Mesas Panamericanas cierran Convención Bienal
En una emotiva recepción en Casa Rodríguez, se clausuró anoche la XXVI Convención Bienal Nacional de las Mesas Panamericanas
En una emotiva recepción en Casa Rodríguez, se clausuró anoche la XXVI Convención Bienal Nacional de las Mesas Panamericanas a la que asistieron durante cuatro jornadas, al menos un centenar de damas en delegaciones de todo el país.
La satisfacción por el trabajo cumplido inundó a las hermanas panamericanas que dejaron el directorio 2017 - 2019. La presidenta Saliente, Felicidad Rosado de Arce pidió a Dios por la nueva directiva.
Rosado explicó que cada directiva de mesa emitió su informe a lo largo de los cuatros días que permanecieron reunidas en Sucre.
Las mesas redondas están centradas en temas relacionados con el desarrollo de las sociedades, como educación, seguridad, medioambiente y otros. Aunque solo un centenar de sus miembros estuvieron reunidas en Sucre, la asociación cuenta con unas 500 socias en diferentes mesas del país.
“Hermanas panamericanas, agradeciendo a Dios por sus bendiciones y su ayuda y a ustedes. Felicito al nuevo directorio electo, le deseo mucho éxito y les auguro empeño para seguir adelante. ‘Una para todas y todas para una’”, remarcó.
En la noche de gala se entregó la medalla Simón Bolívar por la “constancia panamericana” en la institución de las damas que cumplieron 15, 25 y 35 años o más de servicio voluntario.
También se entregó una plaqueta de reconocimiento a la labor panamericana y su aporte, dedicación y sabiduría a la orureña Lidia Leclere.
No faltaron los diplomas por su labor a los diferentes comités y sus miembros, para llevar adelante el funcionamiento de su institución.
Finalmente, tras un amplio acto protocolar, la Asociación Nacional de Mesas Panamericanas posesionó a su nueva directiva por los próximos dos años, a la cabeza de Martha Suárez de Yáñez (Mesa Trinidad), a quien la presidenta saliente le entregó la medalla rotativa.
En su discurso, Suárez comprometió seguir trabajando por las mesas, y al igual que su antecesora, propuso a las damas impulsar a las socias jóvenes, el amor por las mesas panamericanas.