Crean una cabina desinfectante automática; conozca la Cadix Su20
Un técnico automotriz armó una cámara especial para ayudar a enfrentar el coronavirus
En tiempos de coronavirus, solo diez segundos son suficientes para desinfectarse de pies a cabeza en la Cabina de Desinfección Automatizada Sucre 2020 (Cadix Su20), creada por el técnico automotriz Juan Abel Campos.
Esta innovación improvisada en materiales por la falta de provisiones debido al confinamiento que la población está llamada a cumplir, está pensada en desinfectar a las personas de un posible contagio del covid-19 que acecha a la población mundial, con especial atención a las manos y los pies.
“Hemos tratado de innovar. Esta cabina tiene pulverizadores donde te va a desinfectar incluyendo las manos y la planta de los pies. También se va a poder hacer infusiones con plantas medicinales como el eucalipto, romero, jengibre…”, explicó a Correo del Sur Digital, el técnico de 33 años de edad.
Para su creación solo necesitó carpas, material que hace de paredes y techo, y nylon grueso para simular el vidrio. “Hemos tratado de hacer todo lo que estaba en nuestro alcance, esto es solo una improvisación, un prototipo porque como estamos en cuarentena las tiendas no están abiertas”, continuó.
Campos dijo que la intención original de la cabina era identificar el grado de temperatura de una persona. Hoy, el diseño cuenta con un sensor que alerta cuando alguien ingresa. “El sensor capta que la persona se encuentre en el lugar indicado; se activa y va pulverizando”, continuó. Bastan al menos diez segundos para dejar que la máquina haga su trabajo.
El equipo funciona con una compresora y un mezclador en el que se vacía el líquido desinfectante y próximamente la infusión de plantas medicinales. El equipo aguanta una presión de 60 PSIs (libras por pulgada cuadrada por sus siglas en inglés) y trabaja automáticamente junto con la compresora que funciona con 12 voltios de energía.
Juan Abel y su hermano Beimar, dueños del taller Centro Motors Jhon Cars, coinciden en que la cabina se puede instalar en edificios públicos y privados. Cada pedido puede estar listo hasta en tres días a un costo de 2.000 dólares, dado que los materiales más caros son los sensores, el pulverizador y la compresora.
Conozca más detalles en el video publicado en esta nota.