Planta de oxígeno: Cinco años del contrato y aún no funciona

Acaban de cumplirse cinco años de la adjudicación de la planta procesadora de oxígeno del hospital Santa Bárbara, un proyecto que hasta ahora no acaba de respirar y está envuelto en una investigación por sospechas de corrupción. ¿Qué salidas hay para este equipamiento?

Según los criterios técnicos que recibió el Servicio Departamental de Salud (Sedes) Chuquisaca, esta planta requiere una inversión de entre 44 mil y 90 mil dólares, aunque otras voces desahucian su funcionamiento.

El director del Sedes Chuquisaca, Enrique Leaño, dice que tienen informes de ingenieros que han ofrecido poner en funcionamiento la planta en plazos que van de los 20 a los 90 días.

Sin embargo, admite que también “hay criterios de ingenieros que dicen que esa planta ya no funcionaría o que, para funcionar, tardaría un año”.

La intención del Sedes es poner en funcionamiento la planta procesadora de oxígeno, “porque tampoco se puede perder la inversión de cerca de 3 millones de bolivianos”. agrega Leaño.

INVESTIGADOS

En este momento la planta es motivo de un conflicto judicial en el que el exdirector del Sedes Chuquisaca, Martín Maturano, y los funcionarios públicos Romel Poppe, Wilfredo Campos y Waldemar Peralta, además del proveedor Rodrigo Villafuerte, están siendo investigados por la presunta comisión de los delitos de incumplimiento de contrato, incumplimiento de deberes y conducta antieconómica.

Leaño recuerda que la planta procesadora de oxígeno fue adquirida a finales de 2015 –el contrato de adjudicación se firmó el 30 de septiembre de ese año– y entregada a principios de 2016, pero en ningún momento entró en funcionamiento.

“Hemos recibido una notificación de los abogados de la Gobernación donde nos indican que, mientras esté en proceso, no se va a poder hacer ningún tipo de desembolso de recursos, ninguna modificación presupuestaria”, aclara la autoridad sanitaria.

Explica también que para seguir adelante en el intento de hacer funcionar la planta, primero, se debe esperar un informe de conclusiones de la parte legal de la Gobernación, que “indique que esa planta se reactive o se puedan hacer todos los mecanismos para su funcionamiento”.

Leaño adelanta que más allá del proceso, desde el Sedes se insistirá en que “hay responsabilidades en el tema de salud” y que, de manera paralela a la demanda, “sin perjudicar la investigación”, se va a “solicitar que esta planta empiece a funcionar”.

EN LA FISCALÍA

En la Fiscalía Departamental hay una denuncia contra los responsables de la adquisición y recepción de la planta procesadora de oxígeno que está en la fase investigación preliminar, confirmó el fiscal anticorrupción Daniel Fernández.

Dice que hasta ahora se ordenó la anotación preventiva de los bienes de los denunciados –Maturano, Poppe, Campos y Peralta–, se hizo una inspección ocular de la planta ubicada en el Hospital Santa Bárbara (calle Destacamento 111), un registro del lugar y se recibió la declaración de los denunciados.

Fernández manifesta que ahora se esperan respuestas a varios requerimientos informativos solicitados a empresas y fábricas especializadas, para conocer, desde un punto de vista especializado, qué criterios tienen respecto a la planta procesadora.

En su criterio, esa respuesta documental “es la clave” para analizar la situación jurídica de los denunciados y asumir una posición sobre si se les imputa o se los sobresee.