La familia de los cuatrillizos enfrenta una difícil realidad

La familia enfrenta una complicada realidad económica, según unas fotografías que llegaron ayer a este diario y el testimonio de una de las hermanas de Sabino Zárate, el padre de los cuatrillizos que nacieron el pasado miércoles en Sucre y que perdieron a su madre dos días después del parto.

Según Marivel Zárate, una de las tías de los cautrillizos, que llegó ayer a Sucre para visitarlos, su hermano se dedica a la agricultura y, eventualmente, a cualquier otro oficio, cuando consigue algún empleo en el centro poblado de Serrano.

La familia de los cuatrillizos, según esa fuente, vive en la casa del padre de Sabino Zárate, habitada también por una de sus abuelas.

Sabino Zárate tiene una hija de 18 años, otro de 16 y otro más de cinco años, según contó su hermana.

"Yo vivo en Santa Cruz. Mi hermano vive solo en Serrano con sus hijos y su suegra (...). Él es el mayor de todos mis hermanos", señaló.

Sabino Zárate es el único que se quedó a vivir en Serrano. El resto de sus hermanos decidió migrar a Santa Cruz.

La casa donde vive actualmente la familia de los cuatrillizos, según unas fotografías que llegaron a este diario, es precaria, construida con adobe. Casi no tiene muebles.

El Gobierno anunció que le construirá una vivienda social en Sucre a la familia y ofreció al padre de los cuatrillizos contratarlo como empleado público. Hasta que eso llegue, sin embargo, todo indica que la familia requerirá de mucha ayuda.

Sabino Zárate, que tiene 40 años, según contó su hermana, dijo el sábado que sacará adelante a todos sus hijos, poco antes de partir rumbo a Serrano con el cuerpo de su esposa, Justina Polando, que falleció tras un paro cardiorrespiratorio, precedido de muerte cerebral y falla multiorgánica.

Su hermana confirmó que Polanco fue sepultada ayer en Serrano, después de las 16:30.

SOLIDARIDAD

Ayer, los donativos continuaban llegando al Gíneco Obstétrico, donde se encuentran incubados los cuatrillizos de Polanco y Zárate. Una joven pareja, que cargaba en brazos a su pequeño hijo, dejó ropa y biberones, entre otros, poco antes de que el hospital informara sobre el estado de salud de los pequeños bebés de la familia Zárate-Polanco.

Patricia Laguna, una vecina de la ciudad, a través de las redes sociales, también continuaba con su campaña para recolectar ayuda. Laguna habilitó este número (76122982) para recibir los donativos.

SIGUEN ESTABLES

La directora del hospital Gíneco Obstétrico, María Elena Ponce, informó que el estado de salud de los cuatrillizos continúa estable y ratificó que únicamente el tercero en nacer continúa requiriendo ayuda de un respirador.

Ponce recordó que los cuatrillizos llegaron con seis meses y medio de gestación. El mayor pesó 1 kilo con 200 gramos; el segundo 1.000 gramos, y el tercero y cuatro, 800 gramos. El más grande midió 37 centímetros y los otros, 34.