Bautizan a Gael en medio de reflejos de una lenta recuperación
El niño que fue flagelado por su tía continúa internado en terapia intensiva
Gael, el niño flagelado por su tía, fue bautizado este sábado desde su cama de terapia intensiva tras la misa que se celebró en la capilla del Hospital Santa Bárbara. El sacerdote David Coa; la madre, Susana; la madrina, Cristina Bejarano, y grupo de personas se dirigieron a la sección de terapia intensiva infantil donde el pequeño fue ungido como hijo de Dios.
La celebración de la misa fue atípica. Unos contados feligreses ingresaron a la capilla provistos de mascarillas como elemento de protección para evitar el coronavirus, mientras que funcionarios municipales de la Defensoría de la Niñez y Adolescencia lo hicieron también con overoles, lentes y guantes.
Todos estuvieron ahí con dos propósitos: recibir a Gael como un nuevo cristiano y pedir a Dios que obre un milagro en la salud del niño para salvar su vida.
Gael, un niño de cinco años, fue brutalmente agredido por su tía hasta dejarlo inconsciente, en un estado de coma del que aún no se recupera desde el 30 de abril. El niño se quedó a vivir con la tía paterna porque la madre, por necesidad, viajó a trabajar a Santa Cruz. La madruga del 1 de mayo fue ingresado a terapia intensiva del hospital Santa Bárbara debido a lesiones que sufrió en su cabeza.
El bautizo de Gael se realizó en dos partes: la primera, la misa cuyo momento más emotivo se vivió en el encendido de la vela a cargo de la madrina con el fuego del cirio pascual; la segunda, en la unción del niño con el crisma y el derrame del agua bendita en la sala de terapia intensiva, a donde ingresaron el sacerdote, la madre, la madrina y un representante del ministro de Deportes, Milton Navarro, que fue invitado al acontecimiento.
Al salir del bautizo, la madre, Susana, le dijo a CORREO DEL SUR que su hijo ya tiene algunos pequeños reflejos. Besó a su niño en la mejilla y este respondió abriendo un ojo. En la sala le contaron a la mamá que Gael, incluso, responde apretando con su manito la mano de otra persona.
El director del hospital Santa Bárbara, Enrique Leaño, informó que ayer, viernes, los médicos desintubaron al niño aunque todavía su estado de salud es crítico, pero muestra una leve recuperación.
Este diario conoció que por gestiones de la Representación Departamental de la Defensoría del Pueblo, la Dirección del hospital Santa Bárbara está buscando una fuente de empleo temporal para la madre en ese centro de salud; hasta el miércoles se conocerá si esa intención se efectiviza o no, aunque todo hace prever que así será.
En tanto, las oraciones de hoy y mañana por la salud de Gael siguen elevándose hacia Dios, para que el niño de cinco años pronto se recupere y vuelva a la alegría de la vida.