“El Tribunal era un infierno”
Transcurrieron 30 días de aquella noche, y en las instituciones aún no hay regularidad

A un mes del incendio de las instalaciones del Tribunal Electoral Departamental (TED), aún persiste el olor a quemado cuando se transita por la calle La Paz, donde está la infraestructura que ardió en llamas el pasado 21 de octubre, exactamente hace un mes. Ese día nadie vaticinó que la masiva manifestación en puertas de la institución, que denunciaba fraude electoral, derivaría en hechos violentos.
Esa tarde jóvenes empezaron una marcha a la que se plegaron pobladores de forma masiva; todos se mostraron sorprendidos por la autoconvocatoria mediante redes sociales y hasta el arzobispo de Sucre, monseñor Jesús Juárez, alabó a la juventud y pidió mantener la calma antes de que se desbordara. La multitud se agolpó en las calles adyacentes a la institución y aunque la Policía cercó la cuadra, como lo había hecho desde que se desarrolló el proceso electoral, los movilizados pudieron más y se apoderaron del frontis de la institución. Fue creciendo la tensión, pese a voces que llamaban a la calma, y de pronto sobrevino la arremetida contra la infraestructura.
Un contingente policial llegó hasta el lugar y gasificó a los movilizados intentando controlar la situación; después de un tiempo se retiró –muchas personas pensaron que actuaron para evacuar a los vocales que, según testimonios, huyeron por el techo– y fue cuando una turba ingresó a la institución y la situación terminó de descontrolarse.
“De dónde habrán trasladado las piedras, eran del tamaño de una manzana”, afirma hoy Andrés Caballero, uno de los vecinos.
“Fueron una horas de zozobra, incertidumbre, al extremo de (pensar) que en cualquier momento se caería la casa”, dice al recordar la explosión de al menos siete vehículos institucionales que se quemaron esa noche en el sótano. “Escuchaba las explosiones, temblaba el edificio y mi casa”, rememora.
Para él, testigo de la situación, el “Tribunal era un infierno” por los papeles, galones de gasolina y llantas que sirvieron de leña para azuzar el fuego, pese al trabajo de los bomberos y personal de la Dirección Municipal de Riesgos que se prolongó hasta aproximadamente las 3:00 de la madrugada, cuando se retiraron; pese a que el fuego persistía, ladrones saquearon la institución llevándose computadoras y aparatos de sonido.
DAÑOS
Al día siguiente, los vecinos se quedaron sin servicios básicos, aunque afortunadamente estos se reconectaron en las 24 horas.
El fuego tardó en extinguirse cinco días. Durante toda esa semana los vecinos soportaron el olor y el calor que emanaba de la infraestructura.
Por las rajaduras en su vivienda que colinda con el TED, Caballero se vio obligado a desalojar a uno de sus inquilinos. Corrió con los gastos para reponer los vidrios dañados y la cubierta de su casa que quedó seriamente afectada.
A un mes de aquel suceso, cuenta que ya presentó una carta al TED. La institución contaría con un seguro para terceros, pero no recibió una respuesta hasta el momento.
“No sabemos si el seguro va a cubrir, nadie dice nada”, lamenta.
Del peligro al resguardo
CORREO DEL SUR transmitió en vivo la movilización el 21 de octubre en las afueras del Tribunal Electoral Departamental (TED) y el momento en el que manifestantes rompieron el cerco de seguridad instalado por la Policía en la esquina de las calles La Paz y Juan José Pérez.
Los protestantes se apostaron frente al edificio del TED exigiendo a los vocales que aceleraran el proceso de conteo de votos. Los dirigentes de Comunidad Ciudadana intentaron calmarlos, sin éxito. Un grupo de jóvenes comenzó a patear la puerta, y uno de ellos destrozó la cámara de seguridad con un palo.
Minutos después llegaron efectivos policiales lanzando gases lacrimógenos con los que dispersaron a los manifestantes. Luego de permanecer unos minutos, el contingente se retiró del inmueble.
