Distinguen a niñas líderes; aún no hay plan integral
Ayer se reconoció a 28 niñas, pero el Observatorio de Derechos reclama políticas públicas

Ana Clara Flores fue una de las niñas distinguidas ayer como parte de los actos por el Día Municipal de la Niña; empero, ni siquiera en un evento dedicado a reconocerla pudo contar con la vigencia de sus derechos. Por segundo año, la Alcaldía distinguió a niñas de distintos sectores, esta vez fueron 28 y se incluyó a niñas de centros de acogida y de personas con discapacidad.
Como varios actos organizados por las autoridades, el de ayer, también comenzó más tarde de lo previsto; pero Clarita, como la llaman en casa y en el colegio, llegó temprano; sin embargo, como casi todos los edificios de la ciudad, la Casa Municipal de la Cultura, donde se realizó el acto, no cuenta con ramplas de acceso para sillas de rueda, además que la distinción se organizó tras una seguidilla de angostas gradas que llevan al segundo piso del colonial lugar.
En distintas ocasiones, representantes de asociaciones de personas con discapacidad pidieron la implementación de ramplas y la modificación de accesos en edificios públicos para posibilitar el ingreso de las personas que tienen alguna discapacidad física-motora, pero la respuesta que les dan es que como son edificios patrimoniales no se puede hacer cambios de ese tipo; aunque tampoco se incluyen ramplas móviles.
A Clarita no la lleva una silla de ruedas, a ella la acompaña una silla de ruedas. Clarita la domina, se desenvuelve con facilidad, se integra de una manera ejemplarizadora y se hace una más, razón por la que la eligieron en la Escuela Taller Integración (ETI) para representarlos.
Desde hace cuatro años, Clarita vive en Sucre, vino desde Monteagudo, su hogar, donde tuvo que dejar a su familia en busca de mejores oportunidades para su vida, tras nacer sin un brazo y sin ambas piernas debido a un problema en su formación.
Dicen que el primer año sólo lloraba, que le costó acostumbrarse porque pensaba que nunca más vería a su madre y a sus hermanos. De pronto, a los nueve años estaba viviendo en un internado, lejos de su tierra y su cariñosa madre que tiene una discapacidad mental.
Tiene tres hermanos, uno mayor de 15 años y dos menores de diez que son gemelos, cuenta con una sonrisa grande al recordarlos. Se pone feliz porque al año los verá, ya tiene programado un viaje a Monteagudo.
“Ramplas”, responde sin duda cuando se le pregunta qué es lo que cree que más hace falta en la ciudad para que se desenvuelva con tranquilidad, y complementa diciendo que también urgen buses adecuados para las personas con discapacidad.
Ayer, decenas de niñas, al igual que Clarita, acudieron al patio de la Casa de la Cultura para degustar la comida preparada por hombres de distintas instituciones que quisieron demostrar de esa manera su apoyo a la equidad de género; aunque no había pollo al horno, el plato preferido de Clara, ella disfrutó de lo que le servían.
Por ahora, cursa el quinto de primaria de la escuela Cristina Aitken de Gutiérrez, una unidad inclusiva, pero a futuro espera aprender algún oficio y prepararse para ayudar a las demás personas.
Reclaman plan integral
La representante de la presidencia del Observatorio de Derechos Humanos, Tahí Abrego, pidió a las autoridades que además de realizar actividades conmemorativas se trabaje en la socialización de los derechos de las niñas y en la elaboración de políticas públicas que garanticen sus derechos.
Abrego recordó que el municipio aún no cuenta con un Plan Integral para la Niñez y Adolescencia pese a que es obligatorio que lo elabore para que se deje de hacer “actividades aisladas y puntuales que no resuelven la situación de vulnerabilidad a la que están sometidas las niñas”.
Asimismo, solicitó que se posesione al Comité Municipal de la Niñez y Adolescencia, electo en mayo pasado.
Plan de estadística
La Comisión del Concejo y la Secretaría de Desarrollo Humano Social buscarán la implementación del plan de estadística social municipal para fin de año o principios del próximo para ver “dónde estamos mejorando, qué estamos cubriendo y qué no hemos logrado atacar”, informó la concejala Kathia Zamora.
La autoridad dijo que se planteó al Concejo Municipal el desarrollo de una política de estadística municipal en obediencia a la Constitución Política del Estado; dicha política esperan que se pueda concretar en la creación de una dirección o unidad dedicada a estadísticas sociales.
En una sesión de honor, el Concejo y el Ejecutivo, a través de la firma de un Acta de Compromiso, se obligaron junto a instituciones públicas y privadas a trabajar en la promoción de los derechos de la niña, la educación y el trabajo para lograr el acceso a servicios básicos, en particular el agua potable.