapa.
Piedras con energía vital
Desde una concepción animista, las culturas andinas consideran que los elementos presentes en la naturaleza y el universo están dotados de vida, por lo que los cerros y aun una simple piedra poseen una energía vital con la que se puede interactuar. De ahí que muchos cerros en la región andina de Bolivia sean considerados como entes sagrados o wak’as. De igual manera, Arriaga (1626) menciona que era común que cada familia tuviera piedras labradas en forma de animales o productos agrícolas denominados como Conopas e Illas, y agrega que estas piedras protegían a toda la familia, además de motivar la buena producción agrícola y ganadera. Muchos de estos ídolos fueron destruidos y su tenencia prohibida durante la época colonial. Quizás esto motivó a que muchas piedras fueran identificadas con imágenes de vírgenes o santos del mundo católico.
Según los médicos tradicionales de Cahuayo —localidad ubicada en el límite interdepartamental entre Oruro y Potosí, considerada cuna de la medicina tradicional—, las personas comúnmente encuentran piedras de forma irregular al caminar por los cerros o cuando estas emiten algún fulgor al interior del rio. En algunos casos, las piedras llaman mediante susurros a las personas e incluso llegan a moverse, motivando que las recojan y lleven a casa. Sin embargo, para conocer con qué Santo o Virgen están identificadas esas piedras, es necesario llevarlas ante un especialista ritual (yatiri), quien después de un análisis y entrar en contacto con las energías de la piedra es capaz de asociarla con el Tata Santiago, San Gerónimo o alguna advocación de la Virgen María, etc. Estas piedras son pintadas con la imagen de la Virgen o Santo al que representan, para ser atesoradas y veneradas por sus poseedores. Muchos de los cahuayeños consideran haber sido elegidos por el dios de las tempestades, razón por la cual atesoran piedras de rayo y veneran al Tata Santiago.
Fiesta de Santiago en Puna
Cada 24 de julio, en diversas regiones del departamento de Potosí como Santiago de Cotagaita, Santiago de Chaqui, Santiago “K” (provincia Nor Lípez), Bumburi, etc. se realizan fastuosas celebraciones en honor a Santiago. En la comunidad de Miculpaya, perteneciente a la provincia José María Linares del departamento de Potosí, se realiza una colorida y ferviente celebración. Según la tradición oral, hace muchos años un hombre habría encontrado una singular piedra redonda y negra en inmediaciones del rio, llevándosela después a su casa. Sin embargo, esta persona llegó a contraer una enfermedad desconocida y, al consultar con un yatiri, este observó en las hojas de coca que el malestar del señor se debía a algo extraño que tenía en su casa. El señor decidió comentarle sobre su hallazgo y, al día siguiente, le entregó la piedra al médico ritualista quien, al limpiar la esfera con un poco de agua, descubrió la imagen del Tata Santiago. (entrevista al señor Russo Chacón). Este singular suceso y los milagros que son atribuidos a esta piedra motivaron la construcción de la iglesia y acrecienta la devoción de los pobladores a esta imagen.
Cada 25 julio, en horarios de la mañana, el grueso de la población de Miculpaya se congrega en la iglesia; varios de los asistentes llevan pequeños retablos de madera decorada en cuyo interior se encuentran piedras redondas con la imagen de Santiago matamoros; es decir, montado a caballo. Pasado el servicio litúrgico, se festeja al ritmo de la danza de los jailliris en la que los hombres interpretan los ayarachis (especie de flautas de pan elaborados de cañahueca) y las cajas (bombos). Algo que debe destacarse es la colorida vestimenta que llevan hombres y mujeres. Por ejemplo, el sombrero de los hombres se encuentra ataviado con plumas de suris (avestruz andino), mientras que las mujeres lucen sus antiguos tupus (prendedores) de plata. La danza de los jailliris es de carácter solemne y de movimientos ondulantes que acompañan a la música ceremonial del Ayarachi •
Bibliografía
Guamán, Poma de Ayala, Felipe (1936 -1992) El primer Crónica y Buen Gobierno. México: Siglo XXI.
Polo de Ondegardo, Juan (1906) Tratado y averiguación sobre los errores y supersticiones de los indios (1559). Revista Histórica. Órgano del Instituto Histórico del Perú. Dirigida por Carlos Alberto Romero. Volumen (tomo origen) 1, Lima, 1906, páginas 192-203.
Murúa, Fray Martín de (1590 - 1962). Historia del Origen y Genealogía Real de los Reyes Incas del Perú. Madrid/España.
* Marco Antonio Flores es vicepresidente de la Sociedad de Investigación Histórica de Potosí (SIHP).