Hospitales: Compromisos de las autoridades no se concretan y el virus avanza en Sucre
Por el momento se encara la emergencia con lo que se tiene: 8 profesionales internistas de los 12 necesarios. Las enfermeras también escasean, sobre todo, considerando la probabilidad cierta de un incremento exponencial de casos en Sucre
Reclamos y necesidades sobran en cada inspección que se realiza a los hospitales de Sucre. A casi tres meses del inicio de la emergencia sanitaria, los compromisos de las autoridades para contrarrestar al covid-19 no se concretan, mientras el virus avanza a pasos agigantados causando preocupación en estos nosocomios.
El viernes pasado, representantes del Comité Cívico de Defensa de los Intereses de Chuquisaca (Codeinca) y el Servicio Departamental de Salud (Sedes) se hicieron presentes en los hospitales Santa Bárbara y San Pedro Claver de Lajastambo y, en ambos nosocomios, directores y personal reconfirmaron que las autoridades nacionales, departamentales y municipales no cumplieron sus compromisos de dotación de implementos de bioseguridad, adquisición de equipamiento y contratación de personal para el funcionamiento de los centros covid.
EL SANTA BÁRBARA, A MEDIAS
El hospital de choque Santa Bárbara logró habilitar ocho camas en el centro centinela para pacientes covid: cinco de terapia intensiva debidamente equipadas y tres que están a medias. todo se adquirió con recursos propios y de la Gobernación según pudo conocer Correo del Sur Digital en la referida visita que acompañó el viernes.
“El compromiso del Gobierno departamental a través del Sedes ha sido hacer esta adecuación de la infraestructura y dotar de tres unidades de terapia intensiva. ¿Qué comprende estas unidades de terapia intensiva? Son las camas de cinco movimientos, monitor multiparamétrico, ventiladores y las bombas de infusión. Eso es lo que hemos dotado como el Gobierno departamental”, afirmó la directora del Sedes, Maribel Quiroga.
La contraparte del Gobierno central es de siete unidades de terapia intensiva, 20 camas de hospitalización además de 98 profesionales en salud para el funcionamiento del centro centinela, de los cuales no se cumplió nada.
FALTAN PROFESIONALES
Por el momento se encara la emergencia con lo que se tiene: 8 profesionales internistas de los 12 necesarios. Las enfermeras también escasean, sobre todo, considerando la probabilidad cierta de un incremento exponencial de casos en Sucre.
“Les estamos explotando a las enfermeras, necesito por lo menos 12 licenciadas y 12 auxiliares”, apuntó la jefa de Enfermeras del Santa Bárbara, Yolanda Ardaya.
Con este panorama, el director del hospital, Enrique Leaño, hizo notar su preocupación. “Tenemos muchas deficiencias en lo que se refiere al covid-19; lamentablemente son por incumplimiento del Ministerio de Salud que, hasta la fecha, no ha otorgado lo que comprometió a un principio”.
Destacó la proactividad y la organización de los jefes de servicio para tratar de paliar las necesidades en plena emergencia, aunque dijo ser consciente de que esto no es sostenible.
EQUIPO PCR Y ECÓGRAFO PORTÁTIL
Para la segunda quincena de julio está previsto el arribo y la entrega de un equipo de laboratorio PCR (Reacción en Cadena de la Polimerasa, por sus siglas en inglés) y de un ecógrafo portátil para este hospital de tercer nivel.
“Son 23 día más la instalación, 35 días (…) En la segunda quincena de julio ya se podrá contar con los equipos”, informó Quiroga.
ABANDONO DEL SAN PEDRO CLAVER
Pese a la insistencia del entonces director del hospital San Pedro Claver, Giovanni Villavicencio (quien renunciaría a su cargo horas más tarde), el equipamiento comprometido no llega, y tampoco se efectiviza la contratación de recursos humanos para responder a las necesidades de la población en época de pandemia.
Solo se lograron habilitar salas de terapia intermedia con 20 camas, pero readecuando equipamiento del mismo hospital. Esto no permite hablar de un centro de terapia intensiva para pacientes covid en este momento.
La Alcaldía se encargó de reacondicionar ambientes destinados para ser el que se ha constituido en el centro de atención más importante de pacientes críticos de covid-19, pero la dotación del equipamiento prometido se hace esperar. Cabe hacer notar que ya se contaba con la construcción en Lajastambo; solo se le dio funcionalidad.
Se habilitaron y aislaron ocho cubículos que funcionarán como salas de terapia intensiva. Estas cuentan con tomas de oxígeno y de energía eléctrica, entre otros trabajos que le dan funcionalidad.
También se procedió con compras menores, como artículos de limpieza, además de indumentaria de bioseguridad para el personal que debe desempeñar sus funciones en el área de terapia intensiva. Sin embargo, cada uno de esos espacios se encuentran prácticamente vacíos.
ENTREGA PARCIAL
El Gobierno central entregó parcialmente el equipamiento comprometido, que consiste en diez camas, un monitor multiparamétrico, dos ventiladores no invasivos y dos invasivos, cuatro termómetros digitales infrarrojos, dos camillas, dos soportes de suero, además de colchones, sábanas y toallas.
Hasta la fecha, no hay luces de la contratación de recursos humanos.
“Al momento no estamos en la condición de armar, por lo menos, una cama en terapia intensiva (…) Nos dicen que la adquisición del equipamiento está en trámite, pero, para mí, mientras no esté en el hospital no cuenta, es como si no hubiera”, enfatizó el viernes el que, hasta ese momento, era Director del San Pedro Claver.
“QUE DEJEN (SUS CARGOS)”
Tras la evaluación de ese día, el presidente de Codeinca, Delfín Romero, manifestó su preocupación e instó a las autoridades a dejar sus cargos si es que no tienen la capacidad de cumplir con sus compromisos.
“¡Qué lamentable que hasta el momento el Gobierno no haya cumplido sus compromisos! (…) Lamentablemente la Alcaldía no ha cumplido (…) Si no tienen capacidad, que dejen (sus cargos) y que otros entren con capacidad y voluntad”, manifestó.