Santa Ana, un barrio que nació al mismo tiempo que la ciudad
Santa Ana y Alto Villa Charcas conforman una zona con potencial para el turismo
Santa Ana, antes denominada Huayapajcha, puede considerarse un verdadero patrimonio urbano de la ciudad de Sucre. Se encuentra ubicado en las faldas del cerro Churuquella, donde muy probablemente se levantaron las primeras construcciones de lo que vendría a ser la antigua ciudad de La Plata.
Más que un barrio en sí, Santa Ana es una zona extensa que aglutina a varias juntas de vecinos que habitan en las inmediaciones de un sector patrimonial por excelencia, en cuyas proximidades está el Churuquella, el emblemático cerro donde yace la imagen del Sagrado Corazón de Jesús, un lugar tradicional de peregrinación religiosa. Barrios como Alto Villa Charcas se fueron formando a lo largo del antiguo sendero a la cima, dando lugar a un pintoresco paisaje emergente de la notable expansión urbana de la última década.
Esta franja de la ciudad está ligada históricamente a la tradición religiosa. En Santa Ana está La Recoleta, el primer convento construido en la época colonial sede de la orden franciscana. También en el barrio se puede encontrar la ermita levantada en honor de San Francisco Solano, el “Tata” para los creyentes. A esta venerada imagen los fieles le atribuyen milagros para librar las hipotecas de inmuebles y también otros como la sanación de enfermos.
Cada 26 de julio, el barrio celebra la festividad de Santa Ana con una serie de actividades que van desde procesiones religiosas, kermesses y la tradicional feria de Alasita. Dentro de pocas semanas, la zona también volverá a ser testigo de la peregrinación a la cima del cerro, la misma que tiene lugar la madrugada de cada Viernes Santo.
Sin embargo, la realidad actual hace que también el barrio tenga sus necesidades propias de una zona poblada entre las que se encuentran, sobre todo, las dificultades del vecindario para llegar al sector alto con una línea de micros.
El mal estado del empedrdo que conduce a la cima del Churuquella hace dificultoso el tránsito vehicular y provoca el encarecimiento del pasaje de taxis, que puede costar hasta 20 bolivianos. Es por ello que uno de los principales reclamos del vecindario es la pavimentación de la “Vía Crucis” y el mejoramiento en las obras para evitar su deterioro a causa de las lluvias.
Asimismo, la construcción de un tanque de almacenamiento de agua podría solucionar un problema de carestía que se produce anualmente en época seca.
Otros vecinos también proponen que la Alcaldía pueda impulsar el mejoramiento de un sector potencialmente turístico, pues cada vez son más los grupos de turistas nacionales y extranjeros que realizan paseos en medio de uno de los pocos pulmones verdes de la ciudad.
LOS VECINOS
Julia Montero
"A veces vienen a molestar los borrachitos, muchos no tienen plata y piensan que yo vendo alcohol".
Jorge Choque
“No tenemos transporte de micros, nos deja en el Guereo y tenemos que tomar taxi o caminar varias cuadras".
Alex Aillón
“Es un lugar privilegiado de Sucre, se necesita que le pongan atención a un potencial que tiene la ciudad".
Arnulfo Arancibia
“Por ser zona alta, somos los primeros en sufrir cuando hay escasez de agua. También pedimos el pavimentado hasta la cima del cerro".