Cuando uno de los manifestantes comenzó a romper la cámara de seguridad, el periodista de este diario se alejó de la puerta; en ese momento llegó la alerta de que policías se dirigían al lugar, por lo que decidió ponerse a buen recaudo a una cuadra del edificio.
Cuando el contingente se retiró, volvió a la puerta del edificio y vio que los manifestantes estaban quemando computadoras, sillas y documentos. Alcanzó a grabar videos y luego se replegó por seguridad.
Otros dos periodistas de CORREO DEL SUR que llegaron al lugar por la calle Bolívar también se vieron obligados a ponerse a buen recaudo en una de las viviendas vecinas al edificio.
Sin embargo, incluso al patio de la vivienda llegaron piedras e incluso trozos de cemento.
La gasificación, con la que policías intentaron frenar a la multitud, se propagó por la vivienda y afectó a sus habitantes. La familia vivió horas de angustia porque al propagarse el fuego en la institución crecía el temor de que dañara las conexiones de gas domiciliario y provocara un mal mayor. El equipo logró salir pasadas las 23:00.
Silvia Salame: “Es algo que no le desearía vivir a nadie”
La excandidata a senadora por Comunidad Ciudadana (CC) Silvia Salame estuvo el 21 de octubre en el TED para controlar el cómputo de los votos. Dice que lo que pasó esa jornada “es algo que no le desearía vivir a nadie”.
Momentos antes de que los movilizados rompieran el cerco de los policías, Salame salió a las calles colindantes para intentar calmar los ánimos, sin embargo, ya era tarde, algunas personas le gritaron e incluso le tiraron con una botella.
Retornó a la institución y al ver que dos periodistas de televisión estaban al frente del edificio les pidió que ingresaran porque los ánimos se exacerbaban aún más.
Al interior, ella y su equipo político se resguardaron en la sala que estaba en la planta baja de la institución. El humo los ahogó porque para entonces los movilizados ya habían comenzado a quemar en la puerta del Tribunal.
Cuando la situación empeoraba, personal de la Policía los condujo por pasillos y corredores hasta llegar a una escalera que en un principio se rehusó a subir. “Es de vida o muerte”, le dijeron. En el último peldaño se encontró con el tejado de otra vivienda; “las tejas se caían, mis zapatos se quedaron atascados”, recuerda, pero logró llegar hasta el patio de otra casa donde la ayudaron a bajar.
Por similar situación atravesaron los funcionarios de la institución y varios equipos de periodistas.
“Mientras afuera se escuchaba el bullicio, las personas tenían ataques de histeria, lloraban, se despedían, en fin fue algo muy fuerte”, cuenta.
TED en nuevo edificio
Desde el viernes, el personal de planta del Tribunal Electoral de Chuquisaca (TED) reanudó sus actividades en la calle Colón Nº 331, sin embargo aún no brinda atención a la población. Porque aún realizan las gestiones para la conexión del servicio de internet para dotar certificados de impedimento, entre otros.
El personal se encarga de trámites administrativos internos y de la reconstrucción de contratos de los proveedores informaron desde la institución.
Sereci reanudará labor
El Servicio de Registro Cívico (Serecí) de Chuquisaca, que funcionaba en el mismo edificio que el Tribunal Electoral Departamental (TED), ya cuenta con un nuevo lugar para reanudar sus funciones.
La directora departamental del Serecí, Anapaola Pino, informó que estos días se encargarán de trasladar todos los equipos y muebles a las instalaciones, para proceder al sistema de conexión de internet.
“Todas las oficinas del Serecí han perdido sus equipos, hemos podido reunir (equipos) del área que no fue tan afectada”, dijo.
Aún no hay una fecha para la apertura de las oficinas, sin embargo adelantó que espera no pase del martes o miércoles de la próxima semana. Añadió que oportunamente harán conocer al público el lugar y fecha de reinicio de actividades.
El día del incendio, el personal del Serecí trabajó hasta mediodía por el cierre del edificio al público debido al cómputo de votos en el TED.