“Estación Carnaval” de Paceña cierra con la gran Pukara y Pujllay en Tarabuco
La marca cervecera convoca a vivir la fiesta declarada Patrimonio Cultural e Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, este domingo 19 de marzo
Paceña cerrará su campaña "Estación Carnaval" en el municipio de Tarabuco, con la gran Pukara y Pujllay. Este domingo 19 de marzo, a partir de las 8:00 se vivirá la gran fiesta tradicional, que fue declarada patrimonio cultural e inmaterial de la humanidad por la UNESCO.
"Compartimos con los bolivianos tres meses de diversión en los que también se promovió el turismo interno. Vivimos las tradiciones en todo el territorio nacional con la alegría que nos caracteriza y, para cerrar con broche de oro, los convocamos a conocer la gran Pukara y Pujllay de Tarabuco, donde tendremos la presencia especial del grupo Proyección", anuncia el jefe de Eventos de la marca Paceña, Christian Hidalgo, según un boletín informativo de Paceña.
EL PUJLLAY
La danza del Pujllay de Tarabuco celebra su historia con un altar o Pukara, una especie de escalera llena de productos de la región, además de rosquetes y deliciosas bebidas. Esta tradicional y colorida edificación está llena de follaje silvestre y con toda clase de productos de la tierra: choclos, flores, papas, hortalizas, panales de abejas, carnes y bebidas y todo lo que la Pachamama les brinda a las cuales se agregan los roscones de pan (pillus) pintados con ayrampu.
Completando la pukara de carnaval, las banderas blancas, usadas sólo en ese ciclo por las chicheras, son para honrar a los ancestros fallecidos en la batalla de Jumbate, la más importante de la región y en la que se sublevaron los yamparas.
El Pujllay es característico de la cultura Yampara. Corresponde a la época húmeda, en la que también las personas recuerdan las muertes de la batalla de Jumbate. Esta combinación de acontecimientos, por los años 70 se convirtió en un evento relacionado con el Carnaval.
La tradición dice que las almas se quedan en el mundo de los vivos desde Todos Santos (inicios de noviembre) hasta la llegada del Pujllay. Esta fiesta tiene lugar cada tercer domingo de marzo, el momento en que además se celebran 201 años de la legendaria batalla de Jumbate.
En la vestimenta de los bailarines destaca las monteras adornadas en los varones y los "akjsus" de tejido fino en las mujeres.
Sobre los hombros levan la lliklla, una manta tejida en tejar y en la cintura una especie de falda. Lo interesante es que el tejido se divide en dos partes: una simple que es el llano y la otra llamada pampa, en la que revelan su cotidianidad.
Mucha de la riqueza cultural de la danza está en su vestimenta. Son característicos los zapatos de madera con plataforma y espuelas bien afiladas, que llegan pesar hasta cinco kilos. Las mujeres llevan en la cabeza cintas de colores con monedas y un sombrero con puntas a los costados y bastante decorado.